Análisis: Los Lakers apuestan por la continuidad para volver a Las Finales, ¿podrán?

Los Lakers de Los Ángeles cerraron su pretemporada el 19 de octubre con récord, sin importancia, de dos victorias y cuatro derrotas porque lo que realmente tendrá valor será cuando debuten el martes ante los campeones de la NBA, los Nuggets de Denver (4:30 p.m. PT, TNT).

Las expectativas para los Lakers en esta nueva temporada son muchas. En el campeonato pasado, los laguneros se vieron muy beneficiados por la fecha límite de canjes en febrero, algo que les permitió de gran manera una temporada que había empezado en los peores términos y culminó de gran manera.

Aunque para los Lakers es casi que una obligación ser siempre protagonista y el no haber llegado a Las Finales nuevamente, hay que destacar que, desde el título conseguido en 2020, en la burbuja de la Florida durante la reclusión creada por la emergencia mundial del COVID-19, los Lakers no han vuelto a ser los mismos.

En la siguiente temporada después de haber logrado el título, no pasaron de la primera ronda y en 2021-22, no clasificaron a los playoffs.

Iniciaron la temporada 2022-23 con un récord de 2-10, dando señales que sería un año largo y desastroso, pero con los canjes de media temporada, los Lakers lograron remontar y convertirse en uno de cuatro equipos desde 1981 en terminar la temporada con un récord positivo, 42-39. Los Nets de Nueva Jersey lo logró hacer en dos ocasiones (1981-82 y 2004-05), mientras que los Bulls de Chicago lo hicieron en 2004-05.

Tras volver a playoffs y estar tan cerca de volver a pelear por el máximo galardón, los Lakers podrían ver la luz al final del túnel una vez más y todo empezó con la fecha de canjes de la temporada pasada.

En una negociación con tres equipos entre el Jazz de Utah, los Timberwolves y los Lakers, el quinteto Oro-Purpura se deshizo de los servicios del guardia Russell Westbrook, que logró convertirse en agente libre y se mantuvo en Los Ángeles para firmar con los Clippers.

Los Lakers recibieron tres jugadores que les permitirían voltear de cabeza una temporada que insinuaban para el fracaso. Los Lakers vieron el regreso de un maduro D’Angelo Russell, además le dieron la bienvenida a los versátiles Malik Beasley y Jarred Vanderbilt.

Los Lakers no solo tuvieron un empuje increíble en su escuadra, sino que además estuvieron muy cerca de alcanzar Las Finales de la NBA. Los angelinos dejaron en el camino a los Memphis de Minnesota, a los Warriors de Golden State, para finalmente quedarse sin gas en la final de la Conferencia del Oeste contra los eventuales campeones los Nuggets de Denver.

Para este nuevo inicio de temporada, lo primordial para Lakers es el continuar lo que estaba haciendo, por lo que en este pasado verano hizo varias adiciones a su nómina: Gabe Vincent, Taurean Prince, Cam Reddish y Jaxson Hayes, de quien se espera funcione como una fuerza de protección defensiva y del tablero para los rebotes. Russell, Austin Reaves y Rui Hachimura volvieron a firmar con el equipo.

Los Lakers tienen serias opciones para alcanzar un título, posiblemente el último en la condecorada carrera de su máxima estrella LeBron James, quien tiene como mano derecha a la también figura Anthony Davis. Sin embargo, el secreto a voces de este éxito es Reaves, quien, desde su debut en 2021, ha ido dado pasos agigantados y se ha convertido en un hombre de suma importancia en la rotación del entrenador Darvin Ham.

Durante el verano, Reaves se mantuvo activo al jugar con el equipo de Estados Unidos en el Mundial de Básquetbol FIBA. El equipo estadounidense cayó en las semifinales del torneo ante Alemania. Aunque las esperanzas del Team USA siempre son de ganar la máxima presea, esta experiencia internacional será de beneficio para Reaves y que podrá seguir creciendo en su juego.

Reaves se ha ido convertido orgánicamente en esa tercera opción detrás de James y Davis, quienes tendrán sus propias batallas con la salud. Para que Lakers aspire a un título, James y Davis deberán mantenerse saludables, algo que cada año parece siempre ser un tema de conversación pues ambos jugadores fallaron una gran cantidad de partidos en la temporada pasada debido a lesiones.

La edad será otro factor importante. James cumplirá 39 años en diciembre en lo que será su año número 21 en la NBA y lo sorprendente es que lo hace aún a un máximo nivel. Físicamente, James es una de esas rarezas en el deporte y no cabe duda de que el día que se retire será recordado no solo como uno de los mejores basquetbolistas de la historia, pero como un ejemplo de durabilidad como atleta.

Para que James tenga éxito este año, deberá balancear su energía y enfocarse en una sola área de la cancha, por lo que dependerá mucho del trabajo que haga Davis en la defensiva, siendo que es considerado uno de los mejores defensas en la NBA protegiendo el ataque contrario.

Si Davis logra dominar en la defensiva, le permitirá a James hacer lo que mejor hace y es en el ataque. Aunque mucho se habla de la gran cantidad de dinero que gasta en sí mismo y de capacidad de James de cuidar su cuerpo, la edad no perdona y Davis, de 30 años, puede ser ese enfoque defensivo.

Hay que destacar que la directiva de los Lakers finalmente está entendiendo que, para ser efectivos, no se trata de hacer cambios bruscos, sino que tiene que haber continuidad que entienda el sistema de juego en su totalidad alrededor de James y Davis. Desde la llegada de James a Lakers en 2018, esta es la primera vez que la nómina del equipo so ven tan afectada durante el “off season”.

La clave para Lakers será empezar bien el torneo y mantenerse de esa forma pasado el fin de semana del Juego de las Estrellas para que sus jugadores principales tengan tiempo de recuperación de cara a los playoffs. El haber tenido que venir desde muy abajo en el campeonato pasado, causó mucho desgaste a James y compañía, lo que se notó tras ser fácilmente barridos en las finales de conferencia ante los Nuggets.

Para Ham, será necesario, si es que quiere ver el crecimiento de su equipo, de posesionar a Davis como centro, tal como lo hizo por primera vez desde su mandato en la temporada pasada. El balón debe llegarle a Davis más seguido y tiene que ser en muchas ocasiones el enfoque en el ataque, que incluye lanzar desde la distancia. Físicamente, Davis está completo y de no tener lesiones, podría ser un serio candidato a Jugador Más Valioso en la temporada.

Esta podría ser la temporada de Lakers de regresar a Las Finales, solo falta que las piezas caigan en su lugar y las lesiones se alejen.