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Dron de gran tamaño aterriza sobre cárcel de máxima seguridad y se activa protocolo de emergencia

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El aterrizaje de un dron de gran tamaño el martes en el techo de una cárcel de máxima seguridad de Ecuador movilizó a las autoridades a activar protocolos de emergencia y neutralizar el aparato ante la sospecha de que transportara explosivos.

El ministro del Interior ecuatoriano, Juan Zapata, dijo que la policía actuó en el Centro de Privación de la Libertad denominada La Roca, donde apareció el dron, y señaló que “existiría un artefacto explosivo, que pretendía ser ingresado al lugar”.

Ese centro penitenciario es de máxima seguridad y está ubicado en un complejo de cárceles de Guayaquil, que ha protagonizado violentos enfrentamientos de presos con numerosas víctimas en los últimos tres años.

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Allí estuvo detenido por menos de un mes Adolfo Macías, Alias Fito, considerado el líder de una de las pandillas más peligrosas del país, Los Choneros, pero por decisión de un juez provincial regresó a otra de las prisiones del conjunto.

El ministro Zapata indicó que se trasladó a las presas de la cárcel de mujeres cercana a La Roca antes de hacer explotar el dron para neutralizarlo. También señaló que se verifica el explosivo y se incautaron varios indicios, pero no los detalló.

En un vídeo publicado por el propio ministro en X, se ve el momento en que se hace la explosión controlada del dron que deja el techo de la prisión destrozado.

En pabellones cercanos del mismo complejo, se observó a reclusos con lo que parecían teléfonos o aparatos de comunicación en las manos mirando al sector donde está el dron, que tendría una capacidad de transporte de alrededor de 100 kilos.

Agentes de grupos especiales de la policía acudieron al lugar, a donde también llegaron efectivos del cuerpo de bomberos. El Servicio de Atención a Personas Privadas de la Libertad no se pronunció de inmediato sobre la situación.

Junto a La Roca se encuentra la denominada Penitenciaría del Litoral, la más peligrosa del país y escenario de violentas matanzas en los últimos años, la cárcel de mujeres, y la cárcel Regional, todas bajo la influencia de grupos criminales.

La masacre entre reclusos más sangrienta se produjo en septiembre de 2021, cuando 119 presos fueron asesinados. Desde entonces ha habido reiterados enfrentamientos en diversas cárceles del país, que han dejado más de 420 muertos.

El sistema carcelario ecuatoriano, que está bajo estado de excepción por dos meses desde el 25 de julio como un intento del gobierno para recuperar el control, se encuentra en permanente alerta debido a la conflictividad desatada entre grupos delictivos. Las autoridades lo atribuyen a bandas de narcotráfico nacional e internacional, que se disputan el control de las rutas de transporte de alcaloides y de territorios de distribución de drogas.

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