Asesino en serie mató a los especialistas que participaron en su divorcio

Hace casi una década, después de que Dwight Lamon Jones amenazó con ahogar a su esposa, un psiquiatra recomendó una evaluación de su salud mental como parte de su proceso de divorcio.

El doctor Steven Pitt testificó que sin ayuda psiquiátrica Jones “continuaría dañándose”, según un documento judicial sobre el proceso de divorcio de 2010. “Se volverá cada vez más paranoico, probablemente psicótico, y tendrá un riesgo mayor de recurrir a la violencia”.

Esa predicción se hizo realidad. El jueves 31 de mayo por la noche, Jones inició una masacre de cuatro días en Phoenix y sus alrededores, en la que mató a tiros a seis personas.

Su primera víctima: Pitt.

Jones fue de víctima en víctima a bordo de su Mercedes Benz dorado. Al menos cuatro de las víctimas estaban relacionadas de algún modo con su divorcio, llevado a cabo en un tribunal familiar en el condado de Maricopa, Arizona.

A medida que crecía el número de muertos, los investigadores también miraban “que el señor Jones regresaba al lugar del crimen, en un esfuerzo por corregir algunos errores”, dijo el 4 de junio el subdirector de la policía de Scottsdale, Rich Slavin, en una conferencia de prensa.

Un día después de matar al psiquiatra, el supuesto asesino fue a las oficinas de la abogada de su ex esposa. Ella se había ido, pero Jones mató a dos asistentes legales, Veleria Sharp y Laura Anderson, dijo la policía.

El mismo día, Jones mató en su oficina a un psicólogo llamado Marshall Levine. Esta víctima no estuvo involucrada en el divorcio, pero estaba arrendando el espacio a un psiquiatra que había tratado a su hijo durante el proceso judicial.

El domingo 3 de junio, Jones mató a un hombre y una mujer en su hogar en Fountain Hills, al noreste de Phoenix. Sus identidades aún no se han dado a conocer, y no está claro qué relación podrían haber tenido con el sospechoso.

Esta matanza llegó a su fin la madrugada del lunes cuando Jones, de 56 años, se suicidó al dispararse después de que la policía rodeó su habitación en un hotel en Scottsdale.

Ese fue uno de varios sitios en los que había vivido desde 2009, después de haber terminado la cómoda vida que su ex esposa, una doctora con amplia experiencia, le había proporcionado cuando desempeñaba el papel de padre de familia que se quedaba en casa, de acuerdo con registros policiales y judiciales.

Por el divorcio Jones obtuvo de su ex esposa el Mercedes Benz, $ 100,000 - y $ 6,000 al mes como pensión alimenticia durante cinco años.

La ex esposa y el hijo de la pareja resultaron ilesos en el ataque.

“Como profesional médico y ciudadana, estoy profundamente triste por la tragedia causada por mi ex marido”, dijo Connie Jones en un comunicado. “Era una persona muy perturbada emocionalmente, como lo confirman los registros judiciales. He temido por mi seguridad durante los últimos nueve años”.

Ella y su nuevo esposo, un detective retirado de Phoenix, habían advertido a la policía sobre la posible participación de su ex cónyuge en los homicidios luego de reconocer los vínculos entre las víctimas.

Pitt era un experto forense conocido a nivel nacional, que fue consultor en las investigaciones sobre la muerte de JonBenet Ramsey y la masacre de Columbine High School. A menudo daba comentarios a los medios de comunicación, incluido Los Angeles Times, sobre cómo los expertos intentan prevenir la violencia. También se desempeñó como experto en casos de divorcio.

Connie Jones solicitó la separación después de que su esposo amenazó con matarla durante una discusión frente a su hijo adolescente, en mayo de 2009.

Amenazó con “golpear” la cabeza de su esposa y “ponerle las manos” encima, la llamó “excremento muerto” y le dijo: “te llevaré a la piscina y te ahogaré”, según los registros judiciales. Fue arrestado por violencia doméstica.

La mujer también solicitó una orden de protección contra su ex esposo que le impedía ver a su hijo y contrató a un agente de seguridad para asegurarse de que no se presentara, según los registros judiciales.

Los vecinos le dijeron a la policía que a veces ella abría la puerta con un arma en la mano.

Después del arresto de 2009, Jones fue hospitalizado para una evaluación psiquiátrica. Pitt determinó que “tenía un trastorno de ansiedad, estado de ánimo y características de trastornos antisociales, narcisistas y paranoides”, según un testimonio.

Los registros de la corte mostraron que en 2011, más de un año después del divorcio, Jones se comportó bien durante las visitas supervisadas por el consejero de su hijo, y que había tomado 36 semanas de clases de violencia doméstica mientras estaba en libertad condicional.

Pero Jones aparentemente todavía no había recibido tratamiento sobre salud mental, y le dijo a los funcionarios judiciales que ningún terapeuta estaba dispuesto a trabajar con él. El lunes aún no se tenía información de si finalmente tomó un tratamiento.

La policía encontró y comenzó a vigilar a Jones el domingo, probablemente después de haber matado al hombre y la mujer en Fountain Hills.

La policía lo vio tirar una bolsa que contenía una pistola calibre .22 que pertenecía al hombre asesinado, y luego lo identificó definitivamente como el sospechoso en el resto de las escenas del crimen, según Slavin.

Cuando los agentes rodearon su habitación de hotel, Jones les disparó siete u ocho veces, sin impactarlos.

Estos ataques reflejan “lo peor de la humanidad”, dijo el sheriff del condado de Maricopa, Paul Penzone en la conferencia de prensa.

Dijo que probablemente hubiera habido más víctimas si la policía no hubiera encontrado a Jones, pero lamentó las vidas que se perdieron: “Esto no es una historia de éxito. Es una historia que ha terminado”.

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