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Columna: Estos trabajadores mal pagados están en huelga por un mejor salario en una subsidiaria de una corporación de $4 mil millones

Gente marcha con pancartas.
Los trabajadores de la fábrica de Jon Donaire Desserts en Santa Fe Springs, quienes han estado en huelga desde el 3 de noviembre, protestan frente a la empresa el lunes.
(Myung J. Chun / Los Angeles Times)
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Cristina Lujan, de 46 años, ha trabajado en la línea de la planta de Jon Donaire Desserts en Santa Fe Springs durante 19 años, casi la mitad de su vida, haciendo y decorando pasteles para cadenas de comida como Ralphs, Walmart y Baskin-Robbins.

Sin embargo, desde el 3 de noviembre, ha estado participando en un piquete de huelga fuera de la planta, en protesta por una oferta de contrato de la empresa matriz de Donaire, Rich Products, que implica un aumento de $1.60 por hora durante tres años, 50 centavos por hora en el primer año y 55 centavos en cada uno de los dos siguientes.

Ella y sus 165 compañeros sindicalizados trabajaron durante la pandemia, excepto durante dos semanas cuando la empresa cerró, aunque se les pidió que usaran el tiempo de vacaciones o los días de enfermedad para seguir recibiendo dinero.

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“Todo está más caro, ¿y creen que saldremos adelante con un aumento de 50 centavos?”

— Cristina Lujan, trabajadora huelguista de Jon Donaire

Los trabajadores, en su mayoría mujeres latinas, recibieron un “pago de héroe”, una adición de aproximadamente $2 por hora a su salario estándar de alrededor de $17 por hora, durante un período de seis semanas que finalizó en junio.

Las condiciones laborales que ni siquiera han estado sobre la mesa en las negociaciones contractuales incluyen el hábito de la gerencia de cargar a los trabajadores con asignaciones de horas extras obligatorias, minutos después del final de sus turnos, lo que les hace casi imposible programar citas médicas u organizar el cuidado de los niños.

El tema principal de las negociaciones contractuales son los salarios. “Sentimos que nos están pagando mal”, me comentó Lujan. Los trabajadores han pedido aumentos de $3 por hora durante la vigencia del contrato.

Justo antes de Navidad, la compañía ofreció un aumento de $4.10 por hora durante tres años, pero sustituiría el plan de salud existente patrocinado por el sindicato con uno para los trabajadores considerado inferior. Los empleados lo rechazaron abrumadoramente.

No hay más conversaciones programadas, según el sindicato y Rich Products, con sede en Búfalo.

La huelga ha comenzado a obtener apoyo político.

Los cinco supervisores del condado de Los Ángeles escribieron recientemente a Rich en apoyo de los huelguistas, lo que llevó a la empresa a responder con una carta en la que decía que estaba “muy decepcionada” por el resultado de la última votación.

La compañía agregó que, dado que varios reclamos y reconvenciones entre la empresa y el sindicato están ante la Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB por sus siglas en inglés), “los funcionarios públicos no deberían, por lo tanto, tomar partido”. (Sin embargo, la NLRB es una agencia federal, no un organismo a nivel de condado).

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Dic. 15, 2021

La huelga de Donaire también está comenzando a recibir atención nacional. Los senadores Alex Padilla (demócrata de California) y Bernie Sanders (independiente de Vermont) junto con otros cinco senadores demócratas, escribieron el martes a Bob Rich Jr., presidente de la empresa familiar Rich Products, expresando su apoyo a los huelguistas.

Los senadores instaron a Rich a “llegar a un acuerdo lo antes posible sobre un contrato que sea justo y que incluya buenos salarios, beneficios decentes, horarios confiables y condiciones de trabajo seguras”. Los objetivos de los trabajadores, escribieron, “no son radicales”.

La empresa es plenamente consciente de que la pintan con un corazón de piedra en el conflicto laboral.

“Hay una narrativa muy popular que trata de convertir a las corporaciones que han creado muchos empleos en los malos de una negociación”, indica Ed Moore, director de recursos humanos de Rich.

Moore señala que la huelga de Donaire es la primera en los 77 años de historia de la empresa, lo que, según la compañía, demuestra que sus prácticas laborales son justas. Más de 50 miembros del sindicato han cruzado la línea de piquete, al igual que Teamsters que realizan mantenimiento de los equipos en turnos nocturnos.

“Hemos trabajado arduamente para crear un firme compromiso de tratar a nuestros trabajadores, clientes y comunidades de la misma manera, como familia”, comentó a los supervisores Jonathan A. Dandes, oficial de asuntos gubernamentales de Rich, en la carta de la compañía.

Dicho esto, Rich Products ha adoptado un enfoque firmemente utilitario en el tema de los salarios en Donaire.

El Sindicato Internacional de Trabajadores de Panadería, Confitería, Tabaco y Molineros de Granos, que representa a los trabajadores de Donaire, ha notado que los empleados de una planta de Rich en Murfreesboro, Tennessee, ganan un promedio de $6 por hora más que los de Donaire, a pesar de que el costo de la vida es mayor en el sur de California.

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Oct. 30, 2021

“La forma en que determinamos las tarifas salariales es observar el mercado laboral local y hacer una evaluación de lo que debemos pagar para poder atraer y retener empleados de calidad”, me comentó Moore.

