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Mexicana colecciona memorias del fútbol, en Doha vivirá su octavo Mundial de la FIFA consecutivo

Bertha Alicia Guzman, of Torrance, is all smiles as she shows her FIFA World Cup Qatar Hayya card.
Bertha Alicia Guzmán muestra en su oficina, en la ciudad de La Habra, la tarjeta Hayya que le permite ingresar a Catar y le da acceso a los estadios durante la Copa Mundial.
(James Carbone/Los Angeles Times)
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La pasión que Bertha Alicia Guzmán tiene por el fútbol está a flor de piel. Esta inmigrante originaria de Jalisco (México) es una coleccionista de memorias, tanto que la Copa Mundial de la FIFA a realizarse en Doha (Catar) es el octavo campeonato al que asiste de forma consecutiva.

“Siempre me gustó el fútbol”, dice la aficionada originaria de Guadalajara.

De todos los mundiales, Guzmán considera que el de Catar es el más costoso. Hasta el momento, ha gastado aproximadamente $8 mil en boletos para el estadio, vuelos aéreos y hospedaje.

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May. 4, 2022

Pero no es algo de lo que se queje porque obtuvo boletos para ver a México en la sección VIP; asimismo, en las dos semanas que estará en Doha disfrutará de los partidos Portugal-Uruguay, Estados Unidos-Irán, España-Costa Rica y Brasil-Camerún, antes de regresar a principios de diciembre a California.

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¿Cómo se prepara? Se le pregunta.

“Soy bastante disciplinada”, responde, asegurando que el fútbol y los viajes le entusiasman en forma desmedida. Revela que acaba de regresar de Marruecos, siendo éste el país número 90 que visita, aparte de conocer las 7 maravillas del mundo.

“Amo viajar, yo trabajo para viajar”, indicó Guzmán, residente en Torrance.

Bertha Alicia Guzman, of Torrance, shows at ticket from World Cup USA 94 part her World Cup.
Un boleto histórico del Mundial de Estados Unidos 1994 preserva entre sus recuerdos Bertha Alicia Guzmán.
(James Carbone/Los Angeles Times)

La mayor parte de su vida ha trabajado en ventas y mercadeo en la industria de supermercados. Al visitar su oficina, cualquiera puede darse cuenta de sus aventuras en los mundiales por las fotografías, recortes de periódicos, boletos de estadios y una serie de recuerdos que preserva.

“No soy de comprar mucho, las cosas [de los mundiales] que tengo son pequeñas”, aclaró.

Al principio dice que tenía libros y estampas, pero se dio cuenta que si continuaba así tendría que irse a vivir al patio y guardar en el interior de la vivienda solo objetos relacionados al fútbol. Pero de igual manera guarda una vuvuzela de Sudáfrica, unas toallitas de Japón y unos brazaletes de Rusia.

“Va cambiando uno, ya pasé esa etapa”, aseguró.

Desde su infancia Guzmán es una aficionada al fútbol. Sin embargo, su conexión con los mundiales llegó al azar. Apenas tenía un par de años de haberse establecido en Los Ángeles, cuando se realizó el Mundial de Estados Unidos 1994, siendo una de las sedes el Rose Bowl, en Pasadena.

Osorio, quien será analista de ESPN en Qatar 2022, lamentó que un jugador como Vela no esté en esta Copa del Mundo, pues para él fue fácil convencerlo, después de que había estado ausente en Brasil 2014.

Nov. 10, 2022

Siendo una jovencita, de 14 años de edad, se inscribió como voluntaria del comité organizador. Le pidieron que hiciera llamadas y ayudara a coordinar el estacionamiento del estadio.

“Cuando empezó el torneo nos dieron boletos”, dijo.

En ese Mundial pudo ver en Pasadena el juego Estados Unidos-Colombia y Brasil-Italia, en la final. Igual presenció el Brasil-Estados Unidos en el Stanford Stadium.

