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CRÍTICAS. Renacen ‘Mortal Kombat’ y ‘Demon Slayer’, y más estrenos de cine

Una escena de la nueva cinta de "Mortal Kombat".
(Cortesía)
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No puede haber nada que indique de manera más clara la reapertura completa de los cines estadounidenses que el hecho de que una cinta de anime se lance de manera masiva en estos recintos y hasta en tres formatos. Si quieres sabe a qué película nos referimos, solo tienes que leer el siguiente listado, en el que incluimos también reseñas de otros lanzamientos importantes de la semana.

MORTAL KOMBAT

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Director: Simon McQuoid

Reparto: Lewis Tan, Jessica McNamee, Josh Lawson

Género: Acción /

Veinticuatro años después de su más reciente incursión cinematográfica, que resultó tanto un desastre en el plano de la crítica como en el de la audiencia, llega de manera simultánea a las salas de cine y a HBO Max este ‘reboot’ de la franquicia surgida sobre la base de un popular videojuego que causó controversia desde su lanzamiento inicial, a inicios de los ’90, debido a la excesiva violencia que mostraba.

La buena noticia por aquí es que, a pesar de las nulas expectativas que yo tenía en esto, la “Mortal Kombat” del 2021 es no solo aparentemente una delicia para los fans del juego (aunque no podría dar fe de ello porque nunca lo he probado), sino también una cinta de acción para adultos que se defiende por cuenta propia mientras cuenta la historia de Cole Young (Lewis Tan), un peleador de artes marciales mixtas que se ve obligado a unir a varios campeones de lucha para enfrentarse a las fuerzas malévolas del Mundo Exterior (Outworld).

Aunque la actuación de Young no es precisamente memorable y el desarrollo de los personajes deja mucho que desear, la historia entera es de lo más entretenida, y le deja espacio a un sentido del humor que da afortunadamente en el blanco. Pero lo que todo el mundo espera realmente es el momento de las peleas, y estas nunca decepcionan, porque si bien apelan a la fantasía un tanto ridícula de sus orígenes gráficos, reproducen también con osadía una buena parte del ‘gore’ que le dio nombre y fama al juego original.

DEMON SLAYER- THE MOVIE: MUGEN TRAIN

Director: Haruo Sotozaki

Género: Animación / Acción

El lanzamiento por todo lo alto de esta cinta de anime, que incluye estrenos en numerosas salas de Estados Unidos tanto en su versión original japonesa -con subtítulos en inglés- como en una modalidad debidamente traducida al inglés, y que se ha hecho extensivo a muchos países latinoamericanos, da cuenta de la inmensa popularidad de “Dragon Slayer”, una saga iniciada bajo forma de manga (historietas) que se convirtió luego en una serie (disponible en Netflix) y que llega ahora a la gran pantalla convertida en largometraje.

La película de largo nombre es una secuela del show televisivo que empieza exactamente donde terminó este, lo que significa que hay que estar al menos familiarizados con la historia original para entender lo que sucede aquí. Pero lo que se nos muestra ahora no funciona como una recopilación de relatos breves protagonizados por los jóvenes cazadores de demonios, sino que se centra en una nueva aventura específica (un largo viaje en tren acosado por las criaturas malévolas), permitiendo un desarrollo mucho mayor de los hechos, así como la inserción de diversas escenas que remiten al pasado de los mismos personajes.

Sin embargo, lo más llamativo de este sorprendente y emocionante filme, que combina los estallidos de humor excesivo con las explosiones de melodrama (como lo hacía la serie, y como sucede en general en estos formatos de origen nipón), son sus escenas de acción, que resultan absolutamente espectaculares y nos hacen olvidar muchas veces el hecho de encontrarnos ante un trabajo de animación. Hay que precisar que el largometraje se estrena por aquí con una clasificación R (para adultos), porque si bien no tiene escenas sexuales ni malas palabras, se encuentra completamente cargado de violencia y de ‘gore’.

STOWAWAY

Director: Joe Penna

Reparto: Anna Kendrick, Daniel Dae Kim, Shamier Anderson

Género: Ciencia ficción

Debido a las recientes aventuras del Perseverance, Marte se ha encontrado últimamente en boca de todos. Y es probable que se lo mencione nuevamente de manera cotidiana debido al estreno directo en la plataforma de Netflix de “Stowaway”, un inspirado filme de ciencia ficción que, desde su inicio mismo, nos coloca al interior de un vehículo espacial con dirección al planeta rojo.

Pero la verdad es que este atractivo destino se convierte simplemente en excusa para la elaboración de un relato que, bajo la dirección y la pluma de Joe Penna -un reconocido músico y cineasta brasileño radicado en L.A.-, se dedica a analizar lo que sucede con un pequeño grupo humano en condiciones de confinamiento (¿les suena conocido?) al enfrentarse a una situación inesperada y potencialmente peligrosa, en este caso, un polizonte accidental que es descubierto en la nave, y cuya suerte no luce precisamente afortunada en vista de que las condiciones no se prestan para su presencia.

