No hay quién pare a Trump; se mofa y discute con ‘todos’, pero al final todo le favorece

Luego de su contundente triunfo en Carolina del Sur, el magnate Donald Trump dijo que están ganando con todos ya que atrae a su campaña votantes de todos los tamaños, formas y pesos.

“Ganamos con toda la gente, los gordos, los altos, los chaparros y los flacos”, dijo el precandidato republicano a la presidencia de Estados Unidos.

Trump se mofó de sus críticos que quieren verlo fuera de la contienda al subrayar que con la salida de Jeb Bush y si el resto de los candidatos republicanos unen sus votos, de esa forma le ganarán al maestro de los reality shows.

Sin embargo, el magnate no tardó en revirar y enfatizó.

“Estos son unos genios, verdaderamente genios. No se dan cuenta que en la medida que los candidatos se vayan saliendo de la contienda yo también voy a ganar muchos de esos votos que se están quedando”, explicó en una conferencia de prensa.

En Carolina del Sur los votantes le dieron un holgado triunfo a Trump con un 32%, mientras que Marco Rubio obtuvo el 22.5% y Ted Cruz el 22.3%; atrás quedaron George Bush con 7.8% (fuera de la contienda), John Kasich con 7.6% y Ben Carson con 7.2%.

Las próximas elecciones serán en el estado de Nevada el día de mañana. Sin embargo, con el triunfo del magnate en Carolina del Sur no se esperan sorpresas y solo queda en incertidumbre quién obtendrá el segundo lugar: Cruz o Rubio y cuándo tirarán la toalla Carson y Kasich.

Expertos ya hablan de Trump como todo un movimiento que lo único que ha hecho es crecer y crecer; incluso, sus férreos contrincantes que incluyen el establecimiento político del partido republicano no saben cómo detenerlo ya que Rubio y Cruz no parecen tener el empuje del magnate.

Los expertos, politólogos y el más conocedor de las contiendas políticas desde el inicio se han equivocado ya que esperaban que Trump se desvaneciera en los primeros meses de anunciar su candidatura, pero conforme pasa el tiempo, el precandidato ha demostrado que no es flor de un día y además de derribar rivales representantes del establecimiento político (Jeb Bush), se mofa de todos, discute con todos, pero al final, parece que todo le favorece y lo único que ha hecho es seguir ganando adeptos con su retórica ganadora y de hacer de Estados Unidos un país grande otra vez.

“Vamos a ganar tanto que hasta me van a decir: ya estamos cansados de tanto ganar, pero yo les voy a contestar: no me importa, seguiremos ganando y ganando”, expresó Trump en una de sus innumerables presentaciones.