Columna: ¿Cómo es que Cam Akers ya está jugando? Los factores que aceleraron su recuperación
El regreso del corredor de los Rams, Cam Akers, tras un desgarro en el tendón de Aquiles hizo añicos el tiempo de rehabilitación percibido, y el Dr. Neal ElAttrache sabe por qué.
El Hail Mary fue atrapado en la zona de anotación. El gancho y la escalera resultaron en un touchdown.
Cam Akers está de vuelta.
En lugar del promedio de entre nueve meses y un año de convalecencia, Akers regresó de un desgarre en el tendón de Aquiles derecho en menos de seis meses, a tiempo para la apertura de la postemporada de los Rams el lunes contra los Cardinals de Arizona en el SoFi Stadium.
El mismo cirujano de Los Ángeles que prolongó la carrera de Tom Brady podría haber salvado la temporada de los Rams. Neal ElAttrache, de la Clínica Ortopédica Kerlan-Jobe, mejoró un procedimiento que utilizó en su momento para reparar el tendón de Kobe Bryant, para asegurar el espectacular regreso del corredor de pases.
Por muy milagroso que parezca, ElAttrache insistió en que no hay nada sobrenatural en el regreso de Akers.
“No quiero parecer un científico loco”, dijo ElAttrache riendo satisfecho.
Más bien, señaló ElAttrache, la recuperación de Akers fue el producto de una confluencia de factores: la evolución de la cirugía, los avances en la rehabilitación y la determinación del paciente.
“Cuando se habla de esas tres cosas juntas, se obtiene un resultado especial”, mencionó Reggie Scott, vicepresidente de medicina deportiva de los Rams.
Tras lesionarse a mediados de julio, antes del inicio del campo de entrenamiento, Akers recibió el visto bueno para prepararse el 23 de diciembre. Jugó el domingo en la final de la temporada regular de los Rams como última puesta a punto para los playoffs, tocando el balón ocho veces.
La rapidez con la que regresó, según ElAttrache y Scott, podría estar directamente relacionada con la urgencia con la que se sometió a la cirugía y la prisa con la que comenzó a rehabilitarse después de la operación.
“Por cada día que disminuye la estimulación del músculo, se necesitan dos días para volver a estar como antes”, dijo ElAttrache.
En otras palabras, disminuir el tiempo de inactividad al principio del proceso de recuperación también reduce el tiempo necesario para recuperar la fuerza al final.
Akers se lesionó mientras se ejercitaba en Thousand Oaks, cerca de las instalaciones de entrenamiento de los Rams, según Scott. La relativa proximidad a ElAttrache fue importante. También lo fue la decisión del atleta.
“En menos de 24 horas, viene y me mira y dice: ‘Oye, Reg, hagámoslo ‘“, dijo Scott.
Akers tenía menos de una semana de haberse desgarrado el tendón de Aquiles cuando ElAttrache lo operó, mencionó Scott.
El proceso también se aceleró gracias a la experiencia quirúrgica de ElAttrache.
Cuando reparó el tendón de Aquiles de Bryant en abril de 2013, ElAttrache incorporó una técnica que aprendió del cirujano escocés Gordon Mackay, quien añadió una sutura adicional diseñada para absorber la tensión.
“Así toda la tensión no está en la línea de reparación”, dijo ElAttrache, quien también utilizó una técnica de “bucle” al coser el tendón, con el patrón también diseñado para absorber la tensión.
Bryant volvió a jugar menos de ocho meses después de su operación, que en su momento se consideró rápida.
Desde entonces, ElAttrache ha aumentado el uso de una sutura trenzada que es más plana, más ancha y proporciona mayor seguridad. La comunidad médica también tiene una mejor idea de cómo responde el cuerpo a estas técnicas y dispositivos quirúrgicos, lo que permite a los entrenadores y fisioterapeutas trazar mejor el proceso de recuperación.
Dos días después de que ElAttrache le operara, Akers pudo empezar la fisioterapia bajo la supervisión del director de rehabilitación de los Rams, Byron Cunningham.
“Empezamos a trabajar por encima de la articulación”, dijo Scott. “Comenzamos a ocuparnos de su cuádriceps, a tratar su isquiotibial. Utilizamos un montón de diferentes estimulaciones neuromusculares”.
El equipo de Scott también utilizó la terapia de restricción del flujo sanguíneo, desarrollada para tratar a los veteranos heridos.
Pronto se introdujo en el programa de Akers una cinta de correr antigravitatoria. Un mes después de la operación, ya caminaba con una bota. Entre las 10 y las 12 semanas, ya hacía footing. A las 12 o 14 semanas, ya corría.
El corredor de los Rams, que no ha hablado con los periodistas desde que se lesionó, tenía una mentalidad muy positiva.
“La rehabilitación es dura”, dijo Scott. “Es un enfoque de un día a la vez, de un paso”.
El progreso de Akers fue guiado por las métricas proporcionadas por el director de ciencia deportiva Tyler Williams, quien, por ejemplo, utilizó placas para probar la fuerza con la que el jugador podía desacelerar y empujar con cada pierna. (En el momento en que regresó, la pierna derecha de Akers, reparada quirúrgicamente, podía generar más fuerza que la izquierda, según ElAttrache).
Joey Blake supervisó la alimentación de Akers.
Cuando Akers fue retirado de la lista de lesionados el 23 de diciembre, la principal preocupación del personal médico fue reconstruir su psique.
ElAttrache dijo que sabía que Akers estaba listo cuando recibió una llamada de Scott antes del juego de la Semana 17 de los Rams en Baltimore.
“¿Adivina quién no está feliz de no jugar?”, preguntó Scott.
“Eso es música para mis oídos”, le dijo ElAttrache.
En su regreso, el impacto de Akers en la derrota de los Rams por 27-24 en tiempo extra ante los 49ers de San Francisco el domingo fue modesto. Corrió cinco veces para tres yardas y atrapó tres pases para otras tres.
Lo que conmovió a Scott fue la forma en que los jugadores de ambos equipos felicitaron a Akers por su regreso.
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