GRANDERSON: En lugar de canjear a Kyle Kuzma, esto es lo que los Lakers deben hacer

Chris Bosh lo hizo. Kevin Love lo hizo también. Kyle Kuzma lo está haciendo.

Un jugador que es el número tres en un equipo con aspiraciones de campeonato como el conjunto de Lebron James siempre va a tener problemas. Eso sucede cuando un jugador con talento ofensivo, quien está acostumbrado a comer siempre, de repente lo tienen restringido a una dieta estricta.

Un jugador titular la temporada pasada, Kuzma está viniendo de la banca para promediar alrededor de 10 minutos mientras realiza menos de cinco tiros por partido. También no ha visto mucha acción debido a las lesiones, el cual también ha afectado su adaptación a su nueva tarea, junto a James y Anthony Davis.

También ha hecho algunas decisiones cuestionables sobre su cabello.

Ninguno de estas razones debería ser motivo para su salida- al menos no todavía y ciertamente no para Bogdan Bogdanovic, que dispara muy bien pero no es un anotador ni el jugador defensivo que el equipo necesita.

Al igual que Bosh y Love, Kuzma no era un jugador para el Partido de Estrellas antes de convertirse en compañero de James. De la manera en la que está jugando, Kuzma tampoco irá al Partido de las Estrellas junto a James. Pero Kuzma es claramente un jugador ofensivo y, como lo ha comprobado Lou Williams con los Clippers, no necesita ser un jugador nombrado al Partido de las Estrellas para ser invaluable para el equipo.

En lugar de intercambiar a Kuzma, los Lakers necesitan ser pacientes.

Los Lakers no lo pudieron canjear durante las vacaciones, y lo dejaron porque tiene un contrato barato y juega bien junto a James. Además, no solamente persevera bajo la presión de ser un Laker, lo goza. Disfruta de la atención y no se aplasta durante momentos grandes del juego. No parecía ser ese el caso con otros miembros del equipo la temporada pasada.

¿Podrá tomar el lugar de James cuando el rey finalmente deje el trono? Probablemente no, pero esa no es la pregunta del momento de todas maneras. La pregunta es: ¿podrá Kuzma encontrar su mejor juego antes de la fecha límite de transacciones? Sí.

Recuerden cuando Bosh promedió más de 24 puntos en su última temporada en Toronto y l luego promedió 18.7 con James y Dwayne Wade en Miami. Su porcentaje de anotaciones había bajado. Los rebotes estaban bajos, sus disparos de tres puntos fueron de 36% a 24%. De hecho, sus puntos y rebotes bajaron en cada temporada con James.

En la última temporada de Love con Minnesota, promedió 26.1 puntos. Su primera temporada con James y Kyrie Irving en Cleveland, la puntuación de Love bajó a 16.4 y luego a 16.0 en su segunda temporada. Por momentos parecía que se había olvidado de cómo jugar.

En ambas instancias, el jugador número tres parecía tener muchas dificultades para adaptarse a su nuevo papel dentro del equipo.

Kuzma no ha bajado mucho en su puntuación pero ha perdido oportunidades, tal como los jugadores anteriores a él. El equipo necesita que encuentre nuevamente su juego, de la misma forma en la que Klay Thompson tardó en acostumbrarse a su vida con los Warriors de Golden State después que firmaron a Kevin Durant.

Si James y compañía son derrotados nuevamente en su tercer duelo ante los Clippers el 28 de enero, entonces tal vez sea el momento de utilizar a su mejor carta para hacer cambios en el roster.

A pesar de tener un récord de 29-7, el mejor récord en la Conferencia Oeste, 20 triunfos de esos triunfos han venido ante equipos con promedios de .500 o menos. Están abajo en sus series ante los Clippers y los Bucks de Milwaukee, y son el tercer peor equipo en tiros desde la línea en la NBA.

Hay algunas áreas de preocupación por mejorar, y si el contrato correcto llega, deberían ser analizadas antes de la fecha límite de transferencias.

Bogdanovic no es ese movimiento.

Más importante que eso, las dificultades que tenga Kuzma no son razones suficientes para hacer ese movimiento. La historia sugiere que está destinado a tener un inicio lento y como el nuevo jugador número tres, va a sufrir. ¿Conocen el viejo refrán? “no eres tú, soy yo”. En este caso, no es Kuz, es ser el número tres en el equipo.

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