¿Se puede visitar Baja California ahora? Tal vez. Esto es lo que necesita saber

¿Es este el momento para unas vacaciones en Baja?

Absolutamente no, dice el gobernador de California, respaldado por legiones de funcionarios de salud locales y estatales que desalientan los viajes no esenciales y están alarmados por la continua propagación de COVID-19 en ambos lados de la frontera.

Sí, dicen decenas de hoteleros mexicanos y trabajadores de la industria turística, desesperados por ingresos y deseosos de explicar nuevas medidas de seguridad.

Consulte con el gobierno de Estados Unidos, y la respuesta depende de la agencia a la que pregunte, y si va en automóvil o en avión.

Mientras tanto, decenas de hoteles en Baja California han abierto en las últimas semanas, apostando a que miles de estadounidenses están listos para ir al sur. Las aerolíneas también están agregando vuelos a Baja California, incluso cuando Canadá y gran parte de Europa han prohibido a los turistas estadounidenses, y Estados Unidos ha prohibido a los turistas de gran parte de Europa.

El gobernador de Baja California Sur, Carlos Mendoza Davis, dijo que estas reglas de reapertura se mantendrían en vigor a pesar de las tasas de infección que han llevado a la mitad sur de la península a la categoría más severa en la clasificación de riesgo COVID-19 de la Secretaría de Salud de México.

Baja California Sur incluye Los Cabos, La Paz, Loreto y la parte sur de la península de Baja California. La parte norte de la península es el estado de Baja California, que incluye Tijuana, Ensenada y Mexicali.

Con las infecciones y las muertes aumentando rápidamente en EE.UU y México, y una gran parte de la economía de la península de Baja California en juego, aquí hay algunas preguntas y respuestas para considerar.

¿Qué dicen las agencias estadounidenses? Si vuela de LAX a Los Cabos, está desafiando el consejo de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU, que advierten “en contra de los viajes internacionales no esenciales” porque “incrementan las posibilidades de contraer y propagar COVID-19”.

También está ignorando el aviso de salud global del Departamento de Estado de EE.UU, que aconseja a los ciudadanos estadounidenses a “evitar todos los viajes internacionales debido al impacto global de COVID-19”.

Pero mientras vuele, no está infringiendo ninguna ley. Cuando el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos y México acordaron en marzo prohibir los viajes no esenciales a través de sus fronteras, la prohibición incluyó automóviles, trenes de cercanías y viajes en ferry, pero dejaba fuera los viajes por “avión, ferrocarril o mar”.

Las autoridades de Estados Unidos y México acordaron la semana pasada renovar ese pacto hasta el 20 de agosto.

Muchas fuentes gubernamentales y mediáticas han pasado por alto la distinción de los viajes por vía aérea/terrestre. El 16 de junio, por ejemplo, el Departamento de Seguridad Nacional emitió un documento informativo diciendo que los acuerdos de Estados Unidos con México y Canadá “limitan todos los viajes no esenciales a través de las fronteras”, sin mencionar los vuelos.

“Eso es una confusión en la mente de los posibles viajeros”, dijo el jueves el director general de la Junta de Turismo de Los Cabos, Rodrigo Esponda.

Cuando se le preguntó sobre esta disposición, el Departamento de Estado de EE.UU remitió los correos electrónicos al Departamento de Seguridad Nacional, que no respondió.

¿Cuánto se está volviendo a abrir en el sur de Baja California? Desde principios de junio, 72 de los 85 principales hoteles han abierto en Los Cabos, muchos prometen normas de seguridad más estrictas y reservas más flexibles. Esponda estimó que los precios de las habitaciones no han cambiado mucho desde los niveles previos a la pandemia, con un promedio diario de unos 300 dólares.

Los funcionarios del gobierno han instado a las personas a usar cubrebocas en las áreas públicas. La Junta de Turismo de Los Cabos dijo que los visitantes deben esperar responder un cuestionario de salud y que se les tome la temperatura en el aeropuerto y en 22 playas locales donde las autoridades aseguran que están haciendo cumplir los límites de hacinamiento.

Aunque los bares que no sirven comida están cerrados, Esponda dijo que 16 de los 18 campos de golf del área y cerca de 300 de sus 2.000 restaurantes están abiertos.

Los hoteles, a los que se les permite alquilar hasta el 30% de sus habitaciones, ya han alcanzado el 20% de ocupación, dijo Esponda, y aproximadamente dos de cada cinco huéspedes son de California.

Sin embargo, las infecciones por el nuevo coronavirus han incrementado en las últimas semanas. En los municipios fuera de Los Cabos, incluyendo La Paz, Comondú y Mulegé, las autoridades han cerrado playas.

“Era completamente lógico, esperado y planeado que hubiera un ligero aumento en el número de casos en Los Cabos”, manifestó Esponda.

“Es una situación muy difícil, y estamos en la confluencia de la salud y la economía”, dijo Bryan Jáuregui, copropietario de Los Colibris Casitas en el pueblo costero de Todos Santos.

