Asesinan a un padre frente a su hijo mientras trabajaba en Taco Bell en el sur de Los Ángeles
El hombre, de 41 años y padre de tres hijos, estaba laborando un turno extra cuando un cliente disparó a través de la ventanilla del autoservicio y lo mató, informó la policía.
Alejandro García tenía dos empleos para mantener a su familia, ambos en los restaurantes Taco Bell de Los Ángeles.
El sábado por la noche, García, de 41 años, trabajaba un turno extra en el restaurante de Avalon Boulevard, en el sur de Los Ángeles, junto a su hijo de 19 años, Carlos, que estaba atendiendo el servicio al auto.
Cuando un cliente que se había acercado a la ventanilla de autoservicio poco antes de las 11 de la noche intentó pagar con un billete falso, el adolescente se negó a aceptarlo, dijo Karina García De Meza, prima de García.
La interacción terminó en un tiroteo que dejó al padre de tres niños asesinado, abatido frente a su hijo mayor, informaron las autoridades del Departamento de Policía de Los Ángeles.
En cuanto los paramédicos llegaron a la cuadra 9900 de Avalon Boulevard, cerca de Century Boulevard, García fue declarado muerto, dijo el oficial de LAPD Drake Madison.
“Es horrible, y es una locura”, declaró De Meza. “Estaba trabajando y lo matan”.
De Meza dijo que su primo nació en Cuernavaca, México, y llegó a Estados Unidos hace casi 20 años. Era un gran empleado, un buen padre, hijo y un devoto testigo de Jehová, añadió.
Los parientes han iniciado una cuenta de GoFundMe para la familia de García -incluyendo a sus otros dos hijos, uno de 16 años y una de 3 años- mientras hacen los arreglos para el funeral.
La Fifth Church of Christ, Scientist en Los Ángeles sufrió “dificultades financieras ruinosas” debido al robo de su presidente de la junta, dicen los fiscales.
“Son buenas personas. No son pandilleros”, subrayó De Meza sobre su primo y su familia. “Era un hombre extrovertido y bromista. Si te veía caminando por la calle con las bolsas del mandado, se ofrecía a ayudar. Era el tipo de persona que auxiliaba a alguien a empujar su auto si se lo encontraba por la calle”.
En un comunicado, un portavoz de Taco Bell dijo que la compañía estaba “conmocionada y triste” por las noticias del fatal tiroteo.
“Nuestras más profundas condolencias para la familia y amigos en este momento. Entendemos que el propietario y operador de este local está trabajando con las autoridades locales en su investigación y se ha puesto en contacto directamente con los parientes afectados para ofrecerles su apoyo”, dijeron funcionarios de la empresa.
La policía tiene pocas pistas, y solo ha dicho que el asesinato fue cometido por un hombre en un sedán negro que huyó del lugar tras el tiroteo, que no parece estar relacionado con las pandillas.
El domingo, el jefe de la policía de Los Ángeles, Michel Moore, calificó el asesinato de “sinsentido” y pidió la ayuda del público para identificar al autor de los disparos.
“Hay quienes saben quién hizo esto”, dijo Moore en un tuit. “La humanidad exige que den un paso adelante y digan lo que saben”.
City News Service contribuyó a este informe.
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