Vigilia de familiares y amigos para conmemorar 6 meses de matanza de Orlando
Supervivientes y familiares y amigos de las víctimas de la matanza perpetrada el pasado 12 de junio en la discoteca gay Pulse, en Orlando (Florida) conmemoraron hoy con una vigilia los seis meses transcurridos desde el trágico episodio de violencia en el que murieron 49 personas.
Centenares de personas se concentraron con velas blancas junto a la verja de la discoteca para recordar y honrar la memoria de las 49 víctimas mortales de los disparos hechos en el local por el estadounidense de origen afgano Omar Mateen, quien dijo actuar en nombre del Estado Islámico (EI).
Justo a las 02.02 hora local (07.02 GMT), el momento exacto en que comenzó hace seis meses el peor ataque con arma de fuego perpetrado por una persona en la historia reciente de Estados Unidos fueron leídos los nombres de las víctimas en un ambienyte cargado de emoción.
En el memorial instalado en el exterior de la discoteca quedaron depositadas numerosas velas blancas junto a ramos de flores en recuerdo emocionado a las víctimas, casi la mitad de ellas puertorriqueñas.
Esta vigilia es la primera de otras que tendrán lugar hoy para conmemorar a las víctimas de la matanza perpetrada por Mateen, de 29 años, quien ingresó en la discoteca Pulse y disparó con un rifle de asalto contra los asistentes al local, donde se celebraba una fiesta latina.
Poco antes de morir por los disparos de las fuerzas del orden, en las conversaciones que mantuvo con el teléfono de emergencia 911 Mateen juró lealtad a Abu Bakr a-Baghadadi, el líder del grupo terrorista Estado Islámico, y pidió que EE.UU. dejase de bombardear Siria.
La semana pasada Barbara Poma, la propietaria de la discoteca Pulse, señaló a los medios que no tenía pensado vender el club al Ayuntamiento de la ciudad. En un comunicado indicó que planeaba crear un “santuario de la esperanza” en la propiedad para recordar a las víctimas.
En un nuevo vídeo difundido el pasado domingo se aprecia el momento en que las cámaras de vigilancia graban el pánico desatado por el tiroteo entre docenas de personas que se encontraban en la discoteca, así como el despliegue de agentes de la policía de Orlando y el rescate de una persona herida.
