Anuncio

Los hospitales enfrentan decisiones difíciles a medida que las UCI se llenan de pacientes con COVID-19

ICUs are rapidly filling with COVID-19 patients. Above, a patient at Riverside University Health System Medical Center.
Las unidades de cuidados intensivos en California se están llenando rápidamente de pacientes con COVID-19. Arriba, los trabajadores médicos tratan a un paciente con COVID-19 en mayo en el Centro Médico del Sistema de Salud de la Universidad de Riverside en Moreno Valley.
(Gina Ferazzi / Los Angeles Times)
Share

Con las unidades de cuidados intensivos en todo California llenándose rápidamente de pacientes con COVID-19, los hospitales tienen una cantidad limitada de herramientas disponibles para liberar más capacidad en las próximas semanas, ya que se espera que aumenten los casos.

En la primavera, el gobierno abrió un llamado hospital de “emergencia” en Los Ángeles e incluso atracó un barco médico de la Marina en el puerto de San Pedro para recibir pacientes si los centros médicos se llenaban. Pero los funcionarios encontraron que esas instalaciones complementarias no trataban a muchos pacientes y no brindaban el mismo nivel de atención que los hospitales tradicionales.

“Los barcos hospital son maravillosos si eres un marinero herido de 23 años. Pero no es un lugar para cuidar a los pacientes de la UCI enfermos con COVID-19”, dijo el Dr. George Rutherford, epidemiólogo y experto en enfermedades infecciosas de UC San Francisco. “Si necesitan estar en la UCI, necesitan estar en la UCI”.

Anuncio

Por lo tanto, en las próximas semanas en el condado de Los Ángeles, los hospitales intentarán coordinar su personal para satisfacer mejor las necesidades de los pacientes críticamente enfermos, algunos de los cuales aún podrían tener que ser enviados a otras áreas del hospital que normalmente no tratan casos de UCI.

Pero eso conlleva riesgos. En caso de que la escasez de personal se vuelva particularmente grave, los pacientes críticamente enfermos podrían terminar recibiendo atención de enfermeras y médicos sin una capacitación especializada actualizada en cuidados intensivos.

“Las camas físicas no son el factor limitante en esta o la mayoría de las otras pandemias”, dijo recientemente la Dra. Christina Ghaly, directora de servicios de salud del condado de Los Ángeles. “Lo que importa es la capacidad práctica del hospital para atender a los pacientes que entran por la puerta. Y eso requiere no solo una cama, sino que, lo que es más importante, requiere personas: requiere personal, requiere suministros y equipo”.

Rutherford fue más directo: “Si, de repente, una enfermera se ocupa de siete pacientes con ventiladores como en Nueva York, la mortalidad puede ser astronómica”.

Las camas de UCI todavía están disponibles incluso en lugares muy afectados como el condado de Los Ángeles. Pero las unidades se están llenando rápidamente, ya que California registra números récord de nuevos casos diarios de coronavirus. Un recuento del Times condado por condado el lunes registró más de 34.000 nuevas infecciones reportadas el lunes, rompiendo el récord anterior de un solo día de 22.369 casos contabilizados el viernes.

California ha registrado más de 20.000 muertes acumuladas por COVID-19, un hito registrado el lunes por el rastreador de coronavirus del Times.

La capacidad de la UCI se ha reducido en varios lugares del condado de Los Ángeles, incluidos el Westside, el valle de San Gabriel y el sureste del condado de Los Ángeles. Entre las camas con personal y licencia, el domingo, Westside tenía ocho camas de UCI disponibles; el sureste del condado de Los Ángeles tenía siete y el valle de San Gabriel tenía solo tres.

Los trabajadores de la salud están siendo infectados por el virus a un ritmo nunca antes visto en esta pandemia. La semana pasada, hubo 1.745 nuevos casos de coronavirus entre los trabajadores de la salud en el condado de Los Ángeles, más del doble de lo que se informó la semana anterior.

