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Propietarios eliminan escaleras y muros para atraer a inquilinos como Google y Netflix

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En enero, cuando Google anunció que ocuparía gran parte del ex centro comercial Westside Pavilion -que se está renovando como oficinas-, la cuestión mostró claramente cómo la tecnología está afectando el comercio minorista tradicional.

Pero más aún, el acaparamiento de espacio subrayó el ascenso de una nueva clase de arrendatarios de estas oficinas de colosal tamaño: los gigantes tecnológicos convertidos en magnates de medios de comunicación. Esas compañías están engullendo vastos espacios de oficinas en el área de Los Ángeles, en su carrera por establecer divisiones de entretenimiento de rápido crecimiento.

Empresas como Google, Amazon y Netflix acordaron rentar edificios enteros antes de que comenzara siquiera la construcción de estos, lo cual provocó una fiebre en los últimos años para erigir nuevas oficinas e instalaciones de producción, valuadas en miles de millones de dólares, que satisfagan sus demandas.

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Los creadores de contenidos, como se conoce a tales empresas, han alquilado más de cuatro millones de pies cuadrados de oficinas del condado de Los Ángeles en los últimos tres años, detalló la corredora de bienes raíces CBRE, una bonanza de arrendamientos que prolongará el actual momento positivo inmobiliario para los propietarios.

El crecimiento explosivo erigió zonas de interés económico en la región, como Hollywood, Culver City y Playa Vista, a medida que las compañías más grandes se expanden y las empresas más pequeñas que buscan trabajar con ellos se mudan a las cercanías.

Los rascacielos en el distrito financiero del centro de Los Ángeles, Century City y otros mercados de oficinas tradicionales aún prevalecen entre los incondicionales de la ‘vieja escuela’, como despachos de abogados y firmas financieras, pero los grandes recién llegados están plantando bandera en otras partes, en estructuras no convencionales que evocan campus universitarios o estudios de cine.

La gente del entretenimiento y la tecnología generalmente da la espalda a las imponentes torres que denotaban prosperidad y poder en el siglo XX, consideró Drew Planting, desarrollador de oficinas de Los Ángeles. “Ni esta generación, ni estos negocios se van a encerrar en un rascacielos todo el día”, resaltó. “Es una cultura muy diferente”.

Las compañías de nueva línea compiten ahora por ingenieros y otros trabajadores talentosos de gran demanda, indicó Planting, y típicamente prefieren operar en instalaciones a gran escala, donde sería posible fomentar su propia comunidad. “Pueden tener su propia cafetería, guardería infantil, servicios de salud y bienestar”, dijo. “Podrían crear sistemas de apoyo, para que las personas lleven una vida bastante normal mientras trabajan”, a menudo durante largas horas.

Los promotores inmobiliarios están realizando transformaciones radicales en edificios antiguos, como el Westside Pavilion, y crean nuevos, completamente diferentes a las viejas catedrales corporativas, para considerar los cambiantes gustos de los espacios de trabajo entre la clase creativa. Las oficinas de la nueva generación dan prioridad a la luz natural, los espacios al aire libre y otros sitios de descanso donde las personas pueden trabajar, reunirse o desconectarse de sus escritorios.

Una tendencia quizás sorprendente es la expulsión de las escaleras eléctricas, consideradas durante mucho tiempo un servicio de lujo. “La idea de utilizarlas como lo hacían en las décadas de 1950 y 1960, ya no ocurre”, expuso el ejecutivo Bert Dezzutti, de Brookfield Office Properties. “La gente desea moverse y sentirse sin ataduras. Ya no se usan estas escalinatas, que parecen viejas y perezosas”.

Brookfield, uno de los mayores propietarios comerciales del país, está retirando 24 escaleras eléctricas del California Market Center, en el Distrito de la Moda del centro de Los Ángeles, como parte de un cambio de imagen de $170 millones destinado a convertir la mayoría de los tres edificios del polo de la moda -que data de 1963- en un campus urbano aireado, para inquilinos de tipo FAANG (acrónimo de las más poderosas empresas de tecnología: Facebook, Apple, Amazon, Netflix y Google, de Alphabet).

Las escaleras eléctricas serán reemplazadas por escalinatas que conducen a amplios puentes interiores descubiertos, de 30 pies de ancho, que también se pueden usar como espacios al aire libre. Los muros cortina de vidrio en las fachadas serán removidos para crear lugares de reunión al aire libre, conocidos como logias, que a menudo se conectarán con las cubiertas de la azotea. “Estas son todas las intervenciones arquitectónicas para un edificio que estamos tratando de integrar a los entornos laborales”, remarcó Dezzutti.

