Las organizaciones benéficas se han vuelto muy creativas para sobrevivir a la pandemia
Cada día de octubre, Mitch Besser, de 66 años, residente en Los Ángeles, utilizó a su máquina de remar Concept2, y recorrió el equivalente a 500.000 metros, o casi 311 millas.
Besser logró esa hazaña - remando un promedio de 10 millas cada día - como parte de una recaudación de fondos virtual para Mothers2mothers, una organización benéfica que fundó en 2001 cuando era médico en Sudáfrica para proporcionar educación y apoyo a las madres y niños cero positivos. La organización suele recaudar dinero organizando un paseo en bicicleta que cada dos años cosechó hasta 250.000 dólares y familiarizó a los donantes con las personas y los lugares a los que ayudaron con sus contribuciones.
Afortunadamente, Besser tenía un conocimiento limitado de este deporte y no tenía ni idea de que algunos días remaba 10 veces más que en las pruebas olímpicas de remo.
“No tenía nada con que compararlo. A veces, si piensas demasiado, nunca lo intentas”, dijo Besser que remaba al ritmo de la música que más le gusta, incluyendo “Would I lie to you?” de los Eurythmics, una elección no sorprendente dado que está casado Annie Lennox que forma parte del grupo. Ella también lo acompañaba a remar.
“En cualquier otra situación, remar parecería una idea absolutamente ridícula para recaudar fondos”, dijo Emma France, directora de compromiso global y estratégico de Mothers2mothers. “Pero en estos tiempos extraños hay ideas que tenemos que considerar y llevar a cabo”.
Los voluntarios recaudaron desde sus casas 325.000 dólares - más que el evento habitual de bicicletas - a través del remo, además de la recaudación de fondos adicionales por medio de eventos de bicicleta, caminatas y carreras. Es una historia de éxito en un año problemático para muchas organizaciones sin fines de lucro.
Los donantes están haciendo grandes aportaciones a las organizaciones que se ocupan del coronavirus y sus consecuencias económicas, por ejemplo, desarrollando vacunas, mejorando el tratamiento y suministrando alimentos y otras necesidades a los que se encuentran repentinamente desempleados. En total se recaudaron 16.500 millones de dólares esta semana que aportaron corporaciones, fundaciones e individuos ricos, según Candid, una organización sin ánimo de lucro que hace seguimiento de la filantropía.
Pero muchas otras organizaciones benéficas están luchando porque la pandemia ha cerrado todos los eventos en persona. Además, los donantes habituales que no son ricos pero hacen pequeñas contribuciones pueden haber perdido el trabajo debido a las restricciones relacionadas con el coronavirus y ya no pueden hacer donativos.
La Asociación de Organizaciones sin Fines de Lucro de California dijo que un tercio de sus miembros han recortado sus servicios en más del 50%. Casi 4 de cada 10 organizaciones sin fines de lucro podrían cerrar por falta de fondos en los próximos tres años, según las proyecciones de Candid.
Las organizaciones sin fines de lucro están respondiendo con formas innovadoras para recaudar dinero, como las proezas virtuales de Mothers2mothers.
Hilarity for Charity
Hilarity for Charity presentó un programa de juegos en línea para la educación y prevención del Alzheimer y en apoyo a los cuidadores. El Proyecto de Derechos de los Inmigrantes y Refugiados de Florencia organizó una fiesta para ver el documental a distancia.
No siempre funciona. JAR of Hope, con sede en Nueva Jersey, por ejemplo, había comenzado a recaudar fondos para la investigación de la distrofia muscular de Duchenne con una rifa en línea, pero tuvo que detenerse después de que el fiscal general del estado dictaminó que las organizaciones benéficas no pueden operar rifas remotas.
El muelle de Santa Mónica estaba repleto un día de septiembre antes de que la pandemia llegara a EE.UU, con los propietarios de los boletos haciendo fila para los paseos y los juegos de carnaval dirigidos por celebridades durante la Hilarity for Charity County Fair 2019.
Fue una gran recaudación de fondos para la caridad, que se centra en la enfermedad de Alzheimer y en ayudar a las personas que cuidan a un miembro de la familia con esa enfermedad. La organización sin ánimo de lucro es un proyecto que apasiona al actor Seth Rogen y su esposa, Lauren Miller Rogen, cuya madre tiene Alzheimer.