“Cada mercado es diferente”, agregó. “No necesariamente se correlaciona con el costo de vida. En Santa Fe Springs, nuestros salarios antes de la negociación estaban en el nivel, o por encima, del mercado, tal como lo entendemos”.

Señaló que le pidió al sindicato internacional datos que demostraran que “nuestros salarios no eran competitivos en el mercado”, pero “nunca nos los presentaron”.

La huelga de Donaire es parte de lo que parece un despertar del activismo laboral. Parte de esa tendencia es una mayor conciencia de las condiciones de trabajo y las presiones económicas sobre los empleados en el extremo inferior del espectro salarial.

El martes, por ejemplo, un informe de la Mesa Redonda Económica de Los Ángeles documentó que más de 3 de cada 4 empleados del conglomerado de comestibles Krogers cumplieron con los estándares gubernamentales de inseguridad alimentaria.

Eso significa que “no pueden permitirse alimentos balanceados, así como saludables” y “se quedan sin alimentos antes de fin de mes, se saltan comidas y a veces tienen hambre”, según el informe, que se basó en encuestas de casi 37.000 trabajadores de Kroger en el sur de California, Colorado y el área de Seattle.

La “tasa excepcionalmente alta de inseguridad alimentaria de los trabajadores es siete veces mayor que el promedio de Estados Unidos”, observó el informe. Alrededor del 14% de los trabajadores encuestados señalaron que habían recurrido a cupones de alimentos o a un banco comunitario de comida.

El sindicato de trabajadores de panadería se ha convertido en una fuerza agresiva para reparar años de deterioro de la calidad de vida de los empleados con salarios bajos.

Durante el último año, el sindicato obtuvo victorias contractuales, como después de una huelga de casi cinco meses donde participaron 1.400 trabajadores en las plantas de cereales Kellogg; tras una huelga de casi cinco semanas con la participación de 1.000 empleados en las plantas de Mondelez/Nabisco; y luego de una huelga de 20 días con la participación de más de 600 trabajadores de Frito-Lay.

Esos son solo los empleadores más obstinados, puntualiza David Woods, secretario-tesorero del sindicato.

“Hemos negociado docenas de contratos este año con otros empresarios que reconocieron que la escasez de mano de obra en este país ha creado oportunidades para que los trabajadores obtengan más y eviten un conflicto laboral”, me explicó Woods. “Algunas empresas miraban hacia atrás como si fueran tiempos normales. No son tiempos normales y los empleados simplemente están hartos”.

La huelga de Donaire subraya el abismo cada vez mayor que existe entre la suite corporativa y la planta de producción. Rich Products es una empresa privada que registra alrededor de $4 mil millones en ventas anuales, principalmente al proporcionar productos de panadería y confitería a cadenas de supermercados como artículos de marca privada.

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Nov. 16, 2021

El presidente de la compañía, Bob Rich Jr., ocupa el puesto 367 en el Índice de Multimillonarios de Bloomberg con un valor neto estimado de $7.37 mil millones, y el 622 en la lista de multimillonarios de Forbes, con $4.6 mil millones.

“Jon Donaire personifica el tipo de avaricia corporativa que está teniendo lugar en este país”, me comentó Sanders en una entrevista. “La mayoría de los empleados son mujeres latinas, que laboran por salarios extremadamente bajos y trabajan muy duro durante la pandemia. Por qué alguien que vale más de $7 mil millones y se ha vuelto $2 mil millones más rico durante la pandemia quiere reducir las necesidades de sus trabajadores, quienes ya están batallando, va más allá de mi comprensión”.

(Bloomberg estima que el patrimonio neto de Rich era de $5.420 millones de dólares a mediados de marzo de 2020, al comienzo de la pandemia).

Puede ser tentador pensar que la producción de alimentos es menos exigente que las industrias pesadas por excelencia, como la fabricación de automóviles. Eso sería un error.

Los trabajadores están de pie durante su turno de trabajo, causando ciática y otros problemas de espalda, realizando el tipo de tareas repetitivas que conducen a los dolores del síndrome del túnel carpiano, mientras la línea de producción de pasteles de helado pasa por delante de ellos a un ritmo que va desde 13 a 38 pasteles por minuto.

“Con dolores y calambres en los dedos, artritis, así como dolores de espalda, no les importaba”, señala la trabajadora Michele S. González desde el piquete de huelga, refiriéndose a la gerencia de la planta, en un video publicado en línea. “Simplemente dijeron: ‘No, tenemos que mantener la máquina en marcha’”.

(La compañía detalla que los problemas no económicos no están sobre la mesa).

Lo que se suma al estrés es aquello que los trabajadores describen como un sistema de puntos que penaliza a los empleados por tomarse días libres, incluso por motivos médicos, o por abandonar un turno antes de tiempo. Siete puntos en el transcurso de un año ameritan la destitución.

Los trabajadores de Donaire han señalado que estas condiciones, así como el pago que se ubica dentro de un promedio de mercado, ya no serán suficientes. Durante la pandemia, han hecho un esfuerzo adicional para sus empleadores. A cambio, sienten que están siendo engañados. Un aumento de un dólar por hora le costaría a Rich $165.000 al año, informó el funcionario sindical Nate Zeff.

“Todo está más caro”, declaró Lujan desde el piquete, “¿y creen que saldremos adelante con un aumento de 50 centavos?”.

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