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Las escuelas podrán solicitar pronto una exención para su reapertura, pero solo con el apoyo del sindicato

Los artículos de los estudiantes se dejaron como estaban el 13 de marzo en un aula de segundo grado
Los artículos de los estudiantes se dejaron como estaban el 13 de marzo en un aula de segundo grado en la Escuela Primaria Cerritos en Glendale.
(Al Seib / Los Angeles Times)

Los distritos escolares que solicitan las exenciones deben incluir cartas de apoyo de sus sindicatos, por lo que es poco probable que muchas escuelas públicas califiquen.

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Los distritos escolares, las escuelas autónomas y las escuelas privadas del condado de Los Ángeles pueden comenzar a solicitar dentro de unos días exenciones que les permitan reabrir las escuelas primarias con clases presenciales, pero las escuelas públicas deberán demostrar que cuentan con el apoyo de los sindicatos, dijeron el jueves funcionarios de salud pública del condado.

El requisito de mostrar apoyo sindical probablemente otorgará a algunas escuelas autónomas y escuelas privadas, la mayoría de cuyos maestros no están sindicalizados, una ventaja para calificar para una exención, lo que puede exacerbar la división entre los estudiantes acomodados y sus compañeros más desfavorecidos, que solo ha crecido durante la pandemia de COVID-19.

Algunos también dijeron que politizaría innecesariamente el proceso.

“Si L.A. [Departamento de Salud Pública del Condado] quiere usar ciencia y datos para determinar el mérito de una exención, entonces puedo apoyar eso”, dijo el superintendente Alex Cherniss, del Distrito Escolar Unificado de la Península de Palos Verdes, en un comunicado enviado por correo electrónico.

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“Pero requerir una carta de apoyo de las organizaciones matrices y los sindicatos parece estar fuera del alcance de su responsabilidad y se desvía de la ciencia a la política. No solo enfrentaría a los padres, maestros y distritos escolares entre sí, sino que también crearía una presión que es injusta para las escuelas privadas”.

En una respuesta por correo electrónico, el departamento de Salud Pública dijo que “está trabajando en el diseño del proceso de solicitud para cumplir con los requisitos estatales”. No especificó si las escuelas privadas y las escuelas autónomas también tendrían que mostrar algún tipo de apoyo de padres o maestros.

El gobernador Gavin Newsom anunció la semana pasada que las escuelas en los condados que están en la lista de monitoreo del estado (32 condados desde el anuncio) no pueden abrir físicamente para la instrucción en persona hasta que su condado haya salido de la lista durante 14 días consecutivos.

Ahora el debate es sobre cómo y cuándo reabrir las escuelas - padres y maestros están divididos y preocupados.

Jul. 11, 2020

Dijo que la única excepción sería para las escuelas primarias que soliciten exenciones a través de sus oficiales de salud, quienes deben considerar los datos locales y consultar con el Departamento de Salud Pública de California al revisar la solicitud.

Los distritos pueden solicitar una exención para volver a abrir solo para la instrucción en el aula para los estudiantes de jardín de infantes a sexto grado.

La solicitud de exención debe incluir cartas de apoyo de todos los socios laborales, organizaciones de padres y organizaciones comunitarias que brindan servicios educativos para niños en el distrito, dijo el departamento.

Además, los distritos deben completar una “lista de verificación del protocolo de reapertura” que documenta los pasos que se implementarán para garantizar que se sigan las directivas de salud pública, incluido un plan para controlar los brotes, la estrategia de pruebas para los empleados y el requisito de que todas las personas mayores de 2 años usen mascarillas mientras están en los campus escolares.

El departamento de salud pública del condado luego revisaría y proporcionaría a los superintendentes los datos de tendencias para su área, incluyendo la cantidad de casos, la cantidad de muertes y los cambios en las tasas de casos y muertes durante el último mes. También evaluaría la capacidad en los hospitales regionales y, junto con el departamento de salud pública del estado, evaluaría el riesgo y la preparación de cada distrito para reabrir de manera segura para determinar si se debe otorgar la exención.

“Haremos todo lo posible para utilizar los datos disponibles y la ciencia para garantizar que la salud y el bienestar, tanto físico como emocional, de todos los niños, maestros, personal escolar y todas sus familias sigan siendo la máxima prioridad. La directora de salud pública del condado, Barbara Ferrer, dijo en una conferencia de prensa el miércoles durante la cual habló sobre las exenciones.

Joshua Sharfstein, profesor de política de salud en la Universidad Johns Hopkins, dijo que es prudente reabrir las escuelas lentamente.

“California está pasando por esto de una manera muy reflexiva porque están haciendo que esas escuelas pasen por un conjunto adicional de capas, así que espero que puedan aprender de ellas antes de abrir más ampliamente”, dijo.

Comenzar con estudiantes más jóvenes también tiene sentido, dijo.

“Parece que se benefician más de la educación en persona, y parecen tener un riesgo algo menor de transmitir el virus”, dijo Sharfstein. “Tanto el valor como el riesgo apuntan a que los niños más pequeños puedan ir a la escuela”.

Dijo que los funcionarios de salud deben otorgar exenciones basadas en una combinación de las circunstancias locales y las protecciones que se pueden establecer, y luego rastrear lo que sucede.

“Hay muchas cosas que aún no sabemos”, dijo Sharfstein. “Todavía queremos ver cómo va”.

Debra Duardo, superintendente de escuelas del condado de Los Ángeles, dijo que los distritos “están realmente ansiosos” por traer a los estudiantes de regreso si pueden hacerlo de manera segura. Ella dijo que muchos han hablado de querer servir a los estudiantes que han estado más desconectados y que han tenido más desafíos con el aprendizaje a distancia, como aquellos con discapacidades y sin hogar.

Ella dijo que el requisito sobre el sindicato es “definitivamente un desafío”.

“Espero que cuando el Departamento de Salud Pública examine los datos específicos más cercanos a esa escuela, quizás algunos miembros del sindicato se sientan más cómodos”, dijo. “Será un desafío para los distritos si sus maestros sienten que su propia salud está en riesgo”.

Algunos distritos, incluidos los que atienden a familias de bajos ingresos y más adinerados, dijeron que no solicitarían una exención a pesar de tener la opción. Un superintendente cuyo distrito atiende principalmente a familias de bajos ingresos dijo que su asociación de maestros está preocupada por la seguridad de los miembros y el estado actual del condado como un punto crítico de COVID-19.

Raul Maldonado, del Distrito Escolar de Palmdale, dijo que estaba poniendo todos sus esfuerzos en la educación a distancia por el momento, pero podría considerar una exención a medida que la situación mejore.

“Reabrir la escuela no es como abrir un gimnasio o un restaurante”, dijo. “Hay mucha planificación que debe hacerse”.

Melissa Moore, superintendente del Distrito Escolar Unificado de El Segundo, también dijo que cumplir con los criterios para una exención “no es tan simple como llenar un formulario”.

“Con las métricas actuales de COVID-19 en el condado de Los Ángeles, la seguridad de los estudiantes y el personal no deben negociarse antes de seguir adelante con la solicitud de una exención”, dijo.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí.

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