Por qué un desempate podría ser el peor escenario para los Dodgers (y los Gigantes)

Los Dodgers entraron en la serie inaugural del viernes contra los Rojos de Cincinnati un juego detrás de los Gigantes de San Francisco con 15 juegos restantes. Los equipos podrían, al final de la jornada, estar empatados en el primer lugar del Oeste de la Liga Nacional.

Entonces, ¿qué pasa si terminan la temporada con el mismo récord? Pues lo mismo que ocurrió en 2018 cuando los Dodgers y los Rockies de Colorado completaron sus calendarios de 162 partidos con registros parejos.

Los Dodgers y los Rockies jugaron un desempate el día después de que cada uno terminara la temporada regular con 91-71. El partido 163 (cuenta como parte de la temporada regular) se celebró en el Dodger Stadium porque los Dodgers ganaron la serie de temporada.

Los Dodgers ganaron y terminaron avanzando a la Serie Mundial, donde perdieron ante los Red Sox de Boston. Los Rockies vencieron a los Cubs de Chicago en el partido de comodines antes de que los Brewers de Milwaukee los barrieran en tres partidos en la Serie de División de la Liga Nacional.

Este año, los Dodgers no tendrían la ventaja de campo en un desempate. Los Giants se llevaron dos de los tres partidos de la última serie de la temporada de sus rivales para ganar la serie de la temporada por 10-9.

El partido, en consecuencia, se celebraría el 4 de octubre en el Oracle Park. El ganador pasaría a la NLDS y tendría tiempo libre. El perdedor sería el anfitrión del partido de comodín de la NL el 6 de octubre, lo que significa que ese club jugaría tres partidos en cuatro días. Los dos NLDS están programados para comenzar el 8 de octubre.

Para leer esta nota en inglés haga clic aquí.