Grupo anti-inmigrante lanza videos de víctimas a manos de indocumentados, y pide fondos
Uno de los más grandes grupos anti-inmigrantes de Estados Unidos lanza en su página varios videos de personas cuyos familiares han muerto a manos de indocumentados, y aprovecha para pedir donaciones de hasta mil dólares para “aliviar el sistema de inmigración roto”.
La Federación Para la Reforma Migratoria (FAIR), que empuja a nivel nacional que los hijos de extranjeros que nacen en Estados Unidos no obtengan la ciudadanía, muestra seis videos con testimonios hablando de los presuntos crímenes.
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“La idea de que la inmigración ilegal es un delito sin víctimas ha sido promovida por activistas de fronteras abiertas, grupos de interés especial y la élite de los medios. Trágicamente, hay un número creciente de madres y padres estadounidenses que nunca volverán a ver a sus hijos”, dice la página.
FAIR destaca los “efectos devastadores de la inmigración descontrolada y brinda a las familias afectadas por el crimen ilegal extranjero una plataforma para compartir sus historias y escuchar sus voces”, agrega.
Los organizadores piden donaciones, en sus palabras, para “luchar para arreglar nuestro sistema de inmigración que no funciona”, con sumas iniciales de 25 dólares mensuales y hasta mil dólares u otras cantidades más grandes.
A sus 29 años de edad, Iliana Martínez probó por primera vez el téjate, una bebida ancestral proveniente de Oaxaca, México, que está hecha a base de maíz y cacao.
Se estima que Estados Unidos cuenta con poco más de 12 millones de personas indocumentadas en el país.
Para 2019, la cifra de indocumentados que cometió homicidio u homicidio involuntario fue de dos personas en toda la nación. El año anterior a ese fueron tres, según US Customs and Border Protection.
Los que fueron condenados por ofensas sexuales en 2019 sumaron 58, y el año anterior a ese fueron 80 personas. Asimismo, las condenas por robo y fraude fueron aplicadas para 184 indocumentados en 2019, mientras el año anterior la cifra fue de 347 personas.
Aunque los líderes pro-inmigrantes condenan todos los crímenes, sostienen que la mayoría de personas sin documentos en este país no refleja una cara de inmigración negativa para la nación.
En 2017, por ejemplo, California se convirtió en un “estado santuario” tras la aprobación del Proyecto de Ley 54 del Senado, que limita la cooperación de la policía estatal y local con las autoridades federales de inmigración. Tras la aprobación de la SB-54, algunos críticos temen que aumenten las tasas de criminalidad.
Algunos dentistas recomiendan la extracción de muelas del juicio, incluso si los dientes impactados no están causando problemas.
Sin embargo, el impacto de la SB-54 en los delitos violentos y de propiedad no es robusto ni lo suficientemente grande como para descartar un efecto nulo, de acuerdo al más reciente estudio de Charis Kubrin, de University of California Irvine.
Ángela Sanbrano, activista comunitaria, sostiene que los grupos anti-inmigrantes han dado a conocer más sus plataformas por el enfoque negativo que el presidente actual tiene contra los indocumentados.
“Los ataques no son nuevos. No estamos de acuerdo ni a favor de los criminales, pero sí del lado de la gente que trabaja y hace crecer a este país, que aún así no es reconocida”, dice Sanbrano.
Por su parte, FAIR extiende la invitación a los interesados a deportar a cualquier persona que sospechen que es indocumentada, y les navega a una guía sobre cómo hacerlo.
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