Los demócratas de California, incluidos Newsom y Harris, se pronuncian en contra de la iniciativa de remoción
Uno tras otro, casi todos los oradores en la convención del partido demócrata de California, una alineación que incluyó al vicepresidente de Estados Unidos y a un empleado de una tienda de comestibles, expresaron efusivos elogios al gobernador Gavin Newsom, el sábado, quien lucha por mantenerse en pie en medio de un intento de destitución.
“Gavin y yo resultamos electos al mismo tiempo en San Francisco, hace muchos, muchos años, y debo decir, he visto de primera mano el líder que es y cómo realmente pone su corazón para trabajar en nombre de la gente de California”, afirmó la vicepresidenta Kamala Harris. “El presidente Joe Biden y yo lo apoyamos al 100%”.
La convención virtual tuvo lugar días después de que el secretario de Estado anunciara que se habían presentado suficientes firmas válidas para incluir la iniciativa de destitución de Newsom en la boleta electoral a finales de este año.
El gobernador criticó el intento y argumentó que California va al frente a nivel nacional en su respuesta al COVID, y que respondería económicamente una vez que la pandemia terminara.
“Los republicanos nacionales y los de extrema derecha no están relajados, están haciendo todo lo que pueden para tomar el poder, todo con la esperanza de hacer retroceder el progreso importante que hemos logrado juntos”, afirmó Newsom, después de que un video similar a los de campaña destacara sus esfuerzos para combatir la pandemia. “No podemos dejar que ganen. Y si ponemos nuestra fe por sobre el miedo, la perseverancia y el optimismo por sobre el odio y la división, el poder está en nuestras manos”.
Además de los funcionarios electos, la convención contó con propietarios de pequeñas empresas, miembros de sindicatos y activistas, que se opusieron a la revocatoria ante una audiencia de más de 4.100 delegados.
“Es lamentable que el gobernador Newsom sea foco de acusaciones falsas y de un intento de removerlo del trabajo para el que lo elegimos”, afirmó Franky Carrillo, un defensor de la reforma de la justicia penal que fue exonerado después de pasar dos décadas en prisión por un asesinato que no cometió.
Carrillo afirmó que conoció a Newsom poco después de asumir el cargo y se unió a él en el Capitolio estatal cuando anunció una moratoria sobre la pena de muerte.
“Es un defensor de la justicia para todos los californianos. Los republicanos lo están atacando mediante la difusión de falsedades, que es algo que no podemos defender”, añadió. “Sé muy bien a dónde llevan el miedo, la mentira y el abuso del proceso”.
Los defensores agregaron que la atención prestada al retiro en la convención muestra que los demócratas se están tomando el tema en serio. “Ya era hora”, afirmó Anne Hyde Dunsmore, portavoz de Rescue California, uno de los comités que apoyan la destitución, quien cuestionó la idea de los demócratas de que la iniciativa es una toma de poder republicana. “Es una toma de poder de los ciudadanos. Dentro de la burbuja de su convención, pueden sentirse tan seguros como quieran acerca de esto, pero lo que les espera fuera de las puertas de esa convención es un movimiento que no han podido comprender por completo”, agregó. “Y eso es lo que nos ha dado la ventaja en este esfuerzo. Los ciudadanos se identifican con nosotros. [Ellos] están habitualmente desfasados de la realidad”.
La elección de destitución probablemente se llevará a cabo a fines de octubre o en noviembre. Varios candidatos republicanos se postulan para reemplazar a Newsom, incluido el ex alcalde de San Diego Kevin Faulconer, el empresario John Cox y la ex atleta olímpica Caitlyn Jenner.
Los informes monetarios presentados ante el estado el viernes mostraron que los patrocinadores terminaron el trimestre con alrededor de $240.000 en efectivo disponibles, habiendo gastado aproximadamente $5 millones en los primeros tres meses del año para que la destitución calificara para la boleta electoral. Los aliados de Newsom terminaron el primer trimestre con $2.5 millones en el banco para combatir la iniciativa. La actividad de recaudación de fondos de los candidatos se informará a finales de este año.
El ex gobernador Jerry Brown brindó un mensaje desde su rancho, en Colusa, que duró menos de un minuto y no mencionó el intento de remoción.
“Nos libramos de [el presidente] Trump, pero todavía tenemos muchos problemas”, dijo, citando la desigualdad social, el cambio climático y la educación de los niños. “Este es el momento de no ser débiles de corazón, sino de ser resueltos, de generar acción, de convocar la voluntad política para seguir dando un vuelco a California”.
Newsom ya había tensado las relaciones con Brown, en particular cuando ambos se postularon para el puesto ejecutivo más alto del estado, en 2010, y cuando el primero luego se desempeñó como vicegobernador en el gobierno de Brown.
Aunque la convención fue virtual, los planificadores insertaron algunos momentos interesantes para mantener la atención de los delegados: el actor de “Star Trek” George Takei encabezó el juramento de lealtad, el Coro de Hombres Gay de San Francisco cantó el himno nacional; un profesor de yoga dirigió una sesión de estiramiento en medio de los discursos de la tarde.
Además de la revocatoria, los funcionarios electos también hablaron sobre poner fin al obstruccionismo, aprobar la Ley de Empleos Estadounidenses, promulgar la reforma de la justicia penal, luchar contra la supresión de votantes y trabajar para mantener el control demócrata de la Cámara en las elecciones de mitad de período del próximo año.
“California es fuerte, nuestros principios nos inspiran a levantarnos unos a otros y luchar por los más vulnerables”, señaló la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. “Saben lo que decimos: no agonizamos, nos organizamos”.
Harris recordó a la multitud el progreso logrado en los primeros 100 días de la administración, incluidas las vacunaciones generalizadas, la creación de empleos y el envío de cheques de estímulo a 30 millones de californianos. “Recordemos, ganar las elecciones es solo el primer paso hacia el progreso. Después debemos gobernar”, remarcó. “Y eso es exactamente lo que estamos haciendo”.
La reportera de planta de The Times Maloy Moore contribuyó con este artículo.
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