Apple inaugura su nueva tienda y espacio para eventos en el centro de L.A., un símbolo de sus ambiciones en Hollywood
El cine de Broadway que introdujo a los angelinos a las películas “habladas” hace casi un siglo abrirá sus puertas este jueves, en una era de entretenimiento muy diferente, como una soñada tienda Apple. El gigante tecnológico tiene la intención de que el espacio para venta minorista y eventos sea uno de los más destacados; un símbolo de fuerza creativa en Hollywood.
Los impulsores del centro de Los Ángeles esperan que el debut de la tienda de alto perfil inspire a otros minoristas a hacer lo propio en el centro de la ciudad, donde muchos negocios se vieron gravemente afectados por la pandemia, que robó la vida en las calles y mantuvo a la gente alejada de sus establecimientos.
El reformado cine es una versión mejorada y reimaginada del formato normal de tienda de Apple, destinada a mostrar las múltiples visiones de creación de contenido de la compañía: hay mucha tecnología para comprar, pero la empresa también planea sumar programas, clases y otros eventos que involucren a cineastas reconocidos, músicos y demás artistas.
La empresa evitó decir cuál fue el presupuesto de renovación del Tower Theatre, antiguamente abandonado, pero el cambio de imagen -evidentemente multimillonario- estuvo en proceso durante más de tres años e incluyó una minuciosa restauración de muchas de las características originales del edificio, como los murales del techo, con cielos salpicados de nubes etéreas.
El Tower Theatre era uno de los mejores cines de la ciudad cuando se inauguró, en 1927, para proyectar películas y cintas sonoras, y fue la sede del estreno en Los Ángeles de “The Jazz Singer”, protagonizada por Al Jolson.
El cine fue uno de los primeros edificios con aire acondicionado en la ciudad y originalmente lucía ventanas en el nivel subterráneo, para que los visitantes pudieran observar y maravillarse con el equipo de enfriamiento, de última generación.
Construido en un sitio pequeño para un cine, con capacidad para solo 900 personas, el edificio fue diseñado en estilo Renaissance Revival con elementos innovadores franceses, españoles, moriscos e italianos moldeados en terracota, según Los Angeles Conservancy. El cine cerró en 1988.
El equipo de diseño de Apple se basó en fotografías históricas y dibujos arquitectónicos, así como en modernos escáneres láser en 3D para la renovación, que incluyó actualizaciones antisísmicas. Apple llevó a cabo estudios de pintura forense “y literalmente respetó la historia” para revelar los detalles originales y los luminosos colores claros que le dieron al Tower Theater su belleza, precisó el arquitecto Doo Ho Lee, director de diseño de las tiendas minoristas de Apple.
Los trabajadores encontraron oro y ricos elementos de bronce detallados, así como piedra brillante y trabajos de yeso ornamentados, destacó Lee. Los artesanos restauraron, pintaron y pulieron cada superficie a mano.
Afuera, Apple creó una réplica de la torre del reloj, que resultó dañada y fue removida después del terremoto de Sylmar, en 1971. Los artesanos también recrearon el diseño de la marquesina de Broadway de 1927, esculpiendo a mano su escudo y detalles a partir de fotografías históricas.
“La hermosa entrada ahora está completamente restaurada a su gloria inicial”, destacó Lee. Los detalles notables incluyen una gran escalera con pasamanos de bronce, flanqueada por columnas corintias de mármol y rodeada por descansos en balcón, con una araña de cristal. “Tiene un sentido real de procesión y teatro dinámico cuando uno circula por el espacio”, dijo. Mirando hacia la entrada, los visitantes contemplan una vidriera que representa un patrón de flor de lis y una tira de celuloide.
Dentro del antiguo teatro se encuentra la principal zona de productos, rodeada por una visión de grandeza de la década de 1920, conjurada por el arquitecto S. Charles Lee para imitar la Ópera de París. Fue el primero de varios cines diseñados por Lee, quien también fue responsable del elaborado Los Angeles Theater.
Donde antes estaba la pantalla de cine hay ahora una pared de video, o video wall, enmarcada detrás del arco del proscenio y los balcones franceses, que ofrecen la mejor vista del interior de cinco pisos.
El Apple Tower Theatre se distingue de otras tiendas porque “es un edificio tan especial, y tiene enorme importancia en la industria del cine”, consideró Deirdre O’Brien, directora de venta minorista y personal de Apple.
