Horas antes de que “Hamilton” se estrenara en el Teatro Pantages el año pasado, las representaciones del exitoso musical de Broadway se cancelaron cuando las órdenes para evitar la propagación del coronavirus desencadenaron una cascada de males para el barrio de Hollywood.
Un restaurante cercano al Pantages, conocido por su abundante comida americana, estaba repleto de sus característicos soufflés y de otros productos para la cena que los cocineros tenían preparados para servir a las multitudes de fans de “Hamilton”. De repente, se ordenó el cierre de teatros, restaurantes y otros negocios.
Mucha comida estaba a punto de estropearse, dijo Richard Falzone, propietario de Off Vine, un restaurante de 31 años de antigüedad situado en una histórica casa de estilo Craftsman cerca de Sunset y Vine.
“Le dije al personal que se llevara todo lo que pudiera”, dijo. Falzone recuerda bien la fecha, “El 16 de marzo de 2020. Lo tendré en mi mente para siempre”.
Más de un año después, Falzone se enfrenta a otros retos mientras los clientes regresan y espera que “Hamilton” se estrene finalmente el mes que viene. Le falta personal porque solo han vuelto tres de los 12 meseros que despidió durante el período de inactividad. También es difícil encontrar cocineros y lavaplatos.
“Necesito contratar a ocho personas, y si no lo hago voy a perder mucho dinero porque no voy a poder llenar mi restaurante con un solo mesero”, expuso. “Esa es la pesadilla que tenemos en esta industria”.
El auge, la caída y la esperanza de otro auge cuentan la historia de Hollywood en la actualidad, mientras el barrio se esfuerza por recuperarse de la pandemia y sus consecuencias económicas.
Alrededor del 70% de los negocios a pie de calle de Hollywood sufrieron de vandalismo y robo cuando se llevaron a cabo las protestas por la justicia racial del verano pasado, dijo Kris Larson, presidente del distrito de mejora comercial Hollywood Partnership.
Algunas tiendas permanecen tapiadas porque han quebrado o aún no han vuelto a abrir tras el cierre por la pandemia. Larsen calcula que el 10% han desaparecido definitivamente, pero la cifra podría aumentar cuando se levanten las restricciones gubernamentales a los desahucios por impago del alquiler.
Entre las bajas más destacadas de la era COVID se encuentran el restaurante Paley de Columbia Square, en Sunset Boulevard, y ArcLight Hollywood, el complejo cinematográfico que incluía la emblemática sala Cinerama Dome.
Muchos otros han resistido, según Larson. “De forma un tanto milagrosa, numerosas tiendas familiares han sobrevivido”.
Las tiendas más grandes y los restaurantes con mayores recursos financieros han resistido mejor la recesión económica. Katsuya, un restaurante de sushi en Hollywood y Vine conocido por atraer a las celebridades, está programado para abrir en el otoño después de estar cerrado desde marzo de 2020. La semana pasada se retiraron las tablas que cubrían sus ventanas.
Katsuya abrió en Hollywood en 2007 y atendía a 8.000 clientes al mes antes del cierre, dijo Jerry Garbus, director sénior de operaciones de su empresa matriz SBE, una compañía internacional de hostelería.
Estar en Hollywood es importante en parte por lo que representa para la gente de fuera de la región, dijo.
“La energía dinámica y el glamour de Hollywood se han convertido realmente en sinónimos de Los Ángeles en su conjunto, y de las percepciones que la gente tiene sobre la ciudad, y de las emociones que se evocan cuando las personas piensan en Los Ángeles”.
Aunque Hollywood es conocido por su turismo y su vida nocturna, también es uno de los mercados de oficinas más importantes de la región, con unos 5.9 millones de pies cuadrados en alquiler, según la agencia inmobiliaria CBRE. La ausencia de trabajadores que trasladaron sus puestos de trabajo a casa durante la pandemia ha sido un obstáculo para la recuperación, dijo Larson.
“Tenemos que recuperarlos”, manifestó. “Y eso es válido para todas las ciudades del país”.
Cuándo (si es que lo hacen) volverán los trabajadores a la oficina, es una cuestión de incertidumbre para muchos empleados y sus empresas. Algunas compañías han comenzado a facilitar el regreso, mientras que otras están ofreciendo políticas flexibles de trabajo en casa que se espera que evolucionen en los próximos meses a medida que la gente se adapte a un nuevo estilo de empleo post-pandemia.
El mayor inquilino de oficinas de Hollywood es Netflix, que se espera que haga regresar a sus empleados después del Día del Trabajo. La festividad de fin de verano es un marcador para que muchas compañías vuelvan a la oficina, aunque algunas otras empresas de entretenimiento como ViacomCBS y Walt Disney Co. han dicho que podrían empezar a volver después del 4 de julio.
Desde las sillas del director hasta las suites ejecutivas y los asientos de las salas de cine, ningún elemento de Hollywood quedará intacto a medida que las películas de la sociedad avancen desde la pandemia. Le preguntamos a la gente de toda la industria cómo sería el futuro.
Uno de los arrendadores de Netflix es Kilroy Realty Corp., que tiene tres complejos de oficinas en Hollywood, incluido el centro de oficinas, apartamentos y tiendas On Vine, de 450 millones de dólares, recientemente terminado al sur de los antiguos cines ArcLight y Cinerama Dome.
Netflix ha alquilado todo el espacio de oficinas de On Vine y está preparando sus nuevas instalaciones para ocuparlas. El gigante del streaming es un emblema de la unión de la tecnología y el entretenimiento, que ha sido especialmente bueno para barrios como Hollywood, Culver City y Burbank, que durante mucho tiempo han albergado negocios de espectáculos, dijo Rob Paratte, jefe de arrendamiento y desarrollo de Kilroy.
