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El condado de Kern se ha convertido en uno de los focos de infección por coronavirus más graves de la nación, con contagios que se propagan rápidamente a través de las plantas de procesamiento de alimentos, las comunidades agrícolas y otros lugares en Bakersfield y los pequeños pueblos rurales cercanos.
Pero la respuesta a la crisis se ha visto obstaculizada por las crecientes batallas entre las autoridades estatales y locales, con los líderes del condado de Kern que se quejan de la existencia de mensajes mixtos y burocracia.
El gobierno del estado ha hecho un mal trabajo aclarando quién debe hacer cumplir las órdenes impuestas por el estado a las empresas y a las reuniones comunitarias, y ha enviado orientaciones confusas - y a veces contradictorias – a las múltiples agencias que deben responder ante la crisis, dijo el director de Servicios de Salud Pública del Condado de Kern, Matt Constantine.
“Pasamos mucho de nuestro tiempo tratando de interpretar las órdenes y buscando aclaraciones”, expuso Constantine.
Brian Ferguson, portavoz de la Oficina de Servicios de Emergencia del Gobernador de California, dijo que el estado se comunica regularmente con el condado de Kern para enfrentar el brote y que “la mejor, más rápida y más directa forma de aplicación [de las normas de salud pública] es siempre a nivel local”.
El condado de Kern es uno de los lugares con más casos de coronavirus de California. Su historia está tejida con la difícil situación de los refugiados de Dust Bowl que vinieron a trabajar en los campos y trajeron sus puntos de vista conservadores y profundamente religiosos con ellos, y es el famoso lugar de nacimiento del llamado sonido de Bakersfield y Merle Haggard.
Las dudas sobre el coronavirus y las órdenes de cierre del estado son frecuentes. Dos médicos de Bakersfield han acaparado la atención nacional como parte de un grupo llamado America’s Frontline Doctors, que realizó un video ampliamente difundido en el que se promociona la hidroxicloroquina como una cura para el COVID-19 y se dice que las mascarillas son ineficaces. Fue retweeteado por el presidente Trump y luego eliminado por Facebook, YouTube y Twitter por contener información errónea.
“Sabemos que hay muchas cosas que están pasando en el estado. Esperamos que pronto llegue un momento en el que podamos coordinar y ayudar a la comunidad a mantenerse a salvo, pero eso no ha ocurrido”.
— Matt Constantine, director de Servicios de Salud Pública del condado de Kern.
En abril, el ayuntamiento de la ciudad de Taft presionó para reabrir los negocios antes de la fecha límite establecida por el estado. El alcalde de la ciudad escribió una carta con cuatro supervisores del condado de Kern y la líder republicana del senado estatal Shannon Grove de Bakersfield, pidiendo a Newsom que autorizara a los funcionarios de salud del condado a determinar cuándo podrían reabrir.
El Sheriff del condado de Kern, Donny Youngblood, dijo a The Times que aunque alienta el uso de las mascarillas y el distanciamiento social, su departamento no hace cumplir las órdenes del estado que restringen los negocios o reuniones o requieren cubrirse la cara en público.
“No vamos a ser la policía de las mascarillas. No vamos a ser la policía de la iglesia. Simplemente no lo haremos”, dijo Youngblood.
Cree que el gobierno del estado probablemente desearía que el condado de Kern no fuera tan conservador.
“Siempre hemos sido un poco raros en el estado de California”, manifestó. “La gente tiene sus propias creencias. Lo que hace grande a nuestro país es que no todos estamos de acuerdo en todo. Si lo hiciéramos, sólo seríamos ovejas”.
El Valle Central rural y agrícola se ha convertido en uno de los lugares más afectados por el coronavirus en Estados Unidos, y el virus se está propagando rápidamente entre los trabajadores esenciales de bajos salarios, principalmente latinos, incluidos los que laboran en la agricultura y la elaboración de alimentos. En el condado de Kern, se han notificado casos de COVID-19 en Primex Farms, una granja de pistachos en Wasco y en los gigantes de la zanahoria de Bakersfield, Bolthouse Farms y Grimmway Farms.
El domingo, el condado de Kern tuvo la segunda tasa de infección per cápita más alta de California, detrás del condado de Merced, con 723 casos por cada 100.000 personas en las últimas dos semanas, según el rastreador de coronavirus del Times. En comparación, el condado de Los Ángeles tuvo 297 casos por cada 100.000 individuos durante el mismo período.
