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Dwight Howard de los Lakers habla sobre su depresión en la burbuja de la NBA

Lakers center Dwight Howard passes the ball while under pressure during the Lakers' win in Game 1.
(Mark J. Terrill / Associated Press)

El pívot de los Lakers, Dwight Howard, dice que ha encontrado formas de lidiar con los sentimientos de depresión durante sus 84 días en la burbuja anti-coronavirus de la NBA

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En el transcurso de estos 84 días de estar dentro de la burbuja de la NBA, el centro de los Lakers, Dwight Howard, admitió el jueves que ha habido momentos en los que ha estado deprimido.

Howard habló de eso cuando se le preguntó sobre cómo los jugadores hablaban abiertamente sobre problemas de salud mental y cómo muchos de ellos han hablado sobre el aislamiento cuando la liga reinició la temporada en el ESPN Wide World of Sports Complex cerca de aquí.

Habló sobre lo bueno que era “sacar ese sentimiento de ansiedad y depresión de nuestro sistema”.

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Howard dijo el jueves que el público piensa que “estás sentado en Disney World” y que las cosas van bien para los jugadores mientras hablaba sobre la ventaja de 1-0 de los Lakers sobre el Miami Heat en las Finales de la NBA que se reanudan hoy viernes por la noche.

Howard pudo encontrar algo de alegría al tener a su hijo, David, que se unió a él en la burbuja cuando la familia y los amigos pudieron ingresar al campus.

“Para mí, ha habido momentos en los que estaba deprimido por tener que estar en la burbuja, no poder ver a mi familia, a mis hijos”, dijo Howard. “Entonces, podría ser muy difícil. Así que traté de encontrar una manera de escapar mentalmente leyendo mucho, saliendo y caminando, hablando con muchas personas que trabajan en la NBA que están aquí y que también están experimentando la burbuja. Así que solo trato de compartir mis experiencias con ellos y escucharlos y encontrar esperanza de forma conjunta”.

El compañero de equipo de Howard, Danny Green, comparó la experiencia con “tener un Groundhog Day de 48 horas” desde que llegaron aquí el 9 de julio.

Pero los Lakers están llegando al final de su tiempo aquí, necesitando tres victorias para coronarse campeones de la NBA y partir con alegría.

“Cada dos días es lo mismo”, dijo Green. “Es día de juego o de práctica. Nos quedamos en el mismo campus, comemos en el mismo restaurante, vamos al mismo gimnasio, misma casa, mismo acceso al hotel. Así que sí. Pero así estamos en línea de nuestra meta. Todavía tenemos trabajo por hacer, pero vemos una luz al final del túnel. Sabemos que está cerca el final, está cerca.

“Sabemos que solo tenemos una cierta cantidad de tiempo antes de que todo esto esté terminado y [queremos] asegurarnos de terminar con la nota correcta y continuar con nuestro trabajo. No miramos hacia adelante, no miramos la luz. No estamos mirando la zona de anotación. Estamos buscando la siguiente yarda, la próximo primera oportunidad. Tenemos que hacer eso primero antes de llegar a la zona de anotación”.

Caldwell-Pope da un paso al frente por los Lakers

Los Lakers cayeron en un hoyo de 13 puntos comenzando el Juego 1, y nada parecía ir bien en el inicio.

Pero Kentavious Caldwell-Pope entró en ese vacío, acertando triples consecutivos para que los Lakers volvieran a un juego que finalmente ganaron. Logró 10 de sus 13 puntos en el primer cuarto.

“La pelota me llegó en la esquina”, dijo Caldwell-Pope en una videoconferencia. “Estaba completamente abierto. Solo precisaba estar listo para disparar y anotar. Para nosotros como equipo, cambió el impulso en nuestro camino y lo abrió para que los otros muchachos se sintieran cómodos, tuvieran confianza al anotar tiros. Simplemente los buscamos después de eso”.

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