Someten queja por arriesgar su salud al limpiar campamentos de indigentes

Encuentran jeringas, excremento, animales en la putrefacción y hasta condones usados en las numerosas autopistas del estado; sin embargo, su trabajo es limpiar los campamentos que los indigentes dejan a su paso en las faldas de estas carreteras.

Al tener miedo de contraer enfermedades, el sindicato que representa a los trabajadores de Caltrans ha presentado una queja ante el mismo Departamento de Transporte, el cual es responsable del diseño, construcción, mantenimiento y operación del sistema de autopistas de California, así como de la parte del sistema de carreteras interestatales dentro de los límites del estado.

La Unión Internacional de Ingenieros Operativos (I.U.O.E.) apunta que a sus miembros se les asigna un trabajo potencialmente peligroso, aun cuando estos no tienen por qué hacerlo, ya que no se encuentran como parte del contrato.

“Caltrans no está asegurándose de que nuestros miembros sean previstos con el Equipo Personal de Protección (PPE), el entrenamiento necesario, las vacunas y la compensación apropiada para la peligrosa tarea que desempeñan, al limpiar los campamentos de las personas sin hogar en zonas que son propiedad el estado”, señala Steve Crouch, director de empleados públicos del sindicato.

Crouch recalca que aparte de limpiar estos escombros, los trabajadores también se enfrentan a los perros sueltos, que a menudo los atacan.

El trabajo se intensifica tras diferentes ordenanzas en diferentes ciudades del estado, que sacan a los indigentes de las regiones urbanas y sin darles refugio para mantenerlas limpias, orillando a los desamparados a tener que vivir en las orillas de las autopistas o debajo de sus puentes.

De acuerdo a Crouch, los trabajadores tienen inclusive que separar los desechos humanos y etiquetarlo como “material peligroso”, de igual forma se realiza con las jeringas. Sin embargo, para todo esto no existe ni la capacitación, ni el uniforme o pago apropiado.

Mientras surge la investigación de las quejas, la agencia estatal ha dicho que no puede dar comentarios. No obstante, afirma que “la seguridad es una prioridad para Caltrans y revisaremos cuidadosamente la queja”.

A finales de este mes se espera que tanto el sindicato como el departamento, discutan el problema para llegar a una solución, dice Croucher.