Elon Musk abandonó los planes de un túnel de 4 millas en el aeropuerto de Ontario

(Allen J. Schaben / Los Angeles Times)

Hace cinco años, el magnate de la tecnología Elon Musk planteó una forma de reducir el tráfico en horas pico en el sur de California: Construir túneles de alta velocidad.

Entre esos planes, la empresa de ingeniería civil de Musk, Boring Co, presentó en 2019 una propuesta a la Autoridad de Transporte del Condado de San Bernardino para construir un túnel que llevaría a los pasajeros desde la estación de Metrolink de Rancho Cucamonga hasta el Aeropuerto Internacional de Ontario en pocos minutos.

El camino subterráneo propuesto iría en una sola dirección y costaría menos de 100 millones de dólares, una cifra muy por debajo de los más de 1.000 millones de dólares que costaría un sistema de conexión en la superficie, según el portavoz de la agencia de transporte del condado, Tim Watkins.

Esto despertó el interés del grupo, y su junta directiva respaldó la idea, votando en 2020 a favor del proyecto.

Desde entonces, Musk y su compañía se han retirado del proyecto, dijo Watkins - pero eso no ha detenido a la autoridad de transporte.

“Este sigue siendo un proyecto viable, y estamos avanzando”, dijo Watkins la semana pasada.

El plan, que ahora cuenta con dos túneles que se extienden 4,2 millas para viajar en ambas direcciones, se estima que costará aproximadamente 492 millones de dólares y se espera que lleve a los pasajeros a su destino en menos de 10 minutos, dijo Watkins.

Se construirán tres estaciones en superficie: una en la estación de tren de Rancho Cucamonga y dos en las terminales 2 y 4 del aeropuerto de Ontario. La Autoridad de Transporte del Condado de San Bernardino tiene previsto sufragar casi la mitad del coste y está tratando de cubrir las lagunas de financiación mediante subvenciones y fondos estatales y federales. El servicio podría comenzar a funcionar en 2027, según las autoridades.

La agencia decidió emprender un “proceso más tradicional para la autorización ambiental” del túnel, haciendo que un tercero evaluara los posibles impactos del proyecto y pidiendo a Boring Co. que presentara otra propuesta para finales de enero de 2022, dijo Watkins. Pero ese plazo llegó y la compañía de Musk no respondió.

No es la primera vez que Musk se echa atrás en un proyecto de túnel. En 2018, anunció planes para construir dos túneles en Los Ángeles: uno que pasaría por debajo de Sepúlveda Boulevard en el Westside y otro entre una estación de metro en Vermont Avenue y el estadio de los Dodgers. Después de que dos grupos demandaran la propuesta de la ciudad por eximir al túnel de Sepúlveda Boulevard de una revisión medioambiental, Musk dijo que su empresa ya no seguiría adelante con el proyecto. El túnel del Estadio de los Dodgers también fue retirado silenciosamente del sitio web de Boring Co.

La compañía de Musk dio a conocer su primer túnel de alta velocidad en 2018, una ruta de 1,14 millas debajo de Hawthorne que tardó unos 18 meses y 10 millones de dólares en construirse. En 2019, Boring Co. también firmó un contrato de 48,7 millones de dólares para construir una central de tránsito subterráneo para el Centro de Convenciones de Las Vegas.

Watkins se negó a comentar la decisión de la firma sobre el túnel de Ontario y remitió otras preguntas a Musk y a Boring Co. Ninguno de los dos respondió a las repetidas solicitudes de comentarios.

Pero dijo que el condado aplaude el “pensamiento innovador” de Boring Co. para plantear soluciones nuevas e innovadoras a los desafíos existentes”, dijo Watkins. “Podemos ver que hay una necesidad real para una conexión subterránea. Este es el aeropuerto de más rápido crecimiento del país, y no sólo [un túnel] responde a la necesidad de opciones de tránsito para un aeropuerto en crecimiento, sino que queremos adelantarnos a los impactos del tráfico para las comunidades que rodean el aeropuerto”.

El director general del Aeropuerto Internacional de Ontario, Atif Elkadi, dijo que el túnel es una solución creativa para mejorar las conexiones de transporte con el aeropuerto.

Pero el proyecto aún tiene un largo camino que recorrer. La agencia tiene que conseguir al menos 265 millones de dólares del estado y 25 millones de dólares de financiación federal. Un túnel es también una hazaña sin precedentes en una zona infame por la congestión del tráfico. El diseño y la construcción del proyecto podrían llevar hasta tres años antes de que esté listo.

En abril, la Autoridad de Transporte del Condado de San Bernardino comenzó a obtener la autorización ambiental y a redactar un documento formal para el túnel del aeropuerto de Ontario, un proceso que suele durar unos 18 meses. La agencia también está llevando a cabo actividades de divulgación en el sector y cortejando a nuevas empresas para que colaboren en la financiación, así como en el diseño y la construcción. Las empresas externas deberán presentar sus propias propuestas para su aprobación.

El aeropuerto de Ontario es uno de los de mayor crecimiento del país. El número total de pasajeros aumentó casi un 7% entre abril de 2019 y abril de 2022, superando los niveles anteriores a la pandemia, según la agencia de transporte del condado.

“En el lado positivo para la SBCTA, Boring Co. ha actuado como un disruptor tal en el mercado que otras empresas están dando un paso adelante con ideas innovadoras y precios reducidos, y están interesadas en estos proyectos en los que tal vez no estaban interesados antes”, dijo la supervisora del condado de San Bernardino, Janice Rutherford. “Estamos entusiasmados por ver cuál sería una buena solución para nuestros residentes que quieren llegar al aeropuerto”.

La agencia también se ha puesto en contacto con el público para conocer su opinión sobre el proyecto y evaluar las posibles preocupaciones, como la frecuencia con la que funcionará el servicio, el cumplimiento de la Ley de Estadounidenses con Discapacidades, así como las cuestiones sísmicas y de servicios públicos.

Las reacciones han sido variadas. Marven Norman, residente en San Bernardino, criticó el plan en un reciente foro público, diciendo que el proyecto está desperdiciando oportunidades para construir otras estaciones a lo largo de la línea.

“Por un lado, es emocionante ver que por fin se está avanzando. Por otro lado, es decepcionante ver que esto es lo que está avanzando”, dijo. “Casi todos estos estudios identificaban estaciones intermedias entre el lugar donde el tránsito dejaría la línea Metrolink y llegaría al aeropuerto, y éste no tiene ninguna, aunque pasa por el centro comercial, una oficina, el estadio, etc.

“Está cumpliendo el objetivo de ir entre la estación de tren y el aeropuerto y sólo eso, y en el proceso, está dejando muchos usos potenciales en el camino”, añadió.

Aun así, Bud Weisbart calificó el proyecto de “emocionante” y dijo que hay un “tremendo factor sorpresa”. Pero preguntó si se han estudiado medidas alternativas.

La agencia de transportes del condado está estudiando la posibilidad de utilizar vehículos eléctricos autoconducidos con capacidad para el equipaje, pero aún no ha ultimado los detalles. Tampoco ha determinado la velocidad de los vehículos autónomos ni la frecuencia del servicio. El grupo tiene previsto contratar a un equipo para poner en marcha el servicio en el otoño de 2027, y luego Omnitrans, que opera todos los autobuses en San Bernardino, se hará cargo de las operaciones a largo plazo.

“Es un proyecto muy interesante”, dijo Watkins. “Estamos muy ilusionados por aportar otra solución innovadora al transporte y por encontrar nuevas formas de afrontar viejos retos”.

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