En respuesta a la promesa de Trump de usar militares para detener la caravana de inmigrantes, el Pentágono anunció el envío de más tropas a la frontera

El Pentágono enviará 800 o más efectivos de tropas adicionales a la frontera sudoeste, en respuesta a la promesa del presidente Trump de usar el ejército para bloquear la entrada al país de una caravana de inmigrantes centroamericanos, afirmó un funcionario estadounidense.

Se espera que el secretario de Defensa, James N. Mattis, firme una orden el 25 de octubre, para despachar las tropas. Éstas se limitarán a brindar apoyo logístico a la Patrulla Fronteriza, que seguirá siendo responsable de detener a cualquier persona que cruce la frontera ilegalmente, indicó el funcionario.

En un tuit, el jueves 25 Trump remarcó que estaba “sacando a los militares” para asegurar la frontera, y calificó la cuestión de “emergencia nacional”.

El primer mandatario aprovechó el tema de la inmigración antes de las elecciones de mitad de mandato, que serán el próximo noviembre, pero la inmigración ilegal este 2018 será la quinta más baja registrada en los 45 años anteriores.

Se espera que el personal militar ayude a la Patrulla Fronteriza construyendo cercas en varios puntos clave donde se cree que los migrantes pueden intentar cruzar, explicó el funcionario.

Las tropas también asistirán a la Patrulla Fronteriza con vehículos, tiendas de campaña y posiblemente con apoyo médico, afirmó el funcionario.

Se espera que las tropas adicionales lleguen a la frontera a partir de la próxima semana.

Funcionarios del Pentágono indicaron que todavía están analizando de dónde procederán las tropas y dónde se ubicarán a lo largo del límite nacional. Es probable que la mayoría de ellas provenga de las unidades de la Guardia Nacional, aunque también podría emplearse a personal en servicio activo.

No está claro si las tropas estarán armadas, aunque los funcionarios del Pentágono afirmaron que siempre conservan el derecho a defenderse.

En el marco de una operación previa del Pentágono, a este 25 de octubre alrededor de 2,000 soldados de la Guardia Nacional ya asisten en la frontera.

Restringir las tropas a una función de apoyo significa que éstas no violarían la Ley Posse Comitatus, que prohíbe al gobierno federal utilizar militares en funciones de la policía nacional.

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