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Especial: Este es el legado imborrable de la magnífica Aretha Franklin

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El preludio del fin de semana se inicia se inicia de manera realmente triste para el mundo del entretenimiento con el fallecimiento de Aretha Franlin, una leyenda de la música que no merecía abandonarnos tan pronto, ya que contaba únicamente con 76 años de edad. Lo que terminó acabando rápidamente con su existencia fue un cáncer de páncreas, es decir, una enfermedad aterradora que suele ser fatal.

Como hemos podido notar en videos relativamente recientes de sus presentaciones en vivo, la oriunda de Memphis, Tennessee, no se encontraba necesariamente en el mejor estado de salud durante los últimos tiempos (sufría de un considerable sobrepeso antes de ponerse extremadamente delgada debido a la enfermedad) y había perdido una parte de su potencia vocal, pero era todavía completamente capaz de impresionar a cualquiera con su inspirada voz, con la que transportaba a su audiencia a esos planos espirituales a los que solo son capaces de llevarnos los grandes artistas.

Hay que resaltar que Franklin era tremendamente versátil, ya que si bien se la empezó a llamar ‘la Reina del Soul’ durante los ’60 (lo que era ya sobresaliente debido a que en esa época tenía poco más de 20 años), llegó a practicar desde muy temprano géneros como el blues, el jazz, el rock and roll y hasta la ópera, aunque, claro está, incursionó también de manera más reciente en esa mezcla de R&B y pop comercial en la que caen irremediablemente los artistas que pretenden mantenerse en el ojo del ‘mainstream’.

Su carrera de más de seis décadas es demasiado vasta como para pretender hacer un análisis exhaustivo de la misma en unas cuantas líneas, pero como buenos amantes de la vieja escuela que somos, nos quedamos con su etapa inicial y con la espectacular presentación de 1964 en el programa televisivo de Steve Allen, donde no solo cantó de manera magnífica, sino que la vio tocando el piano de manera espectacular.

Es allí donde se escuchan versiones memorables de “Chain of Fools”, un clásico de clásicos por donde se le mire, y “Evil Gal”, un portentoso blues cargado de ovarios, aunque, curiosamente, la carrera de la gran dama despegó algunos años después, gracias sobre todo a su adaptación de “Respect”, una pieza original de Otis Redding (otra leyenda del soul) que, en sus manos, se transformó en un himno por los derechos civiles de su comunidad y los de la mujer que tiene más vigencia que nunca en los tiempos que vivimos.

Los ’70 no fueron benévolos con ella y la encontraron luchando por mantenerse en los ‘charts’ que la habían recibido antes con tanto entusiasmo, pero su suerte cambió en los ’80, cuando retomó la senda de los éxitos y logró aparecer en la recordada comedia “The Blues Brothers” (llamada “Los Hermanos Caradura” en territorios latinoamericanos).

En el 2006, cantó el himno nacional estadounidense durante el Super Bowl, y en el 2009, se presentó ante el presidente Barack Obama durante la ceremonia inaugural del mismo. En el 2013, la revista Rolling Stone Later la colocó en el primer puesto de su listado de “100 Grandes Cantantes”, y en el 2014, tuvo una aclamada intervención en el show de David Letterman.

Su vida personal no fue precisamente fácil. Salió embarazada por primera vez a los 12 años (el responsable era un muchacho de su escuela) y tuvo su segundo hijo a los 14. El primero de sus dos esposos (que no era el padre de sus hijos) abusaba de ella. En 1979, su padre fue baleado en su propia casa, y nunca se recuperó del incidente; murió cinco años después.

Fuera del importante papel simbólico que tuvo en la lucha afroamericana con la mencionada versión de “Respect”, sus méritos fueron reconocidos en 1979 con una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood; fue la primera mujer incorporada al Salón de la Fama del Rock, en 1987; recibió dos Grammys especiales (el Leyenda de 1991 y el de Logros de Toda una Vida de 1994); y se hizo acreedora a la Medalla Presidencial de la Libertad en el 2005.

Pero su rol en este mundo no ha acabado con la desaparición física, por supuesto. A inicios de este calendario, se confirmó que la cantante Jennifer Hudson se pondrá en la piel de la leyenda para una película biográfica sin estreno definido, y ya se ha dado a conocer que se le realizará un gran tributo cargado de estrellas el próximo 14 de noviembre en el Madison Square Garden de Nueva York.

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