Este tipo de evento no pudo realizarse en 2020 debido a la pandemia, pero la organización ya estaba acostumbrada a reunir grupos en un entorno virtual.
“Nuestro modelo de grupo de apoyo nunca ha sido en persona y siempre se ha llevado a cabo a través de salas de reuniones virtuales”, dijo Miller Rogen. “Así que todo el tiempo hemos sabido que la gente puede reunirse de una manera realmente solidaria, de forma digital y virtual”.
Rogen dijo que tuvieron una lluvia de ideas sobre “un evento virtual que fuera divertido y emocionante”. “Y se nos ocurrió la idea de un programa de juegos virtuales”.
El comediante lo presentó en el más llamativo de los trajes - amarillo, naranja, marrón y negro a cuadros - y trabajó con equipos liderados por las actrices Anna Faris y Elizabeth Banks, y los veteranos de la comedia Jim Gaffigan, Craig Robinson y Billy Eichner. El espectáculo fue patrocinado por la empresa de biotecnología Biogen.
El evento recaudó unos 325.000 dólares, que según Rogens fue aproximadamente entre un tercio y la mitad de lo que se recaudaba con los típicos eventos en persona. Pero la gran sorpresa fue el tamaño de la multitud del Zoom que se presentó, unas 2.000 personas de todo el mundo, más grande que la multitud del muelle de Santa Mónica el año pasado.
“Creo que hemos visto que hay formas muy efectivas de reunir a grandes grupos de personas virtualmente”, dijo Rogen, “Y eso no significa que reemplazaremos los eventos en persona, pero creo que podemos simplemente añadir este tipo de cosas a lo largo del año. Son divertidas y fáciles de realizar”.
Florence Immigrant & Refugee Rights Project
A pesar del brote de coronavirus, el Florence Immigrant & Refugee Rights Project se ha mantenido ocupado con servicios que incluyen la representación legal en procedimientos de inmigración para adultos y niños detenidos y reunificación de familias.
El proyecto ayuda a los solicitantes de asilo que esperan establecerse en Estados Unidos. Patricia, que pidió que no se utilizara su apellido porque teme por su seguridad, era una refugiada de Nicaragua, donde dijo que era perseguida por su apoyo a las protestas en favor de la democracia del “movimiento azul y blanco”. El proyecto la ayudó a conseguir asilo y ahora vive con una tía en Florida.
La pandemia creó nuevos problemas que la organización sin fines de lucro con sede en Arizona debe abordar.
“Los centros de detención de Arizona tuvieron los peores brotes del país”, dijo Gabriela Corrales, directora de filantropía del proyecto. “Y por eso demandamos varias veces para que la gente fuera liberada, especialmente los más vulnerables”.
Cuando se estrenó el documental de Netflix “Nación de la Inmigración” en julio, el Florence Immigrant & Refugee Rights Project organizó una fiesta de visualización en línea para más de 70 donantes, seguida de un debate sobre el examen del sistema de inmigración de Estados Unidos.
“También compartimos cómo el número de detenciones y separaciones familiares estaba aumentando”, dijo Corrales. “Le pedimos a la gente que por favor siga compartiendo esta información, que siga hablando de esto porque no queremos que la gente lo olvide”.
Las reuniones en línea requieren poco personal, no hay lugar, ni servicio de catering y otras necesidades del evento. Como resultado, la cantidad neta que el proyecto recibe de las donaciones ha disminuido solo ligeramente en comparación con el 2019, comentó Corrales.
No Kid Hungry
Bill Shore, presidente ejecutivo de No Kid Hungry, tiene un problema pandémico envidiable: manejar más fondos procedentes de donaciones de los que la organización, con 10 años de existencia, ha visto nunca por un factor de varios millones de dólares.
A principios de noviembre, No Kid Hungry había utilizado la generosidad para donar 34.5 millones de dólares a más de 1.200 escuelas, bancos de alimentos y organizaciones comunitarias, con planes de distribuir otros 28 millones de dólares para finales de año, dijo Shore, quien fundó la organización sin fines de lucro.
“Creo que hubo un momento al principio de la pandemia en el que la gente estaba desesperada por hacer algo”, manifestó Shore.
“No se podía curar. No podías inventar una vacuna. No se podía donar una vacuna, en realidad. Así que creo que, de alguna manera, éramos la mejor opción para la gente que sentía que tenía que hacer algo, porque esto es terrible”.
