Chargers visitan a Panthers en duelo de equipos desahuciados

Luego de una dolorosa derrota en casa ante los Buccaneers de Tampa Bay, los Chargers de San Diego viajan a Carolina del Norte para medirse este domingo 11 a los Panthers por la semana 14 de la NFL.

Al igual que los Chargers, los Panthers han tenido una temporada para el olvido. Mientras San Diego (5-7) se encuentra en el último lugar de la división oeste de la AFC, Carolina (4-8) ocupa el sótano en el sur de la NFC. El equipo liderado por el mariscal de campo Cam Newton dista mucho de aquel que llegó a jugar el Super Bowl 50 en febrero de este año y viene de ser aplastado 40-7 por los Seahwaks de Seattle la semana anterior.

Carolina padece de la llamada resaca post Super Bowl. La campaña pasada finalizaron la ronda regular con un impresionante récord de 15-1 y su quarterback fue elegido Jugador Más Valioso de la liga. Esta temporada, Newton completa apenas el 55 por ciento de sus pases y va camino a terminar con tan sólo 26 touchdowns. El año pasado registró un total de 45.

El funcionamiento colectivo de los Panthers ha estado muy por debajo del nivel, pues en 2015 su ofensiva promediaba 31 puntos por partido, mientras que en 2016 se ha reducido a 25 por juego. La defensiva también permite seis puntos más por encuentro esta temporada, mientras que los turnovers pasaron de +20 a estar en saldo negativo.

Adiós al sueño

Los sueños de postemporada en San Diego se terminaron de esfumar con la derrota frente a los Buccaneers, que lograron su cuarto triunfo al hilo y mejoraron a 5-1 su marca como visitantes.

Ante Tampa Bay, los Chargers protagonizaron otro encuentro en el que desperdiciaron oportunidades, incluyendo un pase de Philip Rivers en el último cuarto que no pudo atrapar Travis Benjamin -totalmente desmarcado-, que hubiera significado una anotación de 79 yardas cuando los rayos ganaban por un punto. Fue la quinta ocasión esta temporada en la que los Chargers tiran por la borda una ventaja tarde en el encuentro.

Así las cosas, el último lugar de la división parece estar asegurado para los Chargers. Raiders, Chiefs y Broncos ganaron sus respectivos compromisos en la semana 13 y lucharán de aquí al final por llevarse la división y uno de los comodines rumbo a los playoffs (dos puestos para tres equipos). Lo único que podrá hacer San Diego es intentar aguarles la fiesta, pues aún le restan partidos contra Oakland y Kansas City.

Esta semana los Broncos (8-4) visitan a los Titans de Tennessee (6-6), mientras que Raiders (10-2) y Chiefs (9-3) se vieron las caras en el juego del jueves por la noche, posterior al cierre de esta edición.

Salto de calidad

Para muchos, la AFC Oeste es la mejor división en la NFL esta temporada. Una de las razones es que cada uno de los cuatro equipos que la integran cuenta con al menos dos pass rushers de altísimo nivel en sus defensivas.

Mientras los Broncos tienen al dúo dinámico Von Miller y DeMarcus Ware, los Chiefs cuentan con el tridente conformado por Justin Houston, Dee Ford y Tamba Hali. Por su parte, la temporada que están teniendo los Raiders no sería posible sin el aporte de Khalil Mack y Bruce Irvin.

A pesar de que el récord de los Chargers no está a la par de sus rivales de división, el novato Joey Bosa le da ese salto de calidad a la defensiva de San Diego junto a Melvin Ingram y Jatavis Brown.

Bosa tuvo una soberbia actuación en la semana 12 ante los Texans, registrando siete tacles, 0.5 sacks, dos impactos al quarterback y dos tacles para pérdida de yardas. Es segundo del equipo en sacks con 5.5 y, a pesar de haberse perdido los primeros cuatro juegos de la temporada por lesión, es firme candidato a llevarse el premio Novato Defensivo del Año.

Figueroa es periodista independiente.