Con la vacuna, California ingresa a una nueva fase de la pandemia

- Share via
Con el ‘clic’ de las cámaras de fondo y el gobernador Gavin Newsom parado a su lado, con una mascarilla quirúrgica sobre su boca, la enfermera de cuidados intensivos Helen Córdova se arremangó su bata azul el lunes por la tarde y se convirtió en una de las primeras californianas en recibir la vacuna contra el coronavirus.
“Protégeme”, dijo riendo, justo antes de que la enfermera Marilyn Lansangan le pinchara el brazo derecho.
Los vítores estallaron entre la pequeña multitud enmascarada de médicos, enfermeras y funcionarios electos, antes de que la jeringa estuviera incluso fuera del brazo de Córdova.
La inoculación, realizada en una sala de conferencias del Kaiser Permanente Los Angeles Medical Center, marcó el comienzo de una nueva y esperanzadora fase de la pandemia de COVID-19, que ha enfermado a más de 1.6 millones de californianos y quitado la vida a más de 21.000.
Córdova y otros cuatro trabajadores de la salud fueron las primeras personas en el condado de Los Ángeles fuera de un ensayo clínico en recibir las dosis realizadas por Pfizer Inc. y BioNTech, lo cual marcó el comienzo de lo que será una larga campaña de inmunización en California.
Pero aunque la vacuna es prometedora, llega mientras EE.UU se enfrenta al momento más oscuro de la crisis del coronavirus. El lunes, la cifra de decesos en Estados Unidos superó los 300.000, y California, como gran parte del país, atraviesa la peor ola de la enfermedad.
Un número récord de personas se han infectado y están internadas con COVID-19 en estos días, y el espacio en las unidades de cuidados intensivos (UCI) en todo el estado se redujo a mínimos peligrosos. La situación es especialmente grave en el Valle de San Joaquín, donde la disponibilidad de camas de UCI esta semana es de cero.
Newsom afirmó estar “entusiasmado de que haya luz al final del túnel, pero consciente de que todavía estamos en el túnel”. “Nos encontramos en medio del peor momento de esta pandemia”, enfatizó. “Así que hoy es esperanzador, y es una razón para ser optimistas, pero seamos conscientes de dónde estamos realmente”.
Incluso para los miembros del personal médico de Kaiser que recibieron sus vacunas con el mundo como testigo, no hubo permisos especiales; debieron volver enseguida al trabajo.
“Está mucho más ocupado ahora de lo que estaba inicialmente”, afirmó Kim Taylor, una enfermera de 53 años en el departamento de emergencias del hospital que recibió su vacuna después de Córdova.
Cuando Taylor llegó al centro médico, el lunes por la mañana, cuatro pacientes esperaban una cama en la UCI. A veces, comentó, deben esperar por días.
Después de su vacunación, Taylor se paró ante un grupo de cámaras de televisión y suplicó al público cansado que continuara usando mascarillas, que se quedaran en casa para Navidad y que se vacunen cuando puedan. “Nosotros, los trabajadores de primera línea, hemos estado aquí día y noche durante los últimos nueve meses, sacrificando mucho de lo que hacemos y amamos para cuidar a nuestros pacientes”, expuso. “Hemos estado haciendo esto mientras intentamos cuidar a nuestras propias familias y mantenerlas a salvo... No podemos ganar esta pelea solos. Necesitamos de su ayuda para conservar bajos nuestros números”.
El Dr. Brian Thompson, un médico de urgencias de 61 años que era el siguiente en la fila para vacunarse, nació en el hospital Kaiser, donde trabaja desde 1988. “Hemos superado el SARS, el MERS; nada se compara con esto”, reconoció Thompson, quien ha atendido a pacientes con COVID-19 desde marzo, cuando el brote inicial obligó al estado a poner un alto a las actividades normales.
Otros dos empleados de Kaiser también recibieron dosis el lunes: Ángela Balam, trabajadora de servicios ambientales, y Raúl Aguilar, técnico de terapia respiratoria.
Junto con Los Ángeles, otras tres ciudades de California recibieron vacunas el lunes: San Diego, San Francisco y Eureka.
Se esperaba que veinticuatro sitios adicionales recibieran viales el martes, seguidos de cinco más el miércoles.
Según Newsom, California ya ha recibido 33.150 dosis de la vacuna. La asignación inicial del estado, 327.600 dosis en total, se destinará principalmente a hospitales de cuidados intensivos para ser administradas a los trabajadores de la salud, aunque algunos condados anticiparon que también enviarán una parte a centros de enfermería especializada.
California planea recibir aproximadamente 2.1 millones de dosis para fin de año, precisó Newsom. Pero la vacuna estará disponible para todos los que la deseen hasta la primavera, como muy pronto.
Aunque en el país el desarrollo de múltiples vacunas exitosas contra el COVID-19 fue rápido, y ocurrió en medio del contexto políticamente cargado de una elección presidencial, los funcionarios y los trabajadores de la salud que recibieron inyecciones el lunes enfatizaron la seguridad y eficacia de éstas, e instaron al público ansioso a aplicárselas tan pronto como sea posible.
“Estas vacunas no han sido infectadas por la política”, ironizó el alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, en una conferencia de prensa en el hospital. “Pueden confiar en ellas. Deben confiar en ellas. Yo confío”.
