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La jefa del LAUSD, Michelle King, anunció que no regresará a su cargo y planea jubilarse

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La superintendente del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD), Michelle King, cuyo permiso médico de cuatro meses para la realización de un tratamiento contra el cáncer dejó una brecha en el liderazgo de un sistema escolar que enfrenta desafíos en numerosos frentes, no volverá a su puesto y planea jubilarse más adelante este año, anunció el distrito el viernes pasado.

La inminente salida de King significa que la nueva mayoría en la Junta de Educación, la primera elegida con el apoyo sustancial de patrocinadores de escuelas charter, deberá seleccionar a un líder para el segundo distrito escolar más grande de la nación. Tal responsabilidad es la tarea más importante para una junta escolar, y la salida de King ocurre durante un período lleno de desafíos y cambios trascendentales. El sistema escolar se enfrenta a un déficit presupuestario a largo plazo, contratos de trabajo ya expirados y una brecha entre los educadores tradicionales y los patrocinadores de las charter, que son privadas y están creciendo significativamente -el LAUSD ya tiene más escuels charter que cualquier otro sistema escolar-.

Las charters y las escuelas del distrito compiten directamente por los estudiantes y el financiamiento que estos representan. La nueva mayoría de la junta intenta mantener un acto de equilibrio delicado: fortalecer las escuelas tradicionales y al mismo tiempo apoyar la expansión de más charter. Quien reemplace a King estará en el centro de ambas prioridades.

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King fue nombrada por una mayoría de la junta escolar anterior, que a menudo se había enfrentado con defensores de las charter, y su longevidad como superintendente después de las elecciones del año pasado había sido una pregunta abierta.

En una declaración, King reveló que se encuentra bajo tratamiento contra un tipo de cáncer no especificado. “Con la progresión de mi enfermedad, tomé la decisión absolutamente difícil de retirarme para el 30 de junio”, declaró King. “Hasta entonces, permaneceré en licencia médica. Estoy muy agradecida por el enorme apoyo que he recibido de toda la familia del LAUSD, nuestros socios de la comunidad y mis colegas en todo el país”, agregó King. “Mientras lucho agresivamente contra esta enfermedad, les pido que me mantengan en sus pensamientos y oraciones”.

En una declaración conjunta, la Junta de Educación elogió a King como “una educadora ejemplar, un modelo inspirador y una líder firme”. “Habiendo dedicado su carrera al distrito, es hora de que la Dra. King centre su fuerza y energía en su salud”, dice la nota. ”Respaldamos de todo corazón su decisión de retirarnos y la mantendremos en nuestros pensamientos y oraciones mientras enfrenta los desafíos que se avecinan”.

La decisión de King de dimitir surgió en medio de crecientes preguntas sobre cuándo volvería a sus funciones, y un clamor creciente para que el distrito escolar se muestre más abierto acerca de su condición. Algunos expresaron preocupación sobre la dirección del distrito en su ausencia.

En el corto plazo, la nueva líder será quien ha estado a cargo desde mediados de octubre, como suplente en funciones, Vivian Ekchian. Al igual que King, Eckhian es una funcionaria de carrera con trayectoria en el distrito, que ido ascendiendo en dstintos rngos del LAUSD.

Debido a que los altos funcionarios han elogiado su desempeño, es probable que Ekchian sea candidata para el puesto permanente. Otro nombre que surgió en discusiones tanto dentro como fuera del distrito fue el de la directora académica Frances Gipson, quien captó el apoyo de algunos líderes cívicos externos. Pero es altamente probable que la junta también busque candidatos fuera del sistema.

La Junta de Educación seleccionó a King en enero de 2016. Como empleada del LAUSD, la funcionaria había captado constantes buenas críticas en su puesto de segundo líder, pero nunca había dirigido un distrito escolar. Ya en el cargo, contó con un fuerte apoyo interno, pero también mostró una cierta incomodidad en el centro de atención y un grado de inaccesibilidad, incluso antes de su enfermedd, que contrastaba con sus predecesores.

El mayor logro de King fue impulsar la tasa de graduación a niveles récord al permitir a los estudiantes recuperar rápidamente los créditos de las clases fallidas. Su principal iniciativa para el futuro fue expandir la cantidad de escuelas con programas especiales para compensar la disminución de la matrícula causada por el crecimiento de las charter independientes.

King no tuvo ningún “logro local”, pero tampoco ningún desastre, afirmó Tyrone Howard, profesor de educación de UCLA y director del Black Male Institute de esa entidad. “No hay grandes controversias o desastres que hayan caído en su regazo o que fueran creados por ella”, dijo. “Mantuvo la nave estable”.

Howard también elogió la diplomacia de King con respecto a las charter: “Mostró apoyo para ambas partes de maneras que no han sido fáciles”.

En junio pasado, la junta escolar votó por 6 a 1 para extender el contrato de King hasta junio de 2020. Los miembros mencionaron su desempeño y la necesidad de estabilidad en el futuro. La acción también limitó el efecto inmediato de la nueva mayoría, que tomaría control un mes después. Así, resultó políticamente más difícil para la nueva mayoría expulsar a King y colocar en el cargo a un elegido propio.

“Ella aportó algo de estabilidad, y eso fue importante”, afirmó Pedro Noguera, profesor de educación de UCLA. “Su estilo de liderazgo es muy reconfortante para personas de todo tipo. Incluso no estando de acuerdo con ella, nadie nunca sintió que se tratara de una persona mezquina o vengativa”.

El anuncio de King, de 56 años de edad, puso fin a gran parte del misterio que había envuelto su ausencia. La funcionaria tuvo dificultades para moverse durante su última reunión de la junta, el 12 de septiembre; usaba un bastón y se la veía obviamente incómoda. Todavía no está claro, en función de la información limitada que se h proporcionado, si el cáncer era el problema subyacente o si también tenía otros problemas de salud. En ese entonces, hubo rumores de que la funcionaria había resultado herida en un accidente de tirolesa mientras vacacionaba con su familia.

King ha estado de baja médica por una condición no revelada desde septiembre. En su comunicación pública más reciente, un mes después, la superintendente había dicho que volvería “después del primero de año”. Sin embargo, fue más específica en una comunicación confidencial de diciembre último, destinada a la Junta de Educación, donde señaló que volvería el 22 de enero.

A principios de esta semana, el distrito no daba precisiones sobre cuándo King regresaría. El jueves, sin embargo, una vocera informó que la superintendente debía regresar el 22 de enero, según los trámites de su licencia médica. No obstante, los funcionarios del distrito tenían dudas de que pudiera cumplir con este tiempo, o volver al puesto.

Ahora, le corresponderá al próximo superintendente, destacó Noguera, tanto mejorar las escuelas locales como fomentar la confianza del público en ellas. King “no estuvo en el cargo el tiempo suficiente para lograr las mejoras que redundarían en esa fortaleza”, indicó. “Ese es el trabajo que la próxima persona tendrá que asumir”.

Traducción: Diana Cervantes

Si quiere leer este artículo en inglés, haga clic aquí:

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