El evento en suelo estadounidense la volvió imparable. Entre las amistades que hizo en esa Copa del Mundo, cuenta que 20 confirmaron que irían a Francia 1998, pero llegada la hora solo una estadounidense y un guatemalteco fueron con ella a París. “Nos fuimos sin boletos de los juegos; teníamos el hospedaje y el vuelo nada más”.

Bertha Alicia Guzman, of Torrance, shows some newspaper clippings from World Cups she collected.
Al visitar la oficina de Bertha Alicia Guzmán cualquiera puede darse cuenta de sus aventuras en los mundiales por las fotografías, recortes de periódicos, boletos de estadios y una serie de recuerdos.
(James Carbone/Los Angeles Times)

A la fecha, Guzmán trabaja para disfrutar de sus mayores aficiones. No obstante, cuenta que en el intervalo de cuatro años, entre el Mundial en Francia y el de Japón-Corea del Sur, contrajo matrimonio. Pero ahí se dio cuenta que el fútbol tiene un valor predominante en su vida.

“No funcionó inmediatamente”, afirmó, indicando que luego de un año se separó.

“Soy felizmente divorciada, porque a mi ex-marido no le gustaba el fútbol”, dijo entre risas.

A partir de su propia experiencia mundialista, considera que el campeonato realizado en Sudáfrica fue el más económico, los gastos oscilaron en los $4 mil y piensa que el más aburrido fue el de Japón-Corea del Sur. Entretanto, a su juicio el mejor ha sido el de Alemania (2006).

La visita a tierras teutonas superó sus expectativas. Guzmán asegura que lejos quedó esa idea de que los alemanes son fríos. Ella cree que todo mundo salió con otra mentalidad después de haber vivido una cordialidad desbordante, tanto de los organizadores como de los habitantes.

Como ejemplo, cita que vio el juego Portugal-México en el Veltins Arena. Ese estadio se encuentra en la ciudad de Gelsenkirchen. Dice que los adultos mayores salían con sus cámaras a ver “las locuras que andábamos haciendo, las caras pintadas, bailando, tomando, lo veían a uno con una sonrisa”.

“Alemania armó un Mundial increíble”, dice sin disimulo.

“Fueron unos excelentes anfitriones”, añadió.

Bertha Alicia Guzman, of Torrance, holds a small soccer ball signed by Mexican professional footballer Jorge Campos.
El exportero mexicano Jorge Campos estampó su firma en esta pequeña pelota que guarda con recelo Bertha Alicia Guzmán entre sus pertenencias.
(James Carbone/Los Angeles Times)

Después de haber vivido 7 mundiales, Guzmán aconseja a quienes desean ir a una Copa del Mundo que se preparen desde el momento en que la FIFA entrega el trofeo al equipo ganador.

Lo primero es comenzar a ahorrar y luego inscribirse en la página oficial de la FIFA. Hay que crear un perfil con los datos personales, para recibir notificaciones y estar listos para cuando se anuncia la venta de boletos. El siguiente paso es hacer las reservaciones de hotel en la sede del equipo que se sigue.

“Haciéndolo desesperado [a última hora] sale caro y se convierte en una pesadilla”, advirtió, detallando que ella sigue páginas de Facebook donde apoyan a México en la Copa del Mundo. Asimismo, Guzmán es parte de un chat en WhatsApp dirigido solo a mujeres que quieren disfrutar esta experiencia.

El mediocampista del Seattle Sounders es uno de los 26 jugadores de la selección masculina de fútbol de Estados Unidos que van al Mundial de la FIFA en Catar

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Esta aficionada asiste a este torneo por su amor a México, de igual manera apoya a Brasil. Pero asegura que ganen o pierdan esos países, las emociones que se viven en un Mundial no tienen comparación alguna.

“Es algo hermoso: la convivencia, la cordialidad, la fiesta, el intercambiar camisetas, tomarte fotos con otras personas y convivir con gente de otras culturas”, dijo Guzmán. “Debería ser así siempre; que el mundo y los seres humanos nos llevemos siempre así”.

México se encuentra en el Grupo C. Inicia actividades el martes 22 de noviembre contra Polonia, el 26 enfrenta a Argentina y el 30 a Arabia Saudita.

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