Cuando No Kid Hungry tuvo que eliminar los eventos en persona, Shore encontró ayuda de muchos lados.
“Hemos tenido al entrenador físico Isaac Calpito recaudando más de un millón de dólares en su entrenamiento en vivo todos los días, siete días a la semana, a las 11 a.m. en Instagram. Tuvimos a actores de Broadway creando eventos teatrales alternativos llamados ‘Homebound Project’. Eran obras cortas en directo, de una persona y un actor”.
El agente de Hollywood Richard Weitz y su hija adolescente, Demi, recaudaron dinero para No Kid Hungry con el acertado nombre de Quarantunes, en el que participaron grandes nombres como John Mayer, Josh Groban y Boy George Zoom, emitiendo desde sus casas.
“Todos los sábados por la noche, hacían este exclusivo evento en vivo, solo con invitación y protegido por contraseña, para recaudar dinero. Uno de ellos recaudó una cantidad realmente significativa de dinero para nosotros”, dijo Shore.
No Kid Hungry también contó con la participación de famosos que leían historias cortas en varias plataformas de medios sociales, en colaboración con Save the Children, para fomentar el interés por las donaciones. Entre los lectores se encontraban las actrices Lupita Nyong’o, Jennifer Garner y Amy Adams.
“También, por primera vez, lanzamos una campaña de televisión de respuesta directa en la que participó el actor Jeff Bridges”, dijo Andrea Holliday, gerente principal de medios de comunicación de consumo nacional de No Kid Hungry y su organización matriz, Share Our Strength.
Las donaciones corporativas vinieron de Taco Bell, Williams-Sonoma, Verizon, NBCUniversal y otros.
“El nivel de generosidad ha sido asombroso”, manifestó, reconociendo que estaba algo preocupado durante los primeros días de los cierres del virus, “pero luego los fondos realmente comenzaron a fluir. No se han detenido. Han disminuido la velocidad, pero no se han detenido”.
Mothers2mothers
Besser, que a finales de mes remaba de 10.000 a 20.000 metros diarios, se había preparado para el potencial -quizá incluso la probabilidad- de fracaso de su objetivo de convencer a los voluntarios de remar 1 millón de metros para Mothers2mothers.
Besser, que ha asumido el cargo de presidente interino de la oficina de la organización benéfica en Sudáfrica, contaba con el historial de la organización: La creación de más de 11.000 puestos de trabajo para mujeres que viven con el VIH y la prestación de servicios y educación. Lo más importante es que las mujeres están dando a luz a bebés libres de VIH, dijo Besser. Mothers2mothers recibe la mitad de su dinero del gobierno de Estados Unidos y tiene un presupuesto de 25 millones de dólares, expuso Besser.
Sin embargo, pensó que era un mal momento para pedirle dinero a alguien, particularmente para una causa que involucra a un continente distante cuando hay tanto por hacer en Estados Unidos.
Se equivocaba. Los voluntarios remaron más de 2.2 millones de metros para Mothers2mothers.
“Teníamos 41 remeros en total, de 6 a 66 años, incluyendo a mi esposa, Annie”, dijo Besser. “Teníamos, además, tres olímpicos que remaban para nosotros, también un equipo británico que pertenecía a un gimnasio de remo llamado Rowbots”.
El esfuerzo fue impulsado por uno de los jugadores de fútbol más populares de Gran Bretaña, que tiene la friolera de 43.7 millones de seguidores en Instagram. Gareth Bale, un jugador de fútbol del Tottenham Hotspur, se acercó a sus seguidores y pidió a la gente que participara.
A pesar del éxito de los eventos remotos, el paseo semestral en bicicleta fue muy extrañado. Este año se suponía que iba a celebrarse en Uganda durante cinco días de octubre.
“Es más que un simple paseo”, dijo Besser. “Vamos a nuestros sitios, nos encontramos con el personal del lugar. Es mitad paseo y mitad exposición a Mothers2mothers en el campo. Siempre asistimos a donde estamos programando para que los participantes puedan sentir realmente lo que estamos haciendo”.
Besser enfatizó que la futura recaudación de fondos probablemente se convertirá en un híbrido de eventos en vivo y virtuales.
“Me imagino la belleza de poder recaudar entre 200.000 y 300.000 dólares cada dos años, y ahora vamos a poder hacerlo cada año”, dijo Besser. “La prueba de concepto funcionó muy bien”.
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