Área de la Bahía fortalece restricciones de COVID-19. El condado de Santa Clara decreta cuarentena por viajes

Mientras que la pandemia de COVID-19 empeora rápidamente en California, los condados de San Francisco y San Mateo se ubicaron el sábado al nivel más restrictivo del estado, lo que obliga al cierre de gimnasios y salas de cine.

Al mismo tiempo, Santa Clara emitió sus propias reglas ante el COVID-19, que de alguna manera son más rigurosas que las emitidas por Los Ángeles el viernes. Según la directiva de Santa Clara, las personas deben estar en cuarentena durante 14 días al regresar de un viaje de más de 150 millas, los hoteles estarán abiertos solo para viajes esenciales o aislamiento, y los establecimientos minoristas no esenciales se limitarán al 10% de su capacidad en interiores, por debajo del límite actual del 25%.

Estas disposiciones se producen cuando las hospitalizaciones relacionadas con COVID-19 se triplicaron en el último mes, a poco de superar su máximo del verano.

Según datos publicados el sábado por el Departamento de Salud Pública del estado, el viernes hubo 6.972 personas infectadas con el coronavirus en hospitales de la entidad. El 25 de octubre, ese número era de 2.254. El máximo histórico es de 7.170, establecido el 22 de julio.

En total, más de 1.18 millones de personas se han infectado con el coronavirus, y más de 19.000 han muerto en California.

San Francisco había podido evitar el nivel “morado” más restrictivo, pero la tasa de nuevos casos de coronavirus en el Área de la Bahía ha seguido aumentando en los últimos días. En solo las últimas seis semanas, los contagios semanales de coronavirus se han cuadriplicado, de alrededor de 200 a mediados de octubre, a cerca de 900.

Un análisis del Times publicado el viernes encontró que la mayor parte de California ahora está sufriendo sus peores tasas diarias de nuevos casos de coronavirus desde el inicio de la pandemia, superando incluso el aumento del verano, que obligó a los funcionarios a revertir la primera reapertura del estado.

El Departamento de Salud Pública anunció el sábado que seis condados habían caído en el nivel más restrictivo del marco de reapertura: San Francisco, San Mateo, Plumas, Lake, Modoc y Calaveras. Tres cayeron en el nivel rojo: Mariposa, Inyo y Alpine.

Los cambios significan que 51 de los 58 condados de California se encuentran ahora en el nivel morado, lo que representa el 99% de su población, o 38.8 millones de personas de los 39.1 millones de residentes del estado. Se requiere que las zonas en nivel morado cierren las operaciones interiores de restaurantes, gimnasios y lugares de culto religioso.

Los condados en esta categoría están sujetos a la orden limitada de permanecer en su domicilio, que prohíbe todas las reuniones entre las 10 p.m. y las 5 a.m., además de las actividades no esenciales fuera del hogar durante esas horas, con excepciones como ir a comprar alimentos, caminar con miembros de su domicilio, recoger comida para llevar y trabajar en industrias esenciales, como la preparación de comidas.

Los únicos condados que no están en el nivel morado son Marin, Amador, Plumas, Inyo, Mariposa, Mono y Alpine, que están en el nivel rojo, el segundo nivel más restrictivo, y Sierra, que está en el nivel naranja, el tercero.

San Francisco ya había ordenado el cierre de los comedores interiores de los restaurantes a partir del 14 de noviembre. Desde el domingo al mediodía se prohibirán las operaciones en interiores de lugares de culto religioso, cines, gimnasios, museos, acuarios y zoológicos. Los carruseles al aire libre y las ruedas de la fortuna deben cerrarse, y la venta minorista no esencial tendrá un límite del 25% de su capacidad.

Las escuelas que ya están abiertas pueden continuar impartiendo clases en interiores, y las primarias que aún no han regresado a la normalidad pueden seguir solicitando exenciones para reabrir operaciones, señalaron funcionarios de San Francisco. Es posible que las secundarias y preparatorias que no han abierto no lo hagan, pero pueden solicitar hacerlo al aire libre, explicaron las autoridades.

San Mateo ordenará la suspensión de las comidas en interiores a partir del domingo, después de que los funcionarios informaron un aumento del 85% en los casos de coronavirus, de octubre a noviembre.

“No habíamos visto cifras como esta en mucho tiempo, y realmente necesitamos revertir esta tendencia increíblemente preocupante”, declaró el administrador del Condado, Mike Callagy, en un comunicado. “Es importante recordar que podemos revertir la tendencia, siempre que sigamos prácticas de salud y seguridad con sentido común”.

Santa Clara, el hogar de Silicon Valley, emitió el sábado su propia orden obligatoria que “desalienta enérgicamente los viajes por placer y no esenciales, y requiere que las personas que ingresan al Condado se pongan en cuarentena durante 14 días, al regresar de un traslado de más de 150 millas”. Esas nuevas disposiciones entrarán en vigor el lunes y durarán al menos hasta el 21 de diciembre.

“Estoy muy preocupada por el aumento continuo de casos de COVID-19 y hospitalizaciones”, dijo la Dra. Sara Cody, oficial de salud de Santa Clara, en un comunicado.

“El número de pacientes hospitalizados por el coronavirus en nuestro Condado se ha duplicado en las últimas dos semanas, y corremos el riesgo de exceder la capacidad de nuestros hospitales muy pronto si continúan las tendencias actuales”, explicó Cody. “Durante este momento crítico de creciente transmisión de COVID-19 en nuestra comunidad, insto a todos los residentes a que tengan cuidado y, en la mayor medida posible, minimicen el contacto con cualquier persona fuera de su domicilio inmediato”.

La cifra de pacientes en el Condado que han ingresado al hospital a causa del virus se ha triplicado en el último mes, y ahora superan el récord establecido en el verano. Los funcionarios dicen que están preocupados porque los hospitales lleguen a su capacidad máxima.

Santa Clara emitió nuevas órdenes el sábado, que restringirán aún más los establecimientos minoristas interiores no esenciales a un 10% de su afluencia permitida, un margen mucho más estricto que el requerido bajo el nivel morado del estado, que limita esos lugares a un 25%.

Los comercios minoristas esenciales en el Condado, como los supermercados y las farmacias, tendrán un límite del 25% de la capacidad, también más estricto que el 50% que permite California.

Entre los cambios adicionales en Santa Clara se encuentran, según un comunicado:

• Todas las instalaciones abiertas al público deben establecer un “sistema de medición”, para garantizar que no se excedan los límites de capacidad, por ejemplo, con un trabajador contabilizando a las personas que se encuentran adentro.

• Las reuniones en exteriores para servicios religiosos y manifestaciones políticas están ahora limitadas a un máximo de 100 personas.

• Se prohíben todas las actividades recreativas que impliquen contacto físico o proximidad con personas ajenas al domicilio.

• Las salas de apuestas están cerradas.

• Los hoteles y otras instalaciones de alojamiento estarán abiertos solo para viajes esenciales y para facilitar el aislamiento o cuarentena.

El condado de Los Ángeles también anunció el viernes reglas más estrictas por el coronavirus. A partir del lunes, las tiendas minoristas esenciales se limitarán al 35% de su capacidad, por debajo del actual 50%.

Por otro lado, las tiendas no esenciales, centros comerciales, bibliotecas y establecimientos de cuidado personal que no sean fundamentales, como salones de belleza, peluquerías, salones de uñas, tiendas de piercings, servicios de bronceado y terapia de masajes, se limitarán al 20% de su capacidad; actualmente, pueden operar con un 25%.

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