El alcalde agregó: “Cuando llegue mi turno estaré listo, será probablemente aquí en Kaiser, y con mi familia”. “Haber presenciado la inmunización que acabamos de ver me hizo llorar, porque muestra el ingenio humano”, remarcó Garcetti. “Muestra la terquedad que tenemos los seres humanos: queremos sobrevivir. Queremos prosperar. Y lo superaremos”.
Un grupo de trabajo formado por científicos y expertos que representan a California, Nevada, Oregón y Washington revisó la vacuna y respaldó su seguridad.
La inmunización llega durante un período oscuro en California. El estado promedió 32.858 nuevos casos de coronavirus por día durante la última semana, el nivel más alto de la historia y un incremento del 133% desde hace dos semanas, según datos compilados por The Times.
El lunes, California rompió otro récord de la mayor cantidad de casos de coronavirus reportados en un solo día: 42.129, según un recuento condado por condado de The Times. La cifra rompe un récord establecido por última vez el 8 de diciembre, cuando se contaron 35.400 casos.
La cantidad de pacientes hospitalizados con coronavirus positivos en todo el estado también sigue aumentando y alcanzó un récord de 13.635 hasta el domingo. Eso cuadriplica el número del mes pasado, según los últimos datos del estado.
El lunes, San Francisco recibió 2.000 viales, informó el jefe de salud pública de la ciudad. “Estamos al borde de un momento histórico para nuestra ciudad: comienza la vacunación contra el COVID-19”, declaró el Dr. Grant Colfax, director del Departamento de Salud Pública de esa ciudad.
La vacuna fue enviada al Zuckerberg San Francisco General Hospital, administrado por la ciudad. “Será un despliegue largo, aunque demasiado tarde para este pico”, reconoció Colfax. El funcionario señaló que más habitantes de San Francisco están infectados con el coronavirus que en cualquier momento anterior durante la pandemia. “Creo que es muy importante dar un paso atrás por un momento y darnos cuenta de cuán grave se ha vuelto nuestra situación”, reflexionó.
Durante la última semana, la ciudad reportó más de 200 nuevos casos de coronavirus todos los días y no hay señales de que el pico esté disminuyendo, añadió.
El condado de San Diego recibirá inicialmente 28.275 dosis de vacuna.
El lunes llegaron tres cajas de dosis, tuiteó el Condado. Estos serán utilizados tanto por el propio Condado —que opera el San Diego County Psychiatric Hospital—, como por los centros médicos. Se espera que cinco de ellos reciban asignaciones del primer lote de vacunas, aunque no está claro cuántas dosis recibirían.
Otros tres hospitales, incluido el Rady Children’s Hospital, recibirán la vacuna directamente de Pfizer. Según un portavoz de Rady, los viales se esperan para este martes.
En el condado de Humboldt, llegaron 975 dosis al St. Joseph Hospital, en Eureka, el lunes.
El condado de Los Ángeles debe recibir 82.875 dosis como parte de su envío inicial de vacunas, anticiparon las autoridades.
El lunes fue un “día monumental”, según la directora de Salud Pública del condado de Los Ángeles, Bárbara Ferrer, quien apenas la semana pasada luchó contra las lágrimas cuando anunció que el número de fallecidos en el Condado había superado los 8.000. Pero la funcionaria enfatizó que los residentes deben permanecer diligentes ya que probablemente pasarán meses antes de que las vacunas se distribuyan ampliamente al público en general.
“Las decisiones que toman todas las personas y empresas a lo largo de cada día tienen un impacto en lo que sucede en nuestros hospitales”, señaló. “Quien no sigue las reglas, para decirlo sin rodeos, en este punto es parte del problema y está contribuyendo a los angustiosos aumentos que vemos de casos, hospitalizaciones y muertes”.
La disponibilidad de camas de UCI se redujo a un escaso 2.7% en la región del sur de California, una franja en expansión que cubre los condados de Imperial, Inyo, Los Ángeles, Mono, Orange, Riverside, San Bernardino, San Diego, San Luis Obispo, Santa Bárbara y Ventura.
Los expertos en salud temen que el reciente incremento masivo de casos eventualmente desencadene una ola de hospitalizaciones y que las tasas de mortalidad aumenten si las UCI ya no pueden acomodar a los pacientes más enfermos.
“Obviamente, todos estamos emocionados con las imágenes de las primeras vacunaciones en el país y en Los Ángeles. Comparto esa alegría, y es un recordatorio para todos nosotros de que la pandemia algún día llegará a su fin”, comentó la Dra. Christina Ghaly, directora de servicios de salud del condado de L.A. “Pero en medio de esa alegría, y esa feliz historia que cuenta, no podemos perder de vista el hecho de que todavía estamos […] en medio de una oleada muy mortal y peligrosa”.
Los redactores de planta de The Times Alex Wigglesworth, Tracy Wilkinson y Maya Lau contribuyeron con este informe, al igual que Jonathan Wosen y Andrew Dyer, del San Diego Union-Tribune.
Para leer esta nota en inglés haga clic aquí
Suscríbase al Kiosco Digital
Encuentre noticias sobre su comunidad, entretenimiento, eventos locales y todo lo que desea saber del mundo del deporte y de sus equipos preferidos.
Ocasionalmente, puede recibir contenido promocional del Los Angeles Times en Español.