Curbelo aprovechó el “momentum” republicano para arrebatar escaño en Congreso
El republicano Carlos Curbelo aprovechó el “momentum” de su partido para apoderarse del asiento en la Cámara de Representantes federal por Florida que ocupaba el demócrata Joe García, quien sucumbió a la oleada que bañó de rojo importantes bastiones demócratas en el país.
García no pudo superar, pese a la escasa diferencia de votos que le separó de Curbelo, el impulso de los republicanos a nivel nacional y el voto de castigo al presidente Obama, destacó a Efe Rudy Fernández, analista político y exasesor del expresidente George W. Bush.
Puede que pesara algo el escándalo relacionado con su antiguo jefe de campaña, Jeffrey García (sin relación de parentesco), acusado de un fraude en papeletas ausentes en la campaña de García de 2012, pero la clave del éxito de Curbelo se cimentó en su “posición republicana moderada, favorable a una reforma migratoria integral” y el impulso general de los republicanos, aseveró Fernández.
Curbelo, de 34 años y miembro de la Junta Escolar del condado de MiamiDade, se puso por delante de García desde el primer momento del recuento de votos en las elecciones legislativas de este martes, y el resultado final le dio la victoria (5248 %) sobre el titular del escaño, con una estrecha victoria de apenas 5.000 votos.
Para Evelyn PérezVerdia, politóloga, otro factor de peso en la victoria de Curbelo fue la emisión de anuncios de televisión y radio, muy superior a la de García, y los fondos recaudados en su campaña.
Arropado por su familia, legisladores y simpatizantes, el joven político republicano expresó con entusiasmo en un acto en la noche del martes que, con este triunfo, comenzaba el “trabajo de dar a la gente del distrito congresional 26 de Florida la representación honrada y efectiva que necesitamos”.
Se trata de amplio distrito que abarca parte del suroeste del condado de MiamiDade y los cayos de Floridas, en el extremo sur del estado.
El también administrador de empresas ha contado con el apoyo en esta campaña de importantes pesos políticos del Partido Republicano, como el exgobernador de Florida Jeb Bush y el senador republicano Marco Rubio, quienes se perfilan como potenciales candidatos presidenciales para 2016.
García, por su parte, apenas ha conseguido cumplir su primer periodo en Washington tras ganarle en 2012 al congresista republicano David Rivera, quien desde entonces ha sido investigado por el FBI y la Policía de MiamiDade en un caso de fraude electoral.
Conocido como un defensor de la reforma migratoria, García, de 51 años, también ha tenido que hacer frente a críticas por la aparición en un anuncio de televisión del disidente cubano Guillermo Fariñas, algo que Curbelo, también de origen cubano, calificó de “inmoral” y “lamentable”.
Pero, en opinión de PérezVerdia, el fuerte respaldo económico de la campaña de Curbelo, con más de cinco millones de dólares destinados, según la Fundación Sunlight, solo a anuncios en contra de su rival demócrata, laminaron la imagen de García.
A esto hay que añadir que la participación en las elecciones legislativas fue baja y el voto hispano no se movilizó en la cantidad necesaria para dar la victoria a García, apuntó la experta.
Los votantes hispanos representan el 14 % de los 11,9 millones de votantes inscritos en Florida y resultan clave para cosechar una victoria electoral.
Florida es uno de los estados indecisos o “swing states” de la nación, y sus resultados serán cruciales para los comicios presidenciales de 2016.