Jáuregui, cuyos huéspedes en verano son en su mayoría de México, dijo que él y otras personas de la zona han tenido una doble misión: añadir nuevas medidas de salud en el lugar de trabajo y ayudar a las organizaciones benéficas locales a alimentar a miles de familias en Los Cabos, Todos Santos y más allá, cuyos empleos turísticos aún no han regresado.

¿Cómo se comparan las tasas de infección por coronavirus entre California, Baja California y Baja California Sur?

California tiene la peor tasa de infecciones notificadas recientemente por habitante, seguida de Baja California Sur y luego Baja California.

En el estado de Baja California (la mitad norte y más poblada de la península), un recuento del New York Times mostró 12.053 casos reportados y 2.397 muertes hasta el 21 de julio, incluyendo 35 casos nuevos por cada 100.000 personas en los siete días anteriores. (Baja California rastrea sus casos de COVID-19 aquí).

En Baja California Sur, el mismo conteo mostró 3.217 casos y 118 muertes, incluyendo 100 casos nuevos por cada 100.000 personas en los siete días anteriores. (Baja California Sur rastrea los casos de COVID-19 aquí).

Mientras tanto, en California, el conteo del 21 de julio mostró 400.195 casos y 7.764 muertes, incluyendo 162 casos nuevos por cada 100.000 personas en los siete días anteriores.

Si los californianos viajan, la oficina de asuntos públicos del Departamento de Salud Pública del estado dijo: “Debe ser por asuntos urgentes o si dicho viaje es esencial para su trabajo permitido. Evite viajar largas distancias por vacaciones o placer tanto como sea posible. Esto es para frenar la propagación del coronavirus”.

¿Quién está volando entre LAX y Los Cabos? En abril, solo 1.200 pasajeros internacionales llegaron al aeropuerto de Los Cabos, seguidos de 1.550 en mayo, según el recuento del Grupo Aeroportuario del Pacífico. El número en junio fue de 11.350, muy por debajo de los 158.650 que llegaron en junio de 2019, pero subiendo rápidamente.

A principios de julio, Alaska, American y Delta volaban diariamente entre LAX y Los Cabos. Alaska (que también vuela a Los Cabos desde San José y San Diego y desde LAX a Loreto dos veces por semana) en agosto planea agregar un vuelo San Francisco-Los Cabos y un segundo vuelo LAX-Los Cabos. United el 3 de agosto comenzará a volar cinco veces a la semana entre Los Cabos y LAX, y también entre Los Cabos y San Francisco.

¿Las restricciones son las mismas en Baja California y Baja California Sur? No. Al igual que en Estados Unidos, las evaluaciones de salud y las reglas de pandemia varían entre los estados y dentro de los estados y han cambiado con frecuencia. Sin embargo, los límites de capacidad del 30% son comunes en los hoteles y restaurantes de ambos estados. En el estado de Baja California, que incluye Tijuana, Rosarito, Ensenada y la zona vitivinícola del Valle de Guadalupe, los mayores índices de infección y muerte en la primavera provocaron restricciones federales más estrictas. En Ensenada, el tránsito fue limitado y se impuso un toque de queda.

El 15 de julio, los funcionarios de Rosarito anunciaron que todas las playas municipales estarían cerradas los sábados y los domingos, con un horario limitado de apertura en los días de semana, hasta nuevo aviso.

“Diferentes municipios están haciendo cosas diferentes”, dijo Shauna Hill, gerente de servicio al cliente de Baja Bound Mexican Insurance, que vende pólizas en línea a los estadounidenses que cruzan la frontera. Debido a que las cosas cambian con tanta frecuencia, Hill sugirió que los posibles visitantes sigan las publicaciones de redes sociales de los gobiernos locales.

¿Qué pasa con los cruceros de Estados Unidos-Baja California? No hay este verano. Los CDC han tenido una “orden de no navegar” en efecto en aguas estadounidenses desde marzo; se espera que dure al menos hasta el 30 de septiembre.

¿Cuánta gente está cruzando la frontera en automóvil? Las estadísticas del Departamento de Transporte de EE.UU muestran que en mayo, más de 1 millón de vehículos cruzaron a Estados Unidos en San Ysidro. Eso es menos de la mitad de lo que hubo en mayo de 2019, pero sugiere que muchos viajeros binacionales en San Diego y Tijuana han reanudado sus viajes transfronterizos. (El Departamento de Transporte de EE.UU no cuenta los vehículos que ingresan a México).

¿Qué hay del crimen? Según el recuento del gobierno mexicano, Tijuana fue el sitio de homicidio No. 1 de la nación en 2019. La ciudad, con 1.3 millones de residentes, sufrió más de 2.100 homicidios el año pasado. Los Ángeles, con 4 millones de residentes, tuvo menos de 300 el año pasado. Las estadísticas de homicidios por estado para la primera mitad de 2020 muestran que Baja California Sur está entre los que tienen menos asesinatos y Baja California entre los que tienen más.

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