Ignoró DEA plagio dirigido a sus agentes
Un operativo de la DEA fue el motivo por el que Los Zetas irrumpieron en un hotel de Monterrey en 2010 y se llevaron a cinco personas, pese a lo cual la agencia antidrogas de Estados Unidos no hizo nada.
Según un reportaje publicado hoy en ProPublica, elementos de la agencia antidrogas de Estados Unidos junto con policías federales se hospedaron en un Holiday Inn mientras realizaban una operación encubierta para capturar a Héctor Raúl Luna Luna, “El Tory”, uno de los principales operadores de Los Zetas en Nuevo León, en aquellos años.
“La agencia nunca reveló su rol en lo sucedido a las autoridades locales o federales. No se ofreció a ayudar a investigar el incidente ni a utilizar sus capacidades de vigilancia para rastrear a los secuestradores. Tampoco dirigió su escrutinio hacia su interior para averiguar si la fuga de inteligencia que había llevado a Los Zetas al Holiday Inn vino desde la SIU”, escribe la reportera.
Los agentes federales formaban parte del programa estadounidense Unidad de Investigación Sensible (SIU, por sus siglas en inglés) que opera en México desde 1997, mediante el cual son capacitados durante cinco semanas en la academia de la DEA en Quantico, Virginia.
Sin embargo, a lo largo de la última década los mandos mexicanos han sido cooptados por el narcotráfico, y eso, aparentemente, fue lo que originó la desaparición de cinco personas sin que la DEA hiciera nada.
La madrugada del 21 de abril de 2010, Los Zetas bloquearon varias avenidas de Monterrey y rodearon el hotel en el que se hospedaban los agentes, narra el reportaje.
Un comando fuertemente armado irrumpió en el hotel, subió directamente al quinto piso y sacó de sus camas a todos los huéspedes.
Se llevaron a un ejecutivo de marketing de una compañía de lentes, a un ingeniero químico para un fabricante de cosméticos, a un vendedor de zapatos cuyo primer hijo estaba por nacer, a una profesora, madre de dos niños, y a la recepcionista del hotel, a quienes no se la ha vuelto a ver.
“Fue difícil aceptar lo que había pasado porque nunca tuvo sentido”, David Anabitarte, el supervisor del ejecutivo de marketing y uno de sus mejores amigos, según se lee en el texto escrito por Ginger Thompson.
Por un error logístico, según la investigación, los miembros de la SIU tuvieron que dejar un día antes el Holiday Inn, pues no habían reservado habitaciones para días suficientes.
Los Zetas tomaron a cuatro personas que apenas coincidían con el perfil de los agentes, y cuando descubrieron su error pidieron rescate por uno de ellos.
En tanto, los agentes de la SIU se apresuraron a regresar a la Ciudad de México.
“Un ex agente de la DEA, cuyo nombre no se mencionada, dijo que si los hechos hubiera ocurrido en Estados Unidos habría habido todo tipo de indignación”, expresó para el reportaje.
“Pero en México, siento decirlo, a nadie le importa una mierda”.
En los últimos años, los mandos mexicanos beneficiados con la capacitación extranjera se han sido asesinados o son acusados de revelar información.
El caso más reciente es el de Iván Reyes Arzate, mando de la División Antinarcóticos de la Policía Federal, quien es procesado en Estados Unidos.
El pasado 2 de febrero, la DEA confrontó a Reyes con evidencia de que había traicionado a la agencia estadounidense, con la que llevaba años cooperando como el mando de más alto nivel de la Unidad de Asuntos Sensibles de la División Antidrogas de la PF.