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Se espera que Los Ángeles alcance la inmunidad colectiva ante el COVID-19 a finales de julio

Diners eat inside a restaurant in West Hollywood.
Los clientes comen dentro de E.P., un restaurante en West Hollywood, el sábado. Los funcionarios de salud pública dicen que Los Ángeles podría alcanzar la inmunidad colectiva ante el coronavirus en los próximos tres meses.
(Francine Orr / Los Angeles Times)
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Los Ángeles podría alcanzar la inmunidad colectiva frente al coronavirus entre adultos y adolescentes mayores a mediados o finales de julio, otro hito que subraya la rápida recuperación de la región ante la pandemia.

La inmunidad colectiva, a veces denominada inmunidad comunitaria, se produce cuando se ha inoculado a la población necesaria, o cuando se ha obtenido la inmunidad natural de suficientes personas, para proteger a la comunidad contra el virus.

Los expertos habían expresado previamente su preocupación de que la disminución de la demanda de las vacunas contra COVID-19, así como las tasas de inoculación desiguales, podrían dificultar el logro de ese objetivo.

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Con alrededor de 400.000 dosis administradas semanalmente, al condado le faltan alrededor de 2 millones de primeras inyecciones para que el 80% de todos los residentes de 16 años o más hayan recibido al menos una vacuna, dijo la directora de Salud Pública de Los Ángeles, Bárbara Ferrer, en una conferencia de prensa el lunes.

“Al ritmo que vamos, esperamos poder alcanzar este nivel en algún momento a mediados o finales de julio, y eso supone que seguimos teniendo al menos 400.000 personas vacunadas cada semana, lo que incluiría las primeras dosis que la gente necesita, así como sus segundas inyecciones”, señaló Ferrer.

La directora de Salud Pública también indicó que la población estimada que necesita ser vacunada en Los Ángeles para la inmunidad colectiva es una suposición, “pero asumimos que probablemente sea alrededor del 80%”.

El último objetivo del presidente Biden es lograr que el 70% de los estadounidenses adultos tengan al menos una inyección de la vacuna para el 4 de julio, una meta que su principal asesor médico, el Dr. Anthony Fauci, explicó que probablemente resultaría en una disminución sostenida de nuevos casos de coronavirus a nivel nacional. Fauci había proyectado previamente que del 70% al 85% de la población necesitaría ser inoculada para alcanzar la inmunidad colectiva.

Más de 3 millones de personas han recibido al menos una dosis, informó Ferrer, y el 84% de ellos obtuvo su segunda dosis a tiempo (el 7% consiguió la segunda dosis tarde y el 9% no la adquirió).

“El enfoque de aquí en adelante para nosotros, es que sea lo más fácil posible para los residentes elegibles vacunarse”, indicó Ferrer.

La predicción se produce en medio de crecientes señales de que el COVID-19 se está desvaneciendo en California. El estado registró su tasa de hospitalización más baja desde las primeras semanas de la pandemia, según datos revisados por el Times.

Las cifras se originan pocos meses después de que el aumento repentino del otoño e invierno dejara a los hospitales de todo el sur de la entidad abrumados con pacientes, provocando un incremento en los decesos.

Pero durante los últimos tres meses, el COVID-19 ha retrocedido rápidamente en toda la región, permitiendo una reapertura masiva de la economía y la esperanza de un regreso a algún tipo de normalidad para el verano.

California está ahora cerca de la parte inferior de la nación en lo que respecta a las tasas de casos de coronavirus durante la semana pasada. Los Ángeles y San Francisco transitaron la semana pasada al nivel menos restrictivo del sistema de cierre codificado por colores de California.

Los funcionarios de algunas zonas del Área de la Bahía dijeron que pronto también podrían alcanzar la inmunidad colectiva.

El Dr. George Rutherford, epidemiólogo de UC San Francisco, indicó que pensaba que la región del Área de la Bahía experimentaría alguna forma de inmunidad colectiva primero, tal vez a mediados de junio o principios de julio, seguida por el sur urbano y suburbano de California algún tiempo después, con la zona agrícola de la entidad siguiéndole.

Pero todo eso depende de que las tasas de vacunación se mantengan estables y no disminuyan más abruptamente de lo que lo han hecho recientemente.

En la actualidad, hay más de 750 sitios que ofrecen antígenos en Los Ángeles, incluidas farmacias, clínicas, sitios comunitarios y hospitales. Muchas vacunas se concentran en áreas con niveles más bajos de salud comunitaria, que se han visto muy afectadas por la pandemia, señaló Ferrer.

“Queremos que sea muy fácil obtener una dosis si vive en estas comunidades”, explicó, y señaló que 185 equipos móviles de vacunación también están trabajando para alcanzar a las personas que pueden tener una capacidad o tiempo limitados para llegar a uno de los sitios establecidos.

Los residentes pueden obtener dosis en los ocho sitios administrados por el condado, todos los centros de vacunación dirigidos por la ciudad de Los Ángeles, casi todos los sitios móviles y muchos de los centros comunitarios de inoculación sin una cita, indicó Ferrer. Una gran cantidad de estos están abiertos los fines de semana y tienen horario nocturno.

