Anuncio

Derrota humillante ante Yanquis revela deficiencias en Dodgers

LOS ANGELES, CA - AUGUST 23: Hyun-Jin Ryu #99 of the Los Angeles Dodgers reacts after conceding a grand slam home run to Didi Gregorius #18 of the New York Yankees in the fifth inning at Dodger Stadium on August 23, 2019 in Los Angeles, California. Teams are wearing special color schemed uniforms with players choosing nicknames to display for Players' Weekend. (Photo by John McCoy/Getty Images) ** OUTS - ELSENT, FPG, CM - OUTS * NM, PH, VA if sourced by CT, LA or MoD **
(John McCoy/Getty Images)

El problema no fue realmente que Ryu perdió en casa por primera vez. Fue la forma alarmante en la que perdió

Share

No se necesita hablar al respecto. Cabizbajo en la derrota. Hyun-Jin Ryu comenzó a descender del montículo antes de que Dave Roberts llegara hacia él.

El camino hacia la banca fue como ningún otro para Ryu en Dodger Stadium esta temporada, con un estadio lleno pero sumergido en el silencio.

El problema no fue realmente que Ryu perdió en casa por primera vez. Fue la forma alarmante en la que perdió.

Anuncio

Entonces, octubre no se sintió tan atractivo.

En los Yanquis de Nueva York, los Dodgers encontraron a la versión de ellos mismos de la Liga Americana, una colección de bateadores que tienen mucha paciencia, así como poder. Y los rivales potenciales de la Serie Mundial hicieron con Ryu lo que los Dodgers han hecho a una gran cantidad de pitchers que han lanzado aquí, forzándolo a salir después de 4 1/3 de innings en una paliza de 10-2.

El resultado fue tan feo como los uniformes estilo equipo de softbol de los domingos, para este llamado Fin de Semana de los Jugadores.

Las siete carreras que le cargaron a Ryu fueron las mismas que tuvo en 11 salidas en total en Dodger Stadium. Los tres jonrones que otorgó, igualaron el total que había permitido en casa hasta este juego.

Y pensar que antes de esta visita de los Yanquis, el escenario perfecto incluía arrancar la Serie Mundial de la misma manera en la que iniciaron el viernes por la noche.

En casa.

Y con Ryu en el montículo.

Pero también, Ryu tampoco ha lanzado ante una alineación como los Yanquis. No eran los Diamondbacks de Arizona, los Gigantes de San Francisco o los Padres de San Diego.

Los “salvajes”, como el mánager de los Yanquis, Aaron Boone, se refiere a sus lanzadores, pueden conquistar a sus rivales de varias formas.

Ryu no ha otorgado más de un jonrón solitario en alguna de sus salidas en casa. Los Yanquis pegaron dos en el tercer inning. Aaron Judge fue el primer en castigarlo, recetándole un cuadrangular en uno de sus cambios conocidos.

Dos bateadores después, Gary Sánchez mandó una pelota sobre el muro para aumentar la ventaja de los Yanquis a 2-0.

Entre los dos jonrones, Gleyber Torres trabajó nueve lanzamientos al bate que terminaron en una ponchada. La estrategia de Torres fue parte de un plan para fatigar a Ryu. El lanzador zurdo ya tenía 58 disparos en tres innings y 77 en cuatro.

Eso libró el camino para el colapso de Ryu en la quinta entrada.

Con la ventaja de 2-1 de los Yanquis, DJ LeMahieu y Judge comenzaron el inning con sencillos seguidos. Torres entonces sacó un roletazo de out que permitió a Judge y LeMahieu avanzar a segunda y tercera, respectivamente.

Ryu intencionalmente caminó a Sánchez y llenó las bases, pero el plan falló espectacularmente cuando Didi Gregorius dirigió una bola rápida a los asientos del jardín derecho.

Terminó el juego.

El grand slam fue el primero que Ryu había permitido en seis temporadas de Grandes Ligas.

La noche de Ryu terminó después de un doblete de Gio Urshela. Los Dodgers estaban abajo 6-1. Su déficit luego aumentó con otra carrera cuando el bateador izquierdo Brett Gardner pegó un doblete del zurdo Adam Kolarek, para impulsar a Urshela.

El récord de Ryu bajó a 12-4. Su promedio de carreas limpias, el cual estaba 1.64 abajo antes del juego, subió a 2.00.

“El ERA era un número muy bueno para ser real”, dijo Ryu por medio de un intérprete.

Un juego de temporada regular no determinará el destino de la postemporada de los Dodgers. Sin embargo, esta derrota revela algunos problemas que podrían encontrar en la postemporada, especialmente si planean enfrentar a los Yanquis otra vez.

Primero, Ryu está siendo noticia en la dirección equivocada. También perdió anteriormente, en su última salida, la cual fue ante los Bravos de Atlanta, otro posible rival de la postemporada. Ryu ha lanzado 152 2/3 de innings, su mayor número de innings desde su temporada de novato en 2013.

“No siento fatiga por el momento”, declaró.

Segundo, la habilidad de los Yanquis de cansar a los pitchers hará que los Dodgers dependan más de sus relevistas inconsistentes.

Tercero, los Yanquis continuaron teniendo éxito sobre lanzadores zurdos que pudiera causar miedo para un equipo que en la postemporada podría contar con una rotación con Ryu, Clayton Kershaw y Rich Hill.

El triunfo de los Yanquis el viernes fue el novena al hilo ante un zurdo. Entraron al juego bateando .330 ante zurdos desde el 1 de julio.

Ryu no pensó mucho en la derrota al decir que el resultado fue más de lo que no pudo hacer, en lugar de lo que los Yanquis pudieron lograr.

“Siempre enfatizo que el control de mis lanzamientos es lo más importante en mi juego”, declaró Ryu. “Obviamente no pude hacer eso. Si ves los jonrones hoy, los lanzamientos fueron dirigidos donde no quería. Esos errores me costaron”.

Estaba confiado de que podría hacer algo al respecto.

Los Dodgers esperan que haga esos ajustes. Porque si el viernes es un adelanto de la Serie Mundial, Halloween vendrá temprano para Los Ángeles.

Anuncio