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Occidente y Rusia intercambian acusaciones sobre Ucrania en la ONU

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EFE

Los países occidentales y Rusia intercambiaron hoy acusaciones sobre el conflicto en Ucrania en una reunión en la ONU convocada para marcar el cuarto aniversario de los acuerdos de paz de Minsk, que continúan sin ser implementados.

Moscú, que convocó la reunión, defendió insistentemente que es el Gobierno ucraniano el que está ignorando esos pactos y acusó a Occidente de usar el conflicto como “peón en una confrontación geopolítica contra Rusia”.

El embajador ruso, Vasili Nebenzia, arremetió específicamente contra los países de la Unión Europea (UE) por su papel en Ucrania y contra Estados Unidos, asegurando que Washington es “quien mueve los hilos de los títeres de este teatrillo”.

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“Escuchando a Vasili, uno creería que es Ucrania quien invadió Rusia y no Rusia quien invadió Ucrania”, respondió a la intervención el embajador alemán ante Naciones Unidas, Christoph Heusgen.

Los miembros europeos del Consejo de Seguridad hicieron gala de unidad y, en una declaración conjunta, condenaron una vez más la anexión de Crimea por parte de Rusia, al tiempo que acusaron a Moscú de alimentar el conflicto dando “apoyo financiero y militar” a los grupos separatistas del este de Ucrania.

Además, expresaron su preocupación por las informaciones que apuntan a la presencia de equipos y efectivos militares rusos en zonas controladas por esas facciones.

El representante estadounidense, Jonathan Cohen, respaldó la postura europea contra Rusia por su “conducta inaceptable en Crimea, el este de Ucrania y el Mar Negro”.

“Seguiremos apoyando a los ucranianos ante la agresión rusa”, recalcó Cohen.

Cuatro años después de la firma de los Acuerdos de Minsk, los únicos sellados hasta ahora entre las partes, el conflicto ucraniano sigue enquistado y esos pactos de paz pendientes de ser aplicados.

Pese a que la guerra se ha retirado del centro de atención internacional, el conflicto “no está dormido ni congelado”, destacó hoy Naciones Unidas.

“Es un conflicto en el corazón de Europa que sigue cobrándose vidas”, subrayó el responsable de la organización para Europa, Asia Central y las Américas, Miroslav Jenca.

El diplomático recordó que los sucesivos altos el fuego anunciados en los últimos años no se han mantenido y continúa el uso de armas pesadas en el este ucraniano.

“Aunque ha habido en conjunto una reducción de la violencia desde 2014, incluyendo el número de muertes civiles, las bajas y la destrucción continúan casi semanalmente. Al mismo tiempo, se estima que 1,5 millones de personas siguen desplazadas internamente”, añadió.

Las regiones orientales de Donetsk y Lugansk, actualmente bajo control parcial de milicias prorrusas, declararon en 2014 su independencia de Ucrania tras la celebración de sendas consultas de autodeterminación que no fueron reconocidas por el Gobierno de Kiev ni por la comunidad internacional.

Esto llevó a una interminable guerra entre el Ejército y los separatistas que se ha cobrado la vida de más de 12.000 personas, entre militares y civiles.

Tanto EE.UU. como la Unión Europea respaldan a Kiev e insisten en que la soberanía y la integridad territorial de Ucrania han sido atacadas y deben ser protegidas.

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