El sitio de vacunación masiva COVID-19 del Dodger Stadium fue cerrado el sábado por la tarde, cuando unos 50 manifestantes se reunieron en la entrada, paralizando a cientos de automovilistas que habían estado esperando en fila durante horas.
El Departamento de Bomberos de Los Ángeles cerró la entrada al estadio, uno de los sitios de vacunación más grandes del país, durante aproximadamente una hora y desde poco antes de las 2 p.m. como precaución, señalaron las autoridades.
Los manifestantes incluían miembros de grupos antivacunas y de extrema derecha. Si bien algunos portaban carteles que desacreditaban al antígeno contra COVID-19 y gritaban a las personas que no se inyectaran, no hubo incidentes de violencia.
El número de muertes entre los residentes latinos del condado de Los Ángeles casi triplica el de los residentes blancos, según los datos.
“Esto está totalmente mal”, comentó Germán Jaquez, quien condujo desde su casa en La Verne y había estado esperando por una hora para vacunarse, cuando se cerraron las puertas del estadio. Dijo que algunos de los manifestantes le decían a la gente en la fila que el coronavirus no es real y que vacunarse es peligroso.
“Ese es un mensaje equivocado”, manifestó Jaquez. “He estado esperando durante semanas para conseguir una cita. Soy dentista; corro un gran riesgo al estar rodeado de pacientes. Quiero mantenerme seguro para ellos y mi familia. La vacuna es la única forma de vencer al virus”.
Un funcionario del Departamento de Bomberos informó que el sitio reanudó operaciones unos minutos antes de las 3 p.m. Normalmente se encuentra abierto de 8 a.m. a 8 p.m.
Una publicación en las redes sociales describió la manifestación como la “PROTESTA/MARCHA CONTRA ESTAFAS PANDÉMICAS”. Aconsejó a los participantes que “por favor absténgase de usar el atuendo de Trump / MAGA ya que queremos que nuestro mensaje resuene con los borregos. No lleven banderas, solo carteles informativos”.
“Esta es una protesta de intercambio de información y una marcha contra todo lo relacionado con COVID-19: Vacunas, pruebas de diagnóstico del coronavirus, cierres, cubrebocas, Fauci, Gates, Newsom, China, seguimiento digital, etc.”
Un video transmitido en vivo de la reunión muestra a un grupo de manifestantes caminando en una banqueta, mientras los autos se trasladan por carriles bordeados de conos hacia el estadio, lugar que sirvió como un sitio de pruebas de coronavirus durante meses.
Los pasajeros deberán seguir la nueva orden en el abordaje, desembarco y por la duración del viaje en aviones, autobuses, trenes, metros, barcos y vehículos compartidos
Varios de los manifestantes portaban carteles que decían “Salva tu alma DA VUELTA AHORA”, “CNN TE MIENTE”, “DESTITUCIÓN DE GAVIN NEWSOM” y “QUÍTATE EL CUBREBOCAS”, y otros repartieron folletos a los automovilistas que tenían sus ventanas abajo.
Algunos autos tocaron su claxón mientras pasaban y los manifestantes hablaron a través de megáfonos.
“Regrese mientras pueda”, dijo un hombre. “Es una rata de laboratorio”.
Los funcionarios públicos rápidamente expresaron sus frustraciones.
El vicealcalde Jeff Gorell, quien supervisa la seguridad pública de Garcetti, tuiteó un artículo del Times sobre el cierre, escribió “Está abierto de nuevo, pero...” y agregó un emoji con la palma de la mano en la cara.
El incidente del estadio de los Dodgers marca la última de varias protestas de pequeños grupos que se oponen a las medidas básicas de seguridad del coronavirus, como el uso de cubrebocas.
Luego de las manifestaciones locales de grupos anti-cubrebocas en centros comerciales, supermercados y campamentos para personas en condición de calle, el Ayuntamiento de Los Ángeles a principios de este mes reforzó las restricciones y sometió a algunos infractores a sanciones financieras.
El Ayuntamiento votó por unanimidad y ordenó a los abogados de la ciudad que redactaran una ley que impusiera multas y sanciones a quienes se nieguen a usar un cubrebocas en los negocios bajo techo cuando la gerencia lo solicite, así como a las personas que no quieran utilizar esta protección cuando “invadan el espacio personal de alguien”.
Al principio de la pandemia, los manifestantes sin cubrebocas se reunieron en varias tiendas, incluido el mercado Erewhon en el distrito de Fairfax, un Target en Beverly Boulevard y el Westfield Century City Mall, lo que provocó una reacción violenta de compradores y empleados que se sintieron acosados.
En un video, un hombre comentó que había dado negativo en la prueba del virus y llamó a un cliente en la tienda de comestibles un “nazi de los cubrebocas”.
Después de la manifestación de Century City, el alcalde Eric Garcetti emitió una advertencia a los manifestantes.
“No tendremos oficiales que estén simplemente presenciando eso. Actuaremos”, manifestó. “Y no nos ponga a prueba en esto, porque se encontrará en la cárcel, citado o enfrentando un proceso judicial”.
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