Anuncio

El Maratón de Los Ángeles ha encontrado su mejor ruta por ahora

(Genaro Molina / Los Angeles Times)
Share

Más de tres décadas han pasado desde que el Maratón de Los Ángeles hizo su debut después de las Olimpiadas de 1984. La primera carrera atrajo a más de 10,000 corredores y hubo pláticas de que iba a igualar a Boston, Nueva York y Berlín.

El Maratón de Los Ángeles no ha alcanzado ese nivel- y quizá nunca lo haga- pero ha comenzado a convertirse en una de las mejores en cuestión de recorridos escénicos.

El domingo, en la ruta “Stadium to Sea” se espera que atraiga a más de 24,000 corredores y un grupo de elite que incluye a tres de los ganadores en la rama masculina y también a la campeona de la rama femenil.

Anuncio

“No todo corredor puede ganar el oro olímpico”, dijo Amby Burfoot, un exganador del Maratón de Boston y escritor de “Runner’s World”. “Cada maratón solo puede ser lo mejor en lo que tiene”.

Desde el inicio, Los Ángeles ha estado en desventaja por muchos años, sino décadas- al competir con maratones más establecidos en el circuito de los Maratones Mundiales Mayores. La cuestión del timing también ha sido un factor.

El calendario del maratón tiende a ser muy frecuente en la primavera y el otoño, cuando las temperaturas son favorables para durar 26.2 millas. Debido al tiempo de recuperación requerido después de cada carrera, los competidores tienen que elegir en cuál competir.

Así que los maratones tienen que tener algo especial para atraer a los nombres más fuertes y a los corredores recreacionales.

A pesar de su inicio prometedor, Los Ángeles sufrió mucho por años y eventualmente, luchó para pagar sus deudas. El exdueño de los Dodgers, Frank McCourt, pagó por tener los derechos en 2008 y parecía estar listo para remediar su defecto más grande- una ruta que le faltaba ser más atractivo.

La ruta luego fue cambiada a Dodger Stadium y pasó por varios sitios simbólicos, incluyendo Walt Disney Concert Hall y Rodeo Drive-antes de terminar en Pacific Ocean.

“Está de bajada, lo que significa que la gente puede correr bien”, dijo Burfoot, agregando: “Hay algo que ha atraído a un corredor el correr a la playa, hacia el océano, que tiene una briza fresca”.

Los Ángeles ahora está clasificado entre los cuatro maratones más grandes en el país, y los 10 más grandes a nivel mundial.

La carrera de 2016 tuvo un incentivo más porque también sirvió para las eliminatorias de las Olimpiadas de Estados Unidos, con Galen Rupp obteniendo el primer puesto y el alumno de UCLA, Meb Keflezighi, logró el segundo lugar.

El veterano Keflezighi lo llamó “una vuelta de victoria”.

Aún con todo, la mayoría de los años, Los Ángeles aún no atrae a los mejores atletas, parcialmente porque está en medio del calendario de las carreras en Tokio, Boston y Londres y parcialmente por el dinero. El premio de $100,000 que ofrece la carrera del domingo es menor a la de $400,000 de Tokio, $800,000 de Boston y los $300,000 de Londres.

Pero este fin de semana, el evento varonil debería ser competitivo, dado el trío de ganadores pasados.

“Este es uno de los maratones más emocionantes que he visto y que me he enfrentado”, dijo el campeón defensor Elisha Barno, de Kenia. “Espero con ansias esta cancha”.

La campeona defensora femenil, Hellen Jepkurgat, también de Kenia, le llamó “una de mis rutas favoritas”.

Después de haber estado en el primer maratón de Los Ángeles y los otros después de ello, Burfoot espera que el evento vaya bien.

“Cada maratón tiene su propio sabor, su propio color y su tradición”, dijo. “Creo que Los Ángeles está en ruta a encontrar su propio camino”.

Anuncio