De la mano de un guion inteligente aunque no del todo perfecto, la cinta plantea interesantes dilemas morales, se encuentra lleno de interpretaciones sólidas y no decepciona tampoco en lo que se refiere a los efectos especiales, lo que la convierte en una de las propuestas más atractivas en las plataformas de subscripción durante este fin de semana.

BLOODTHIRSTY

Directora: Amelia Moses

Reparto: Lauren Beatty, Greg Bryk, Katharine King So

Género: Terror

Cualquier amante del terror sabe bien que el género de sus amores cojea particularmente en lo que respecta a filmes sobre hombres-lobo, sobre todo en la época moderna, por lo que cualquier aporte en ese sentido es recibido con muchas expectativas, como será probablemente el caso de “Bloodthirsty”, una producción canadiense que se encuentra ya disponible en Video On Demand.

En ella, Grey (Lauren Beatty), una cantante vegana de ‘indie’ que sufre de inquietantes visiones animalísticas y carnívoras, decide viajar con su novia Charlie (Katherine King So) hasta la casa en las montañas de Vaugh (Greg Bryk), un legendario y misterioso productor musical que estuvo involucrado en un sonado caso vinculado a la muerte de otra artista. Una vez allí, Grey y Vaugh traban una relación cada vez más cercana y peligrosa que supera los límites laborales y que podría tener que ver con un aterrador punto en común entre los dos.

“Bloodthirsty”, que fue dirigida por una mujer (Amelia Moses), juega siempre la carta de la seriedad, y cuando se considera que lo que presenta se siente frecuentemente artificioso, puede ser vista como una cinta fallida en el importante plano de la credibilidad; pero eso mismo le otorga un simpático aire de serie B que se ve reforzado por su manejo de los efectos especiales y que, en este caso, sirve también como una referencia aparentemente intencional a ciertas producciones del pasado, pese a que la historia se desarrolla en la actualidad. No hay que perder tampoco de vista la llamativa banda sonora creada por la celebrada cantautora Lowell.

STREET GANG: HOW WE GOT TO SESAME STREET

Director: Marilyn Agrelo

Género: Documental

Hayas crecido donde hayas crecido, es probable que estés familiarizado de un modo u otro con “Sesame Street”, que recibió en Latinoamérica el nombre de “Plaza Sésamo”. Pero es igualmente probable que desconozcas los fascinantes entretelones de esta influyente serie televisiva, que se revelan con gusto y detalle en el nuevo documental “Street Gang: How We Got to Sesame Street”, disponible ya en salas de cine y desde el 7 de mayo en Video On Demand.

El nuevo largometraje nos lleva no solo a conocer los orígenes de un show para la pantalla chica que surgió como un esfuerzo consciente por parte de un grupo de educadores y artistas para revertir el daño que se le estaba haciendo a los espectadores más pequeños (con la abundancia de programas supuestamente dedicados a ellos, pero que eran en realidad ‘trampas’ publicitarias), sino también a enterarnos de los increíbles esfuerzos realizados por los involucrados en el proyecto para que este lograra salir a flote.

Tampoco deja de lado, por supuesto, a los talentos de la vida real que participaron en su elaboración, no solo en lo que respecta a celebridades como Jim Henson y Frank Oz (los genios de las marionetas detrás de “The Muppet Show”), sino en lo que se refiere también a los esforzados creadores que estuvieron detrás de cámaras, empezando por el poco valorado Jon Stone (quien sufría de depresión crónica) y siguiendo con la productora Joan Ganz Cooney). Finalmente, en lo que a este medio respecta, es imposible dejar de lado la presencia de Emilio Delgado, el actor mexicano que llevó el español y las costumbres latinas a la insuperable plaza.

WE BROKE UP

Director: Jeff Rosenberg

Reparto: Aya Cash, William Jackson Harper, Sarah Bolger

Género: Romance

Las complicaciones propias de cualquier relación de pareja son el tema central de “We Broke Up” (disponible desde hoy en salas y Video On Demand), una cinta cuyas intenciones realistas son completamente creíbles y que se deja ver sin problemas, pero que no alcanza nunca el vuelo necesario para convertirse en una propuesta esencial del género en el que se inscribe.

Desde la primera escena, sabemos ya que las cosas entre Lory (Aya Cash) y Doug (William Jackson Harper) no van a estar bien, porque, luego de que ella vomita al escuchar la proposición de matrimonio de él y reacciona luego con profundo silencio ante la misma idea -pese a que ambos han estado juntos por una década-, Doug decide terminar la relación. El problema es que esto sucede a las puertas de la boda de la hermana de Lori, y para no afectar a los involucrados, los (ex)novios deciden asistir al evento de varios días -ya que se realiza en un campamento de verano fuera de la ciudad- fingiendo que no se han separado.

Se trata de una mala idea, por supuesto, como lo van revelando poco a poco los hechos que se producen en el campamento, y que nos presentan a muchos otros personajes, incluyendo a Bea (Sarah Bolger) y Jayson (Tony Cavalero), quienes se van a casar tras solo un mes de noviazgo. Nada de lo que se ve se encuentra realmente fuera de lugar, y las relaciones entre los personajes son todas convincentes, pero la historia no llega a despegar del todo y la puesta en escena carece de la inspiración necesaria para trascender.

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