Anuncio

Trump podría obligar de nuevo a los solicitantes de asilo a esperar en México

Share

El gobierno de Trump realizó acciones el pasado lunes para reiniciar una controvertida política que obliga a los solicitantes de asilo centroamericanos a regresar a México para esperar el fallo de sus casos, un enfoque denominado “Permanecer en México”.

La medida se produjo después de que un tribunal federal de apelaciones de California levantó temporalmente una orden judicial, el pasado viernes, que había bloqueado la política.

Funcionarios de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de EE.UU informaron el pasado lunes al personal de la oficina principal de asilo de la agencia en Arlington, Virginia, que debían preparar a los solicitantes de asilo para ser enviados de nuevo a la frontera, según correos electrónicos obtenidos por Los Angeles Times.

Anuncio

Este lunes un memorando interno de la agencia, citó la decisión tomada el pasado viernes por la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito, que aceptó la moción de emergencia del gobierno para suspender el fallo de un tribunal inferior que había bloqueado la política. La administración llama al criterio “Protocolos de protección al migrante” (MPP, por sus siglas en inglés).

“Esto significa que la implementación de MPP puede reanudarse en espera del litigio en curso”, se lee en el memorando. “Mientras tanto, el personal está a la espera de nuevas órdenes”.

Aunque el fallo legal permite a la administración obligar nuevamente a los solicitantes de asilo a esperar en México mientras sus casos son procesados en cortes estadounidenses, las autoridades no trasladaron a ningún migrante durante el fin de semana pasado.

Se estima que la corte de apelaciones decidirá esta semana si aplaza la suspensión temporal y permite que la política “Permanecer en México” siga vigente.

“El estatuto que autoriza explícitamente el uso de los Protocolos de Protección al Migrante data de más de dos décadas y el Departamento de Justicia defenderá firmemente su capacidad de usarlo”, expresó Alexei Woltornist, vocero de dicha entidad.

El Departamento de Seguridad Nacional no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.

En el marco de la política -que la entonces secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, anunció en diciembre pasado- las autoridades trasladaron de manera forzada a 1.000 solicitantes de asilo, en su mayoría oriundos de América Central, a México.

El lento y caótico despliegue de la medida frustró a los funcionarios de la administración, los oficiales de primera línea de inmigración y los defensores por igual, además que los tironeos legales agregaron confusión.

El fallo inicial de la corte, que bloqueó la acción de más regresos, se produjo un día después de que el presidente destituyó a Nielsen, quien acababa de pedir una agresiva ampliación de la política en toda la frontera y lanzó una purga de los principales funcionarios de Seguridad Nacional de Trump.

El primer mandatario también amenazó con trasladar a los inmigrantes detenidos a las llamadas “ciudades santuario” en California y otras zonas, a pesar de las advertencias de sus propios asesores de que tal medida probablemente violaría la ley.

El gobierno mexicano, aunque ha cooperado hasta ahora, insiste en que la política de retornos es unilateral y emitió una declaración cuidadosa la semana pasada rechazando la sugerencia de la administración Trump de que el lineamiento es parte de un “programa cooperativo ampliamente negociado” con sus homólogos mexicanos.

Para Alan Bersin, quien se desempeñó como alto funcionario de Seguridad Nacional durante el gobierno de Obama, “no hay nada inusual” en que el departamento siga la dirección de la política “Permanecer en México” mientras se levanta la medida cautelar.

Pero Judy Rabinovitz, subdirectora del Proyecto de Derechos de los Inmigrantes de la ACLU, quien argumentó el caso inicial contra ésta política, cuestionó por qué la administración la reanudaría temporalmente, dado que los jueces pronto podrían bloquearla otra vez. “No me sorprende nada lo que haga el gobierno en esta instancia, pero sí me sorprende, un poco, por qué intentarían desplazar a más personas... cuando estamos esperando una decisión de la corte”, afirmó. “La gente se ve perjudicada por esto, y el daño aumentará exponencialmente si siguen expandiendo este proceder en otros lugares”.

Trump, elogió al Noveno Circuito, algo raro en él, por la decisión del pasado viernes, pero el presidente a menudo los ha infamado por rechazar sus iniciativas estrictas con la inmigración. “¡Finalmente, una gran noticia en la frontera!”, tuiteó el mandatario.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí

Anuncio