Manifestantes piden un trato humano para los solicitantes de asilo
Un centenar de activistas, muchos de ellos vestidos de negro, marcharon por el centro de San Diego exigiendo al gobierno federal la “abolición del ICE” y la mejora drástica de las condiciones de los niños que buscan asilo en Estados Unidos.
“¿Qué es indignante?”, gritó una mujer a través de un megáfono. “Niños en jaulas”, respondieron al unísono los manifestantes, uno de los cuales portaba una gran bandera mexicana y otros agitaban carteles en los que se podía leer: “ Basta de separar familias”, “Jesús es un inmigrante de piel morena” y “Descoloniza tu mente”.
El gobierno del presidente Joe Biden tomó medidas el viernes para trasladar a más niños inmigrantes de las tiendas y celdas de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos a instalaciones de retención a largo plazo supervisadas por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.
El gobierno de Trump fue ampliamente criticado por empacar familias y niños en instalaciones de detención de la Patrulla Fronteriza a corto plazo, a menudo con comida y agua limitadas.
Eso fue un frío consuelo para los activistas que se reunieron el sábado.
“Todo eso es una transferencia de responsabilidad”, dijo una activista de 29 años, que se identificó como Flo. “ Solo les cambian el nombre y los reabren. Me gustaría que las familias se reunieran mientras buscan asilo. Me gustaría que no hubiera más cuerpos negros y de color asesinados en estas instalaciones”.
Los agentes fronterizos informaron recientemente de la detención de hasta 400 menores no acompañados al día. El gobierno de Biden ha puesto fin a la política de la era Trump de devolver inmediatamente a los jóvenes no acompañados que intentan cruzar a Estados Unidos, aunque a muchas familias y adultos se les sigue negando la entrada.
Funcionarios del Servicio de Inmigración y Aduanas dijeron en una presentación judicial el viernes que la agencia, conocida como ICE, ya no retendrá a las familias durante más de 72 horas.
La declaración sugiere que la agencia está terminando efectivamente una política de detención de familias que comenzó bajo la administración de Obama en 2014 y que la administración de Trump trató de ampliar.
“Esto va más allá de la política”, dijo un activista que se identificó como Isaac y que trabaja con la organización sin ánimo de lucro Simply of Service. “Esto está más allá de la izquierda. Esto va más allá de la derecha. Hemos traumatizado a estos niños en suelo estadounidense. Ahora tenemos el deber de rehabilitarlos”.
La marcha pareció tensa en algunos momentos, con un enfrentamiento entre los manifestantes y las fuerzas del orden que amenazaba con desbordarse en algunos momentos. Los manifestantes lanzaron repetidamente blasfemias a la policía mientras los agentes escoltaban a los manifestantes por el centro de la ciudad.
La manifestación, que comenzó en Waterfront Park, se detuvo brevemente en la oficina del ICE en Front Street antes de dar la vuelta.
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