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Panfletos racistas causan indignación en Cal Poly San Luis Obispo

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Poco después de que el martes Neal MacDougall llegara al campus de Cal Poly San Luis Obispo, el profesor notó que la policía de la universidad estaba afuera de un baño cerca de su oficina. Un insulto racista contra los afroamericanos había sido garabateado con un marcador rojo en la pared de un cubículo de baño.

Más tarde, descubrió una serie de panfletos racistas pegados junto a su puerta. También alguien había cortado los carteles que había colgado afuera de su oficina en apoyo a los estudiantes que se encuentran en el país ilegalmente.

El descubrimiento fue la última controversia en el prestigioso campus, que según el presidente es menos del 55% blanco, y que MacDougall dijo demuestra que en la universidad hay una una cultura de racismo. La semana pasada, aparecieron fotografías de miembros blancos de una fraternidad, entre ellos uno con la cara pintada de negro, exhibiendo signos de pandillas.

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Ese mismo fin de semana, los estudiantes pertenecientes a minorías organizaron un evento de diversidad para alumnos de preparatoria.

“Muchos estudiantes afroamericanos, latinos y asiáticos sintieron que estaban perpetrando un fraude”, dijo MacDougall, quien ha enseñado en el departamento de agronegocios de la universidad durante aproximadamente dos décadas. “Les acaban de decir a todos estos estudiantes de preparatoria que este era un buen lugar para estar”.

En una declaración el martes, el presidente de la universidad, Jeffrey Armstrong, anunció una suspensión indefinida de todas las fraternidades y hermandades del Consejo Panhelénico y de Interfraternidad.

“También buscamos reunirnos con nuestros estudiantes menos representados para abordar sus inquietudes y discutir las acciones que estamos tomando para apoyarlos y la diversidad y la inclusión en nuestro campus”, escribió Armstrong.

El portavoz de la universidad, Matt Lazier, calificó las últimas publicaciones de comentarios racistas y de odio como “actos desesperados de unos pocos que buscan difundir el odio y dividir a la comunidad”.

Dijo que cualquier acción que viole la política de la universidad o los derechos de la 1ª Enmienda, incluidas las amenazas de violencia física o expresiones que constituyan acoso, dará lugar a medidas disciplinarias, hasta la expulsión y posiblemente incluso cargos criminales.

“En términos claros, la universidad aborrece y denuncia el discurso y las acciones de odio y de racismo; son inconsistentes con nuestros valores en Cal Poly”, dijo Lazier. “Debemos usar este tiempo para rechazar el odio y unirnos como comunidad para fomentar un diálogo constructivo y comenzar el proceso de sanación”.

MacDougall publicó fotos en Facebook de los panfletos que encontró afuera de su oficina. Uno sugería que el tono de la piel estaba correlacionado con las tasas de homicidios y violaciones, junto con el grado de inteligencia.

Otro enumeraba la cantidad de especies y subespecies de gorilas, chimpancés y otros animales. El panfleto decía:

“Así que ahora dime, ¿todos los grupos de humanos son la misma subespecie o incluso la misma especie? ¿Tenemos un conjunto de reglas para los humanos y otro conjunto de reglas para todos los demás organismos? ¿Es eso científico? ¿De verdad crees que hay solo una especie de humano, y una subespecie???”

Dos de los carteles de MacDougall fueron tachados con una X. Uno decía: “¡Soy un educador sin miedo! Como profesor/instructor, trabajo con y para las familias y estudiantes indocumentados en Cal Poly-SLO”.

El otro era una foto de una mujer con un hiyab de bandera estadounidense, con el mensaje: “Nosotros, el pueblo, somos más grandes que el miedo”.

“Eso me pareció aún más perturbador porque, hay un trasfondo de violencia en ese acto”, dijo MacDougall.

Llamó a la policía pero no aparecieron, dijo, y le aconsejaron que retirara los manifestos.

Dijo que la débil respuesta de la universidad, que cree que está más centrada en el control de daños en lugar de resolver problemas subyacentes, refuerza que este comportamiento está bien.

“Muchas de las reacciones son las respuestas a la crisis que vemos que realizan las empresas: ´¿Qué decimos para no empeorar las cosas?´”, dijo MacDougall. “Tenemos que ser honestos entre nosotros sobre lo que ha sucedido”.

Para leer este artículo en inglés, haga clic aquí:

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