Hasta el domingo, el condado de Kern había confirmado 26.570 casos y 204 muertes.
En las últimas semanas, el gobernador Gavin Newsom se ha dirigido al Valle Central para obtener recursos adicionales para combatir el virus, incluyendo los llamados “equipos de ataque” y la asignación de unos 52 millones de dólares para mejorar los protocolos de pruebas, rastreo y aislamiento.
Pero navegar por las numerosas agencias del estado ha sido un atolladero, dijo Constantine, el director de salud pública.
“Sabemos que hay mucho que hacer con el estado. Esperamos que pronto llegue un momento en el que podamos coordinar y ayudar a la comunidad para mantenerse a salvo, pero eso no ha ocurrido”, dijo.
A principios de julio, Constantine recibió un correo electrónico de la Agencia de Desarrollo Laboral y de la Fuerza de Trabajo de California diciendo que un “equipo encargado de aplicar las leyes estatales” estaría visitando los negocios del condado de Kern para ayudar a mejorar el cumplimiento de las órdenes de salud y para trabajar con el condado para “usar la aplicación de la ley para castigar a los empleadores que se niegan a cumplir con las pautas de reapertura segura”.
El correo electrónico, que fue compartido con The Times, instruye a los funcionarios del condado a contactar con el Departamento de Relaciones Industriales del estado para informar sobre negocios específicos que necesiten ser investigados.
Constantine recibió un correo electrónico separado de la Oficina de Servicios de Emergencia del Gobernador de California con contactos para múltiples agencias, así como una “dirección de correo electrónico centralizada” para solicitar ayuda al tratar con sectores o negocios específicos. Otro correo electrónico sobre la aplicación de la ley en el lugar llegó del departamento de salud del estado.
El departamento de salud del condado de Kern ha recibido cientos de quejas sobre negocios que violan las órdenes de salud, dijo Constantine. Desde el 6 de abril, el condado ha enviado 539 cartas de primera advertencia a los comercios y 120 de segunda. Ha reportado 37 negocios que se rehúsan a cumplir con las órdenes del estado desde julio, reveló.
¿Qué pasó con esas quejas?
“No lo sabemos”, dijo Constantine. “Esa es la coordinación que necesitamos”.
Ferguson, el portavoz de la Oficina del Gobernador de Servicios de Emergencia, dijo a The Times que las preguntas sobre las acciones de aplicación específicas del condado deben ser enviadas a las agencias del equipo de ataque directamente. El departamento de salud pública del estado refirió al Times a Cal OES. La Agencia de Desarrollo Laboral y su Departamento de Relaciones Industriales no respondieron a las preguntas sobre lo que pasó con las quejas del condado de Kern.
Cuando se le preguntó sobre la frustración de los líderes del condado por tener que lidiar con múltiples agencias, Ferguson dijo: “Eso suena más como un asunto de coordinación que como una historia del L.A. Times”.
Ferguson señaló que la mejor manera de hacer cumplir las órdenes de salud es a nivel local por los departamentos de salud y los organismos de aplicación de la ley. El estado, expuso, coordina con las jurisdicciones locales cuando hay una “brecha o falta de recursos” y en el trato con los delincuentes en serie.
Desde principios de julio, cuando se formaron los equipos de aplicación de la ley, el estado ha hecho 991.696 contactos con empresas de toda California a través de visitas en persona, llamadas telefónicas y correos electrónicos, y ha emprendido 1.128 acciones, añadió.
Las autoridades encargadas de hacer cumplir las leyes en el condado de Kern dijeron que están alentando el cumplimiento voluntario y la educación en lugar de imponer las órdenes del estado.
“Definitivamente hay preguntas sobre quién está haciendo cumplir qué. Creo que es algo generalizado, independientemente del condado en el que uno se encuentre”, manifestó el sargento Robert Pair, portavoz del Departamento de Policía de Bakersfield.
Pair dijo que pensaba que el estado había “tomado la delantera en la aplicación de la ley”. Sabía de un caso, al principio de la pandemia, en el que el departamento de salud del condado pidió a la policía de Bakersfield que se ocupara de un gimnasio que se negaba a cerrar.