“Está en el corazón de una ciudad famosa por su creatividad; realmente queremos aprovechar eso”, destacó. Apple tiene 25 tiendas en el área metropolitana de Los Ángeles.
La tienda en el Tower Theatre era “muy esperada” por los inversores del centro, que esperan un efecto dominó de su presunta popularidad, señaló el corredor de bienes raíces Derrick Moore, de CBRE.
Los negocios del centro, como tiendas y restaurantes, sufrieron más que los de otros nodos urbanos de la región durante el último año, porque dependían de los cientos de miles de oficinistas que eran sus clientes a diario pero que huyeron durante la pandemia -y, en su mayoría, siguen haciendo su trabajo en casa-. También se notó la ausencia de turistas y fans locales de los deportes y la música.
Las vacantes de edificios comerciales en el centro casi se duplicaron a 4.4% en el segundo trimestre, en comparación con el mismo período en 2020, precisó CBRE. Sin embargo, muchas tiendas, bares y restaurantes permanecen cerrados, incluso si sus propietarios siguen pagando la renta.
Aunque el proveedor de tarjetas de seguridad Kastle Systems estima que las oficinas en el área metropolitana de Los Ángeles estaban ocupadas en un 26% por trabajadores la semana pasada, la estimación de Moore es más cercana al 11% y consideró que ello podría no recuperarse hasta después del Día del Trabajo, cuando muchas empresas estadounidenses esperan volver más formalmente a sus edificios.
El tramo de Broadway cerca de Olympic Boulevard, donde se encuentra el antiguo cine, era uno de los más prometedores antes de la pandemia, con nuevos apartamentos y renovaciones de oficinas y tiendas históricas, expuso Moore.
El vecindario comenzó a mejorar cuando el Ace Hotel and Theater Complex abrió allí, en 2014, en el antiguo edificio de United Artists, y se convirtió en un destino popular para alojamiento y entretenimiento.
El Broadway Trade Center, de 1.1 millones de pies cuadrados, frente al Tower Theatre, será remodelado y reconvertido en un complejo de oficinas, hotel y comercio, pero sigue sin terminar.
Los vecinos incluyen una zapatería Vans y un Urban Outfitters, que ocupa el antiguo Rialto Theatre. También al otro lado de la calle hay un edificio de oficinas de 1915, revestido de mármol blanco, que fue restaurado pero aún no tiene ocupantes.
La decisión de Apple de invertir allí como inquilino es una validación de su ubicación de bienes raíces, consideró Moore, quizá aportando suficiente prestigio para persuadir a otros minoristas de alto nivel para que se unan al centro de la ciudad. “La importancia de la marca no puede subestimarse”, destacó.
El edificio del cine es propiedad de la familia Delijani, también dueña del Los Angeles Theatre y de otros dos cines históricos de Broadway.
La empresa con sede en Cupertino, California, ha aumentado rápidamente su presencia en el área de Los Ángeles en los últimos años, a medida que su Apple TV+ se convirtió en un competidor de otros servicios de transmisión de entretenimiento, como Netflix y Amazon Prime Video. Apple anunció en abril que aumentaría sus equipos en Culver City a más de 3.000 empleados para 2026 y expandiría su campus allí. La compañía emplea ahora a unos 9.000 trabajadores en el área de Los Ángeles, incluidos casi 100 en la flamante tienda.
La tienda Apple del centro y otra en Beijing serán las primeras en lanzar Apple Creative Studios, que la empresa llama “una iniciativa global para jóvenes creativos subrepresentados”, la cual busca darle acceso a equipos tecnológicos, orientación y la oportunidad de mostrar sus creaciones.
El programa Today at Apple de la compañía también ofrecerá sesiones públicas en las tiendas en el Tower Theatre y sesiones virtuales organizadas por Creative Studios, con artistas como la fotógrafa y cineasta Bethany Mollenkof, el rapero y productor D Smoke, el cantautor Syd y la violonchelista y cantante Kelsey Lu.
Jessica Lall, impulsora del centro de la ciudad, espera que estos programas y la presencia de Apple amplíen el atractivo de la zona a medida que la gente regrese en busca de su entorno urbano, después de lo que describió como “un año realmente difícil para el centro”.
“Uno va allí para conectar con otros, para entretenerse, para vivir experiencias culturales”, afirmó Lall, presidenta del grupo de defensa empresarial Central City Association of L.A. Con el levantamiento de las restricciones pandémicas, “estamos viendo cuán rápido vuelve la gente y qué tan emocionada está. Es visible y palpable”.
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