OPINIÓN: ¿Si o no a los autos ‘enchufables’?

Muchas de las fábricas automotrices se toman la libertad de promover sus productos anunciando primicias y novedades que infinidad de veces son solo la reencarnación de tecnologías de antaño. Los autos eléctricos ya circulaban en Los Ángeles en el primer decenio del siglo veinte. Pero en Alemania, por ese entonces, el “híbrido” fabricado por Lohner-Porsche sería la primera versión de un automóvil con dos motores diferentes (uno combustión y otro eléctrico) propulsando un vehículo.

El profesor Andrew A. Frank y sus alumnos comenzaron a experimentar con diferentes tecnologías de propulsión en 1971 y construyeron un auto eléctrico en la universidad de Wisconsin. Más adelante trabajaron en la realización de un sistema de configuración híbrida paralela.

Este conjunto está compuesto por un motor de combustión, un motor eléctrico, una batería y una transmisión sin engranajes. La batería podría ser cargada exteriormente conectándose a la red eléctrica o utilizando el motor de combustión como generador. El trabajo del profesor se conoce hoy en día como el precursor de los automóviles PHEV de estos tiempos (Plug-in Electric Vehicle) conocidos como híbridos enchufables.

La proliferación de este tipo de plantas motrices es cada vez mayor. Y me parece a mí que es una de las mejores opciones para los próximos años. El punto débil del auto eléctrico es la falta de infraestructura. Los PHEV utilizan el motor de combustión como generador y así nunca falta la electricidad.

En términos de tecnología se ofrecen varias soluciones. Pero sin entrar en detalles estos autos utilizan muchísimo menos combustible si los comparamos con automóviles dentro de su mismo sector. Hoy hay más de 30 vehículos PHEV y se espera que se triplique su aceptación por parte del consumidor en los próximos cinco años.

Como es algo “nuevo” los fabricantes han tomado diferentes enfoques para su comercialización. Karma, Audi, Volvo y otras marcas de lujo prefieren la exclusividad y bajo volumen. Toyota, Honda, Chevrolet y Ford ofrecen automóviles más accesibles en precio y a veces con mejor rendimiento que los autos de alto precio.

De los que he probado y teniendo en cuenta la razón por la cual utilizamos este tipo de híbrido (que es minimizar la contaminación y la utilización de combustibles fósiles) me han gustado el Toyota Prius y Rav4 Prime; Hyundai Ioniq; Ford Escape y Kia Niro. Para la familia el Chrysler Pacifica o Lincoln Aviator. El que me ha llamado la atención es la camioneta Mitsubishi Outlander PHEV porque es una combinación de gran espacio, lujoso interior y alto rendimiento. Personalmente me gustaría tener el Ferrari SF90 Stradale PHEV pero como no lo he probado no sé si realmente “vale” la pena ya que desconozco hasta qué punto realmente economizamos combustible con este auto.

Los vehículos tipo PHEV serán cada vez más populares y ya he visto que casi todos los fabricantes tienen un modelo en su futuro cercano. Me parece que su adopción ayudará a mejorar el medio ambiente y nadie sufriría de ansiedad al saber que se puede ir a todos lados sin estar limitados a la carga de la batería.

El poder enchufar cualquiera de estos autos a una toma de corriente es algo simple y que se puede hacer al final del día, para que durante la noche la batería llegue a un cien por ciento de su carga. La mayoría de los PHEV pueden recorrer entre 20 y 40 millas solo utilizando el motor eléctrico. Los estudios realizados demuestran que el promedio de distancia de la casa al trabajo es de 25 millas, por lo que sería posible el no utilizar el motor de combustión en todo el recorrido.

A medida que se incremente la adopción de estos autos enchufables, los costos de ellos serán menores. También el desarrollo de la red eléctrica para los vehículos eléctricos beneficiará a los “plug-in”.

Creo que, en el momento de pensar en el remplazo de nuestro próximo auto, los enchufables deben ser parte de la conversación. ¿Usted qué opina?

Ricardo Rodríguez-Long es un periodista argentino especializado en temas de automovilismo.