El sheriff Youngblood dijo que no tenía sentido para él tomar medidas enérgicas contra los negocios y obligar a la gente a utilizar mascarillas, mientras el estado libera a miles de reclusos, incluyendo a delincuentes violentos, para frenar la propagación de COVID-19 en las prisiones.
A mediados de mayo, Youngblood publicó un video en su página de Facebook en el que se veía parado y en diciendo que los agentes a su cargo que patrullaban las calles no parecían estar infectándose.
“Creo que la inmunidad ‘de la manada’ puede ser el secreto de esto”, comentó Youngblood.
Los críticos de las órdenes de permanencia en el hogar han abogado por la llamada ‘inmunidad de la manada’, con la idea de que eventualmente un porcentaje suficiente de la población habrá sobrevivido a COVID-19 y se hará inmune, lo que a su vez protegerá al resto de la población no infectada interrumpiendo la propagación del virus. Pero la inmunidad de la manada llevaría a un fuerte incremento de las tasas de mortalidad, dicen los expertos en salud.
En otro video justo antes de Memorial Day, el sheriff dijo que, aunque los negocios estaban empezando a reabrir, “no significa que el virus haya desaparecido”. La gente todavía necesitaba mantener la distancia social y lavarse las manos “porque no queremos retroceder”.
Jay Tamsi, presidente de la Cámara de Comercio Hispana del Condado de Kern, aseguró que las empresas están haciendo todo lo posible para mantenerse al día con las directrices y reglas de la ciudad, el condado y el estado, pero “es mucho para asimilar”.
Además de las directrices del gobernador, los restaurantes tienen que solicitar permisos por separado a la ciudad y al condado para vender comida en el exterior, incluso cuando la comida en el interior está prohibida, dijo Tamsi. En los últimos días, destacó, varios negocios que pertenecen a la Cámara Hispana fueron advertidos o citados por no tener los permisos adecuados, a pesar de que hicieron cumplir el distanciamiento social, el uso de mascarillas y otros requisitos de seguridad sólo para permanecer abiertos.
Añadió que el requisito del estado de que las barberías, salones de uñas y restaurantes funcionen al aire libre es brutal en el Valle Central, donde las temperaturas alcanzan los 112 grados esta semana.
A finales del mes pasado, la Fundación de Trabajadores Agrícolas de California, con sede en Delano, se coordinó con el condado y el Hospital Buen Samaritano para proporcionar pruebas móviles de COVID-19 a los trabajadores agrícolas en sus lugares de trabajo en los campos.
“Somos esa población vulnerable que necesitaba atención”.
— Hernán Hernández, director de la Fundación de Trabajadores Agrícolas de California
Se está haciendo, en parte, para cortar la confusión de establecer una prueba, que incluye navegar por los sitios web del gobierno en inglés y tener una Internet confiable y una dirección de correo electrónico, dijo Hernán Hernández, director de la Fundación de Trabajadores Agrícolas de California. Para las personas que carecen de estatus legal de inmigración, puede parecer un riesgo demasiado grande dar información personal al estado, expuso.
Hernández y las autoridades del condado dijeron que la propagación en la comunidad, especialmente en las viviendas multifamiliares y en las reuniones familiares, ha sido un gran problema. Después de que la economía se reabriera durante Memorial Day, Hernández comenzó a ver de nuevo quinceañeras, bautizos y cenas familiares en comunidades de trabajadores agrícolas, incluso cuando la gente intentaba ser cuidadosa en el trabajo.
“La cultura latina, opera como un colectivo”, dijo Hernández. “Vemos mucha actividad comunitaria. Nos encanta celebrar con bandas de música, llegó al punto en que la gente ponía bandas en la sala, para pasar desapercibidos, pero bastaba mirar los estacionamientos para ver que estaba lleno de invitados”.
Hernández dijo que si bien “por fin estamos viendo esa coordinación” con las autoridades locales y estatales y las organizaciones comunitarias, el estado debería haberse concentrado en el Valle Central mucho antes debido a su demografía y a los niveles de pobreza.
“Podrían haberlo visto venir”, señaló Hernández. “Sabíamos que este valle iba a ser un punto crítico. Necesitamos muchos recursos y educación. Somos esa población vulnerable que necesitaba atención”.
Los escritores del Times Sean Greene, Rong-Gong Lin II e Iris Lee contribuyeron a este informe.
Para leer esta nota en inglés haga clic aquí
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