CVS, RiteAid y Walmart en todo el país ofrecen vacunas sin necesidad de cita previa, según la disponibilidad. Los Ángeles también está aumentando su capacidad para llevar clínicas de inoculación a los lugares de trabajo, y las personas pronto podrán solicitar al condado que vaya a su empleo para administrar las vacunas.

“La estrategia en este momento es aparecer donde la gente ya se esté reuniendo”, explicó Ferrer, y agregó que las personas pueden visitar VaccinateLACounty.com o llamar al (833) 540-0473 para encontrar un sitio cercano.

De los 10.1 millones de residentes de Los Ángeles, 8.3 millones tienen 16 años o más. Hasta el viernes, 4.89 millones de adultos y adolescentes mayores en el condado habían recibido al menos una dosis, aproximadamente el 59% de esta población.

El objetivo del condado de vacunar al 80% de los adultos y los adolescentes mayores no tiene en cuenta la inoculación de los niños más pequeños, ni de los adolescentes de 12 a 15 años, quienes el lunes se convirtieron elegibles para recibir el antígeno de Pfizer.

Pero el objetivo del 80% es una suposición razonable para alcanzar la inmunidad colectiva, señaló Ferrer.

A fin de cuentas, aunque los niños se enferman por el COVID-19 y pueden transmitir el virus, “tienden a no ser tan eficientes para el contagio como los adolescentes mayores y los adultos”, explicó la directora de Salud Pública. “Cuantas más personas se vacunen, menos transmisión comunitaria habrá”.

Para que más personas sean inoculadas, el condado aún tendrá que enfrentar las disparidades entre ciertos grupos demográficos que han tenido menos probabilidades de vacunarse: los residentes latinos y negros, así como los jóvenes y adultos varones.

Entre los adultos y adolescentes mayores del condado, el 60% de los residentes blancos, el 68% de los estadounidenses de origen asiático y el 58% de los nativos americanos han recibido al menos una dosis. Pero solo el 38% de los residentes negros y el 42% de los latinos en este grupo de edad han obtenido una vacuna.

Los adolescentes y los adultos más jóvenes también tienen menos probabilidades de haber recibido una inyección. La mayoría de las personas de 30 años o más han adquirido una dosis; pero entre los adultos más jóvenes, hasta los 29 años, solo el 45% ha obtenido una inoculación; y entre los jóvenes de 16 y 17 años, solo 34% ha recibido una dosis.

Y mientras que el 62% de las residentes elegibles de Los Ángeles ha adquirido una inyección, solo el 56% de los hombres la ha recibido.

La supervisora de Los Ángeles, Hilda Solís, dijo que el condado está trabajando para mejorar el acceso a la vacuna y está considerando ideas, como albergar clínicas de inoculación en centros deportivos, donde los jóvenes ya están asistiendo. También instó a las figuras modelo a hablar públicamente sobre la necesidad de vacunarse, y a los familiares y amigos para dialogar con sus seres queridos sobre el tema.

“Todavía tenemos un largo camino por recorrer”, señaló.

Hubo algunas señales de optimismo. Ferrer dijo que estaba trabajando el sábado en el sitio de vacunación en Eugene A. Obregon Park, en el vecindario predominantemente latino del Este de Los Ángeles, y el 60% de las personas que ingresaron eran hombres.

“Traían a sus amigos y, francamente, estaban felices de estar allí y sentían que era importante para ellos ir y vacunarse”, manifestó Ferrer. “Pero lo hicimos mucho más fácil en ese sitio: no necesitas una cita, y el centro se encuentra en el medio de una comunidad a la que muchas personas pueden caminar o tomar un autobús”.

Y en Los Ángeles, el alcalde Eric Garcetti dijo que el programa Alcance Móvil para la Equidad de las Vacunas de la ciudad, que opera sus propias clínicas de vacunas y es administrado por la oficina del alcalde y el Departamento de Bomberos, ha aplicado más de 100.000 dosis en vecindarios fuertemente afectados por el COVID-19.

“El código postal o el vecindario de una persona nunca debe ser una barrera para acceder a los antígenos que salvan vidas, y el hito de esta semana es un reflejo de nuestro compromiso de poner inyecciones en los brazos de los angelinos sin importar dónde vivan”, dijo Garcetti en un comunicado.

En general, el 90% de las primeras dosis administradas por las clínicas móviles de vacunas de la ciudad ha sido para personas de color, y aproximadamente dos tercios de ellas fueron para residentes latinos.

En el Área de la Bahía, Santa Clara planea organizar esta semana tres “noches de vacunación para estudiantes” en el Levi’s Stadium, donde juegan los 49ers, proporcionando clínicas de inoculación sin cita previa para estudiantes, de 16 a 19 años, y sus familias.

Santa Clara, el condado más poblado del norte de California, también informa tasas bajas de vacunación entre los adolescentes, con solo el 40% de los jóvenes de 16 y 17 años recibiendo al menos una dosis, en comparación con el 73% de todos los residentes elegibles.

“Esa tiene que ser la estrategia para avanzar porque, si no tenemos éxito, retrasamos el punto en el que llegaremos a la inmunidad comunitaria”, dijo Ferrer sobre los planes del condado.

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