En Hollywood, los nuevos y glamorosos complejos de oficinas están ayudando a transformar el vecindario antiguamente deteriorado, a medida que propietarios como Hudson Pacific Properties Inc. y Kilroy Realty Corp. gastan cientos de millones de dólares en construcciones para la industria del entretenimiento que resurge comandada por Netflix.

La compañía con sede en Los Gatos, que distribuye películas, programas de televisión y documentales, acordó mudarse a aproximadamente 1.6 millones de pies cuadrados. Se convertirá así en el mayor inquilino de Hollywood, según CBRE. Hace una década, Netflix apenas comenzaba a entrar en la transmisión de entretenimiento en línea.

Netflix, Amazon y otros gigantes recién coronados del entretenimiento se negaron a discutir sus planes inmobiliarios, pero el presidente ejecutivo de Hudson Pacific, Victor Coleman, los ve en proceso de establecerse en enclaves inmobiliarios destinados a perdurar, como las universidades. Netflix está totalmente integrado en Hollywood, por ejemplo, mientras que Amazon Studios ha asegurado más de 600.000 pies cuadrados en Culver City.

Apple Inc., que pronto creará su propio contenido, y el prestigioso canal de cable HBO también acordaron mudarse a los nuevos edificios que se están construyendo en Culver City, una ciudad histórica del cine que experimentó un renacimiento económico en la última década gracias al tren ligero de la línea Expo, que la conecta con el centro y Santa Mónica.

Google es un gigante del lado oeste; posee oficinas en el extenso campus de aviación de Howard Hughes en Playa Vista y planea expandirse a 584.000 pies cuadrados en el antiguo centro comercial Westside Pavilion, rebautizado ahora One Westside por su propietario, Hudson Pacific.

En un proyecto separado, la firma del desarrollador Planting, GPI Cos., está convirtiendo los antiguos almacenes de Macy’s del Westside Pavilion en oficinas para inquilinos de tecnología y entretenimiento, que se llamarán West End.

Mientras que los gigantes FAANG y grandes creativos similares, como las compañías de videojuegos, establecen sus campos de operaciones, ello atrae a empresas más pequeñas de las áreas relacionadas, que quieren prestar sus servicios a los titánes, explicó Coleman. “Los Netflix, Google y Amazon del mundo no van hacia sus proveedores de servicios”, dijo. “Son sus abastecedores los que van a ellos”.

David Simon, desarrollador de West Hollywood, considera que los proveedores son un tropel y propulsan la renta de oficinas en lo que él llama los “ecosistemas” que rodean a los grandes jugadores.

“Un pie cuadrado de Netflix crea demanda adicional. Hay un efecto multiplicador masivo que es difícil de cuantificar”, expuso Simon, pero puede ser tanto como 10 a uno, conformado tanto por proveedores de servicios como compañías de producción, distribuidoras y guionistas que desean estar cerca de las grandes compañías.

El desarrollador recientemente fundó Bardas Investment Group, para comprar y renovar o construir nuevas instalaciones para compañías más pequeñas, que tendrán una arquitectura y otros elementos de diseño y servicios similares -como comidas- que las grandes empresas brindan a sus empleados, a medida que compiten por el talento.

Simon trabajó anteriormente en Kilroy Realty, que desarrolló la antigua sede de Hollywood para CBS, ahora conocida como Columbia Square, donde se encuentran las cadenas de televisión por cable de Viacom, MTV, Comedy Central, BET y Spike TV. Kilroy también está construyendo un campus de oficinas en Hollywood llamado Academy on Vine, que se inaugurará el próximo año pero ya está arrendado a Netflix.

El crecimiento de las oficinas también está en marcha en el Valle de San Fernando, donde residen varias industrias de entretenimiento antiguas. En abril, Warner Bros. anunció que en el año 2023 alquilará dos nuevas torres de espacios diseñados por Frank Gehry, que semejarán unos icebergs flotando a lo largo de la Autopista 134, en Burbank.

Las torres serán construidas por el propietario clave de la industria del entretenimiento, Jeff Worthe, quien le está vendiendo Burbank Studios a Warner Bros como parte de una compleja transacción de bienes raíces, de mil millones de dólares.

La industria del entretenimiento sigue expandiéndose, y mantendrá ocupados a los desarrolladores con construcciones al estilo de lo que el sector necesita, explicó. “En general, todas estas empresas están creciendo”, dijo Worthe. “Y todos nos estamos adaptando”.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí

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