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El LAPD y el Jefe Beck

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No debe haber una mayor preocupación por los últimos incidentes en el Departamento de Policía de Los Ángeles.

Quizá los recientes eventos en que se han visto envueltos miembros del LAPD son motivos de controversia, pero de ahí a caer en el argumento de que hay una crisis profunda en este departamento es un punto de vista muy lejos de la realidad.

Ha hecho bien el Jefe Charlie Beck en salir a dar la cara y explicar claramente los pasos que tomará para retirar del servicio a aquellos elementos que han cometido infracciones graves. En este año al menos seis incidentes se han contabilizado. En enero, un grupo de policías fue sorprendido por llevar a una reunión con gente de negocios a un importante exlíder de la Mafia Mexicana.

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En marzo, un video capturó a un oficial disparando fatalmente a un ‘homeless’ durante una pelea; días después, otro policía tiroteó a un conductor de un auto durante una persecución, la persona estaba desarmada. El 14 del mes de marzo, se anunció que se buscaba a un policía como sospechoso de una pelea fatal en Pomona. Ese mismo día, un oficial es arrestado acusado de tráfico humano en la frontera y, un día después, dos policías cayeron heridos en el sur de la ciudad.

He tenido la oportunidad de conocer al Jefe Beck y creo conocer sus cualidades. Si hay un líder que puede trascender estos eventos es Beck.

El LAPD puede tener varios contratiempos. Es lógico, una fuerza de alrededor de 10 mil gentes es bastante grande y algunos errores pueden pasar. En esta sociedad, los padres no son los únicos responsables del comportamiento de sus hijos, con todo el respeto y sin tratar de decir que las dos situaciones son forzosamente equiparables.

Los latinos no podemos olvidar que Beck ha sido un fuerte defensor de la comunidad indocumentada, primero al apoyar la continuación del programa de la Orden Especial 40, su negativa a trabajar con Inmigración con los detenidos no peligrosos y el alto al decomiso de autos para conductores sin licencia.

En estos momentos hay que trabajar con Beck y el LAPD, no darle la espalda y cuestionarlo por su trabajo.

Tener instituciones fuertes como la policía de Los Ángeles son necesarias para que la ciudad siga progresando. En estos tiempos de debate migratorio, los latinos necesitamos aliados que apoyen nuestra agenda. Tal como lo dijo Beck, hay que responsabilizar a los culpables de actos que no cumplen con las normas legales. Ese es el paso ideal, el siguiente es tomar el siguiente paso para que esos incidentes no se vuelvan a repetir.

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