¿Vencer a Los Ángeles? Tal vez. ¿Mantener alejados a los fans de los Dodgers? Buena suerte
Los fanáticos de los Dodgers siempre encontrarán la manera de llegar a Petco Park y ellos mismos serán escuchados en el juego.
¿De verdad había oído eso? Él miró el televisor, las noticias de la mañana en San Diego. Sí, efectivamente lo había oído.
¿Prohibir la llegada de los fanáticos de LA?
Bay Salmeron, aficionado a los Dodgers, vive en Bellflower pero trabaja en San Diego. Quería ver a su equipo favorito en el Petco Park, y ahora en su televisión le estaban diciendo que no era bienvenido.
Salmeron no se acobardó. Entró en StubHub y pagó $200 por una entrada para el partido del viernes en el Petco Park, posiblemente el evento deportivo más esperado en San Diego en la última década.
Los Padres, repentinamente repletos de estrellas, ya no quieren ceder la ventaja de ser locales a las hordas de aficionados de los Dodgers que viajan por carretera. El equipo rogó a los poseedores de entradas de temporada que no hicieran dinero rápido poniendo sus entradas en el mercado de la reventa. Los Padres no utilizaron las palabras “prohibidos los azules”, pero no fueron tímidos en esperar un mar de marrón en las gradas.
El viernes, en el primero de lo que el tercera base de los Dodgers, Justin Turner, llamó “19 partidos de la Serie Mundial”, la afición de los Padres fue ruidosa, animada e inusualmente grande. La afición de los Dodgers estaba aquí, impertérrita, a mayor costo y en menor número, pero no menos emocionada.
“Creo que nuestros aficionados encontrarán su camino”, dijo el gerente de los Dodgers, Dave Roberts, antes del partido. “No creo que sean la mayoría, como ha parecido en años anteriores. Entiendo la mentalidad de tratar de tener la mayor cantidad de aficionados en casa. Ese debería ser el objetivo cuando juegas en casa.
Se escuchó la ovación de los aficionados de los Dodgers cuando Fernando Tatis Jr. se ponchó en la primera entrada. Se oyó una erupción cuando Walker Buehler ponchó a bateadores consecutivos con corredores en segunda y tercera base y un out en la cuarta.
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Y se escuchó una ronda de gritos por el primer jonrón de Luke Raley en las Grandes Ligas en el quinto, seguido de una ronda más fuerte de abucheos de los aficionados de color marrón.
Se escuchó mucho “Beat LA”, cuando el tablero de video del Petco Park lo exigía, más a menudo y con más entusiasmo cuando los aficionados iniciaban el cántico. Antes del partido, cuando los aficionados comenzaron con “Beat LA”, un video de promoción del Petco Park los ahogó.
Y, cuando Tatis pegó su primer jonrón después de 10 días en la lista de lesionados, dando a los Padres una ventaja de una carrera, Petco se volvió loco. La cara del equipo, y quizá la del béisbol, estaba ganando a Los Ángeles.
Gloria Rodríguez, de Los Ángeles, pagó $150 por una entrada en StubHub. El vendedor le preguntó si el boleto sería para un fanático de los Padres o para uno de los Dodgers. Ella dijo la verdad, y la verdad le hizo el día.
“Fue muy amable”, dijo ella.
Albert y Leah Conlee fueron a visitar a su hijo a San Diego State. Compraron entradas en eBay por $125 cada una. Les gusta ver a los Dodgers en el Petco Park.
“Este es un porcentaje más alto de fans de los Padres de lo que he visto nunca”, dijo Leah Conlee.
Conlee dijo que no era partidaria de que el equipo local restrinja las ventas a los fanáticos de los Dodgers ahora que los Padres pueden presentar un producto de gran calidad.
“Los hemos apoyado durante muchos años”, dijo. “Les ayudamos a construir este equipo. Deberían estar contentos de que vengamos aquí”.
Dijo Maria Kranda, de Moreno Valley, que pagó $150 por una entrada en SeatGeek: “Ganaron mucho dinero con nosotros”.
Los Padres esperaban desde hace tiempo que llegara este día. En 2013, mientras esbozaba los planes de reconstrucción de los Padres bajo la nueva propiedad, el entonces presidente ejecutivo Ron Fowler dijo a The Times que los Padres, con el tiempo, ganarían y llenarían sus asientos con sus aficionados. Mientras tanto, dijo: “Si los Dodgers quieren enviar más gente, que vengan. Me alegro de que gasten dinero en San Diego”.
Fue una noche de viernes muy animada en San Diego, incluso con el Petco Park dos tercios vacío debido a las restricciones por el coronavirus, con la multitud de 15.250 personas a un nivel de intensidad rara vez visto antes de octubre, y casi nunca visto en abril. Los Dodgers volverán al Petco Park a finales de junio, después de que el gobernador Newsom prometiera levantar las restricciones del coronavirus sobre el aforo, y este lugar podría estar en ebullición: un lleno total para los que bien podrían ser los dos mejores equipos de béisbol.
Salmeron, el fanático de los Dodgers que escuchó “Ban the Blue” en la televisión en San Diego, dijo que respeta a los Padres por tratar de desarrollar la lealtad entre su base de fans, incluso si hace más difícil para él ver a su equipo aquí.
“Están tratando de crear la cultura que tenemos en Los Ángeles”, dijo Salmeron. “Eso es honorable”.
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