El veterano de los Clippers Serge Ibaka deja de lado su ego para perfeccionar su juego en la G League

Para un campeón de la NBA que ha ganado cerca de 130 millones de dólares durante sus 13 temporadas, la estrategia no se ajustaba a las normas.

Hasta que ocurrió, en gran medida, gracias a un libro.

Cuando Serge Ibaka regresó a la alineación de los Clippers, a principios de este mes, por primera vez desde que se sometió a una cirugía de espalda en junio, el equipo no desplegó una alfombra roja en la rotación del entrenador Tyronn Lue. Con Ivica Zubac establecido como pívot titular y el invitado al campo de entrenamiento Isaiah Hartenstein como reserva integral, Ibaka jugó ocho minutos el 7 de noviembre y cinco más el 9 de noviembre.

En lugar de seguir con una dieta de escasos minutos, Ibaka pidió ser enviado a la filial de la liga de desarrollo de la franquicia en Ontario, los Clippers de Agua Caliente, donde le esperaban más oportunidades.

La petición de Ibaka le obligó a dejar de lado el ego y el orgullo para retroceder en la jerarquía de la NBA con el fin de avanzar en su recuperación.

“Una de las mayores razones por las que decidí ir a jugar a la G League fue leer este libro, se llama ‘El ego es el enemigo’”, dijo Ibaka. “No sé si conoces el libro. Ese es uno de los principales motivos por los que decidí ir a jugar ahí algún tiempo”.

“Como jugador llevo 13 años en la liga y nunca había estado en la G League. Podría simplemente esperar. Podía esperar y jugar los cinco minutos que me daban y tratar de recuperarme, pero ese libro me ha ayudado mucho a tomar esa decisión de ir a jugar a la G League, y me siento bien”.

La apuesta de Ibaka es que su estancia de cuatro partidos, en los que ha promediado 15.5 puntos con un 43% de tiros, 9.3 rebotes y, lo más importante para recuperar su condición, 27.3 minutos, sea solo un capítulo inicial de una historia de rebote personal que dure toda la temporada. Se espera que regrese a la alineación de los Clippers este fin de semana, cuando reciban a Dallas el domingo en el primero de una serie de dos partidos, que presenta una revancha de la serie de siete juegos que abrió los playoffs de la temporada pasada, una serie en la que Ibaka apenas apareció antes de someterse a una cirugía para “limpiar mi disco”, dijo en septiembre, un procedimiento al que señaló, en retrospectiva, que se debería haber sometido antes.

“El año pasado pasaron bastantes cosas, mucha información”, dijo Ibaka a principios de este mes. “No es necesario que lo diga ahora. No quiero hacer quedar mal a algunas personas por lo que pasó el año pasado, y ahora estoy bien. Lo más importante es que estoy bien y he vuelto, así que he aprendido de eso. Estoy seguro de que todos aprendimos de ello”.

Ibaka y los Clippers se mantuvieron firmes en que fue decisión del pívot jugar con los Clippers de Agua Caliente. Lue dijo que Ibaka ha expresado que “se siente bien, y eso es lo más importante”.

Ibaka, que estuvo sentado prácticamente los tres últimos meses de la pasada temporada, reconoció haber escuchado “algún comentario burlándose de mí” por la inusual vía de recuperación para un jugador de su categoría, y dijo que esas críticas “no le afectan”.

“Creo que muchos jugadores pueden usar este ejemplo en esa situación”, comentó Ibaka. “Al menos si eres Kawhi [Leonard] o Kevin Durant o Stephen Curry, ese tipo de muchachos pueden sentarse durante tres años y van a volver, [los equipos] les darán minutos, van a hacerlo - tratarán de conseguir su confianza.

“Al menos, si eres uno de esos tipos, puedes quedarte, pero si no eres uno de ellos, uno de esos nombres que hay, a veces tienes que trabajar por ti mismo para ir recuperando tu confianza porque nadie te la va a dar”.

La forma en que Lue reparte los minutos en el puesto de pívot suplente fue un tema que el entrenador no quiso abordar el viernes, antes de una derrota en Nueva Orleans que hizo caer a los Clippers a 9-7. Pero ya ha dicho en el pasado que no quiere que Hartenstein e Ibaka jueguen juntos. En los dos partidos de Ibaka con los Clippers esta temporada, Lue dio minutos a cada uno de los refuerzos en la primera mitad.

El alero Nicolas Batum dijo que Ibaka aportará dureza, defensa y tiro.

Sacar a Hartenstein de la rotación no es una idea que guste a los Clippers. Cuando él y los escoltas Luke Kennard y Terance Mann juegan juntos, los Clippers han superado a sus rivales en 18.3 puntos por cada 100 posesiones; la media del equipo es de más 4.7 puntos, según Cleaning the Glass, la base de datos de estadísticas de la NBA.

“Si Serge está jugando bien, entonces jugará muchos minutos”, dijo Lue. “Así es como entreno. Entonces ya sabes, creo que como has dicho, bajar a la G League, y tratar de ponerse en forma, conseguir su tiempo correcto, eso es muy bueno, especialmente para un campeón de la NBA, para un tipo que ha hecho un montón de dinero a lo largo de su carrera.

“Un veterano de 13 años que baja a la G League para demostrar que quiere volver y estar bien cuando vuelva. Eso significa mucho para nuestro equipo y nuestra organización”.

Incluso si el papel de Ibaka no está garantizado, Paul George cree que la adición de otra opción saludable a un equipo plagado de desgaste ayudaría.

“Ayuda bastante, ya que tenemos a muchos que juegan una gran cantidad de minutos y de forma consistente”, dijo George. “Es un alivio, ya sabes, aliviará mucha tensión. Físicamente, emocionalmente, mentalmente”.

PRÓXIMAMENTE

VS. DALLAS

Cuándo: 12:30 p.m., domingo

En el aire: TV: Bally Sports SoCal; Radio: 570, 1220

Actualización: La estrella de Dallas, Luka Doncic, se perdió su segundo partido consecutivo el viernes debido a un esguince en el tobillo y la rodilla izquierdos. Los Mavericks vienen de una derrota en Phoenix el viernes que dejó al equipo del entrenador Jason Kidd en 9-6. Están 3-5 en la carretera esta temporada.