Vanessa Bryant dice que las hijas la motivan a encontrar “luz en la oscuridad”

Vanessa Bryant ha tenido todos los motivos para retirarse del mundo durante los 13 meses transcurridos desde que su marido, la leyenda de los Lakers, Kobe Bryant, y su hija Gianna, de 13 años, murieron en un accidente de helicóptero.

Pero tiene tres muy buenas razones para luchar contra ese impulso: sus hijas Natalia, de 18 años, Bianka, de 4, y Capri, de 1.

“Ayudar a mis hijas a superar este dolor es importante para mí”, dijo Bryant a la revista People en su número “Women Changing the World in 2021”. “Quiero asegurarme de que saben que son amadas, apoyadas e importantes, eso es lo que me motiva”.

Bryant dirige ahora la empresa multimedia de su marido, Granity Studios, y ha relanzado su organización benéfica sin ánimo de lucro como Mamba & Mambacita Sports Foundation.

“Este dolor es inimaginable, [pero] sólo tienes que levantarte y seguir adelante”, dijo a la revista. “Estar en la cama llorando no va a cambiar el hecho de que mi familia nunca volverá a ser la misma. Pero levantarse de la cama y seguir adelante va a hacer que el día sea mejor para mis hijas y para mí. Así que eso es lo que hago”.

Bryant también se ha mantenido activa en las redes sociales, manteniéndose cerca de los fans que lloran con ella.

“He tenido fans que se acercan y me mandan mensajes en Instagram para decirme que desean venir a mi página para ver a mis chicas y a mí sonreír”, dijo a People. “Que les da la esperanza de poder superar cualquier cosa dura que estén pasando. O que compartan sus historias de dificultades. Todos hemos experimentado el dolor y el sufrimiento de diferentes maneras y hemos aprendido a sobrellevarlo de distintas formas”.

En un artículo reciente sobre la presencia de Vanessa Bryant en las redes sociales, Thuc Nhi Nguyen, de The Times, escribió que “su cuenta de Instagram, cuidadosamente elaborada, es una ventana a su difícil proceso de duelo. Hay alegría en las fotos y los vídeos. También hay dolor”.

Pero Bryant dijo a People que siempre trata de poner una cara valiente por sus hijas.

“Cuando veo a sus caras y se dan cuenta de que he estado llorando, me hace enderezarme y salir adelante por ellas”, dijo. “Lo contrarresto haciéndoles sonreír por algo. ... Siempre encontrando la luz en la oscuridad”.

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