Andrea Bocelli, el tenor lírico que le pone el ‘pecho’ a la vida

Andrea Bocelli me transmite serenidad, confianza, superación y humildad. Alisto mis mejores argumentos para, esta vez, poder saludarlo, aplaudirlo a mares y expresarle mi más profunda admiración. Su voz es una caricia para el alma y el mejor estimulante para desatar los sentimientos más profundos e inspiradores ¡Buen concierto, para todos!

Es necesario hablar de este aclamado artista italiano, quien hará dos magistrales conciertos en México, el primero en la Riviera Maya, el próximo 26 de febrero, teniendo a la playa como escenario; mientras el otro será el 11 de junio en Ensenada, Baja California Norte.

Sin duda, es una de las mejores voces de la ópera moderna y de las más aclamadas por los amantes de este arte, a nivel mundial. Lo cierto es que Andrea Bocelli, el artista nacido en Lajatico (provincia de Toscana, en Italia) nos recuerda que no hay mayor discapacidad que ponerse límites para alcanzar los sueños. Él es un ejemplo de lo alto que se puede volar cuando se tiene el furor, las ganas de triunfar y, especialmente, el talento como herramienta para lanzarse a grandes desafíos.

No obstante, él mismo alguna vez dijo que, pese a vivir en un mundo cambiante, acepta con calma todo lo que la vida le presenta. “Disfruto de las cosas más simples y acepto fácilmente cualquier reto del destino. Siempre trato de mantenerme optimista y sigo el verdadero significado de lo expresado por el autor francés Antoine de Saint-Exupery, en su obra “El Principito”, cuando dice: ‘realmente vemos solo con el corazón. La esencia de las cosas es invisible a nuestro ojos’”.

No cabe duda de que es uno de los cantantes de mayor reconocimiento, por esa magnífica y valorada voz, que le ha permitido grabar 10 óperas completas y más de 45 discos con canciones clásicas, pop y románticas, porque –además- es un intérprete con la riqueza y el potencial para entonar cualquier género musical, sin el mayor aspaviento.

Por eso, muchas veces después de ver tantos éxitos y reconocimientos en la vida de este cantante toscano, me pregunto: ¿Quién sería la figura número uno de la ópera hoy, si Bocelli hubiera decidido ejercer la carrera de Derecho que estudió en la Universidad de Pisa?, ¿Qué habría pasado si el rockero italiano, Zucchero, no hubiera convocado a tenores interesados en hacer un casting para elegir quién lo acompañaría a grabar un demo promocional? y, también ¿Qué sería de este tenor lírico si Luciano Pavarotti, después de escucharlo, no le hubiera dicho a Zucchero que la voz de ese joven talento era suficiente para alcanzar los resultados que esperaba? Pero, lo más importante, ¿Qué hubiera pasado si Zucchero no lo escoge como tenor ganador y lo lleva a esa gira europea, en la que Andrea recibe la aceptación total del público y se empodera para continuar y lograr ser el tenor que es en la actualidad?

Horizonte con sol permanente

Pero es gracias a esa entrada triunfal que Pavarotti invita a Bocelli a hacer parte del grupo de cantantes en el Pavarotti & Friends, segunda edición, evento con el que la carrera de este hombre da un salto de alta calidad, y los que nos consideramos sus seguidores tenemos el privilegio, desde entonces, de deleitarnos con su voz.

Sin embargo, hay que entender algo importante, y es que la música no llega a la vida de este artista por azar, sino como talento puro desde su temprana infancia. No obstante, desde los seis años, ya estudiaba piano, flauta y saxofón, pese a tener corta visión, por el problema de glaucoma congénita adquirida desde el vientre de su madre, quien embarazada tuvo que enfrentar una apendicitis.

Aun así, luego de sufrir un fuerte golpe jugando al fútbol, que le causó ceguera total a sus 12 años, Bocelli continúa con la música; incluso, cuando estudiaba sus materias de Derecho, en la Facultad, alternaba el tiempo para, también, tomar lecciones de música con Luciano Bettarini, con el que participó en varios concursos; y también recibió clases de canto con el maestro y gran tenor italiano Franco Corelli, que lo llevó a ir perfeccionando su técnica, hasta recibir la invitación de Zucchero, que lo catapultó en los grandes escenarios.

Él mismo afirmó una vez: “Absolutamente cada momento de mi vida ha estado lleno de un amor apasionado por la música. Los mayores tenores de Italia, entre ellos Del Mónaco, Gigli y, en mayor medida, Corelli, siempre me han causado una gran admiración y me inspiraron, cuando aún era muy joven. Siguiendo su ejemplo de amor por la ópera, he dedicado toda mi vida al sueño de convertirme en un gran tenor”.

Concierto en México

Ahora, después de haberse recuperado del Covid, del que fue un paciente asintomático, y de haberle puesto todo el ‘pecho’ a la pandemia, ofreciendo melodías, un concierto doméstico con su piano en el marco de “La Música Une”, show organizado por la RAI, con más de 20 figuras de la canción italiana que logró más de 3 millones de espectadores; y una apoteósica presentación: “Música para la esperanza”, realizada desde la Catedral de Milán; además de haber hecho el tema original de la película “Gratia Plena”, del director Marco Pontecorvo, entre otras cosas, el tenor lírico italiano se prepara para ofrecer dos magistrales conciertos en México.

El primero será en la Riviera Maya, más específicamente en el hotel Playa Maroma Beach Club, el próximo 26 de febrero, con un máximo de seis mil asistentes. Mientras el otro será en Ensenada, Baja California Norte, propiamente en Bajamar Ocean Front Golf Resort, cercano a los viñedos de Guadalupe, el próximo 11 de junio, el cual hará parte de su gira “Believe World Tour”, en el que interpretará los más recientes temas de su disco Believe.

Music Vibe es la promotora responsable de estos eventos, fuera de serie, que además contarán con cata de los vinos de Andrea Bocelli. Esta empresa, dirigida por el José Luis Alva, hoy se encarga de promocionar estos espectáculos, pero no solo en México, sino en todo el continente americano, esperando tener –como asistentes a esta icónica presentación- a gente de Estados Unidos, Colombia, Perú, Chile, Argentina, Brasil, Ecuador, Panamá y hasta República Dominicana, por citar solo algunas naciones.

Creo que para todos los que somos amantes de la ópera y de las voces de gran nivel es el momento de disfrutar, en vivo, del talento de este italiano, a quien particularmente admiro por su tenacidad, entusiasmo y disciplina. Confieso que me lo he encontrado en varias ocasiones en Forte dei Marmi, en la provincia italiana de Lucca, en donde él reside con su esposa y manager, Verónica Berti, y su hija, Virginia, pero nunca me he atrevido a hablarle, especialmente porque siempre está cenando en familia, en algún restaurante, y no quiero interrumpir. Pero confío, en esta ocasión, poder tener el privilegio de entablar una charla con él y hasta de poder compartir un vino.