“Es el número semanal más alto de trabajadores de la salud que dan positivo por COVID-19 que jamás hayamos reportado”, dijo Ferrer. “Y eso tiene un impacto tremendo en la capacidad en todo nuestro sistema de salud para cuidar a los enfermos”.

Otros sistemas de salud se han visto afectados por las enfermedades de los trabajadores o la exposición al virus. El Sistema de Salud de Mayo Clinic, que atiende a Minnesota, Wisconsin y Iowa, dijo el mes pasado que más de 1.500 de su personal estaban sin trabajar debido a un diagnóstico o exposición al virus, según Associated Press.

El Departamento de Salud Pública de California dijo el lunes que el Sur de California tiene una capacidad de UCI disponible del 10.9%, y el Valle de San Joaquín del 6.3%.

En oleadas anteriores de la pandemia, otras partes de California han podido ayudar a diferentes lugares afectados: San Francisco y el condado de San Diego, por ejemplo, aceptaron pacientes con COVID-19 del condado de Imperial a lo largo de la frontera mexicana. Eso no será igualmente posible ahora, con el Área de la Bahía ya en el límite de un aumento sin precedentes.

“Si nos encontramos en una situación en la que colectivamente no tomamos esto en serio, no tendremos la capacidad en otras partes del estado para ayudarnos realmente cuando las cosas se pongan difíciles”, dijo la Dra. Kirsten Bibbins-Domingo, presidenta del departamento de epidemiología y bioestadística de UC San Francisco.

En el condado de Santa Clara, la cantidad de camas de UCI llenas de pacientes con COVID-19 se ha triplicado en el último mes. El hogar de Silicon Valley tiene solo el 15% de sus camas de UCI disponibles.

“Desafortunadamente, estamos rompiendo récords todos los días”, dijo la Dra. Sara Cody, oficial de salud del condado de Santa Clara. “Muchos de nuestros hospitales ya han optado por cancelar cirugías electivas y otros procedimientos para poder atender la afluencia de pacientes con COVID”.

Los hospitales que están sobrecargados de pacientes críticamente enfermos intentan trasladarlos a otras instalaciones que puedan aceptarlos. “Pero, particularmente con los pacientes de cuidados críticos, existen desafíos adicionales al trasladar a los que están gravemente enfermos”, expuso Cody.

Con el continuo aumento de las infecciones, el número promedio de muertes diarias del condado de Los Ángeles podría aumentar en un 63%, de 40 decesos diarios en la actualidad a 65 defunciones diarias, dijo Ferrer. El condado de Los Ángeles ahora tiene un promedio de más de 8.000 nuevos casos de coronavirus por día durante la semana pasada, cuadruplicado en el último mes.

En todo el estado, los hospitales de California superaron los 10.000 pacientes con COVID-19 por primera vez. Eso es el doble de la cifra de hace menos de tres semanas.

A menos que las tendencias cambien, este aumento será diferente a las dos primeras oleadas que ya han resultado en miles de muertes en el condado de Los Ángeles. Ghaly proyectó la semana pasada que, según las tendencias, el condado de Los Ángeles se quedará sin camas de UCI antes de Navidad, una escasez que nunca ocurrió en las dos oleadas anteriores.

Un médico de un hospital público del condado de Los Ángeles dijo que, aunque actualmente hay recursos suficientes, se espera que pronto haya escasez de camas y personal dado el rápido aumento en el recuento de casos.

“Estamos en el límite en este momento y la dirección que tome ahora dependerá de la voluntad de la sociedad de intensificar y adherirse a las restricciones”, enfatizó el doctor.

El médico, que pidió no ser identificado porque no estaba autorizado para hablar en público, dijo que la oleada de verano era extremadamente difícil de sobrellevar debido a la avalancha de pacientes que ingresaban a los hospitales de todo el estado.

“A todos nos preocupa que este próximo aumento sea peor que eso”, manifestó el médico.

Para leer esta nota en inglés haga clic aquí

Anuncio