“Hemos sido, y somos, muy optimistas con respecto a Hollywood”, manifestó. “Se va a seguir viendo un cambio dramático”.
Kilroy está buscando otros emplazamientos en la zona para construir, dijo, porque la gente del espectáculo a menudo necesita trabajar una al lado de la otra.
“Es muy difícil hacer una película desde casa”, subrayó.
Al mismo tiempo, las proclamas optimistas de los promotores de Hollywood chocan con la crisis humanitaria que asola a Los Ángeles, donde miles de personas se encuentran viviendo en las calles de la ciudad.
Hollywood hizo su propio recuento de personas sin hogar después de que se cancelara el recuento oficial de todo el condado este año, y los voluntarios organizados por la coalición Hollywood 4WRD contabilizaron 1.513 individuos sin techo en Hollywood y East Hollywood, en comparación con las 1.714 del recuento oficial de desamparados de la Autoridad de Servicios para Personas sin Hogar de Los Ángeles en 2020, lo cual representó un descenso del 12%.
Pero la vida se ha vuelto aún más difícil para las personas sin vivienda, determinó la coalición de empresas, iglesias y grupos sin ánimo de lucro. Con los negocios y las bibliotecas cerrados, la gente tiene menos acceso a la comida, a los baños y a los lugares para lavarse.
El propietario de Off Vine, Falzone, comentó que la gente que vive en las calles “desafía la forma en que entendemos el sistema de valores de nuestra ciudad. Se supone que somos mejores que esto. No deberíamos permitir que las personas mueran en nuestras aceras y se consuman en este entorno”.
La comunidad empresarial está entre los que se centran en mejorar la crisis de las personas sin techo, dijo Larson. El año pasado, Hollywood Partnership amplió sus esfuerzos con la creación de un equipo de divulgación en la calle, capacitado para entablar relaciones con los desamparados y ayudarles a obtener servicios y asistencia.
“La falta de vivienda es, con mucho, el problema número 1 que afecta a Hollywood”, manifestó. “No pasa un día sin que el tema aparezca en nuestra agenda de trabajo” en el distrito de mejora empresarial. “Ocupa el primer puesto en nuestra mente y en la línea de visión de todos”.
El regreso de los oficinistas es una preocupación relacionada, dijo. “Hay personas que cuentan con opciones que no van a querer caminar por las calles de Los Ángeles y tener que sortear ese tipo de condiciones. La gente está tomando decisiones” sobre dónde quiere trabajar.
Más del 23% del espacio de oficinas de Hollywood está sin alquilar, según CBRE, lo cual es una cifra elevada para la región.
Las dudas sobre si los trabajadores de cuello blanco volverán, hacen que la vitalidad del mercado de oficinas sea “la mayor interrogante” que afecta a la reactivación de Hollywood, dijo Larson.
Los estrenos de películas repletos de estrellas han regresado a los teatros El Capitán y TCL Chinese, y los visitantes vuelven a reservar habitaciones de hotel. Los hoteles Thompson Hollywood y Godfrey Hotel Hollywood, de reciente construcción, aceptan reservaciones para el próximo mes.
Los productores de cine le dirán que no hay un día típico en el trabajo y que no hay un camino único para convertirse en productor. Pero hay rasgos que puede desarrollar y caminos a seguir en la industria del entretenimiento que lo prepararán para una carrera en Hollywood.
Atracciones como el Museo de Cera de Hollywood, Madame Tussauds Hollywood y Ripley’s Believe It or Not están en funcionamiento. Se está llevando a cabo una remodelación de 100 millones de dólares del centro comercial Hollywood & Highland.
Los retos a los que se enfrentan los restaurantes y las tiendas se centran más en encontrar suficientes trabajadores que en la regulación gubernamental o la falta de confianza de los consumidores, como ocurrió durante la pandemia, dijo Larson.
Entre los clientes hay mucha gente que está visitando Hollywood al salir del cierre, según sugiere la investigación de Hollywood Partnership.
La actividad de los peatones en Hollywood Boulevard ha vuelto al 80% de lo que era antes de la pandemia, y alrededor del 60% de las personas que pasean por el Paseo de la Fama proceden de más de 250 millas de distancia, según los datos de los teléfonos móviles rastreados por el distrito de mejora empresarial que revelan los códigos postales de los propietarios.
“Estamos viendo que el turismo está repuntando más rápido de lo previsto”, dijo Larson. “En general, la gente de Hollywood se está preparando para un gran verano”.
El empresario Thaddeus Smith, que está renovando el emblemático Earl Carroll Theatre de Sunset Boulevard para su reapertura en enero, mira hacia el futuro. El local de espectáculos de estilo Streamline Moderne, inaugurado en 1938, fue uno de los clubes más bulliciosos de Hollywood y, más recientemente, fue conocido como escenario de los estudios Nickelodeon.
La actualización, que podría costar hasta 4 millones de dólares, convertirá el Earl Carroll en un lugar de conciertos y eventos para hasta 1.800 personas, expuso Smith, con nuevos bares y restaurantes.
El éxito depende de que se recupere su glamour histórico, subrayó, una idea que desearía que otros negocios locales adoptaran.
“Esto no es el condado de Orange. Esto es Hollywood”, manifestó Smith. “Más vale que estés preparado para convertirlo en Hollywood. Los Ángeles lo necesita”.
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