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Un sindicato de Hollywood intentó promover la diversidad, pero las cosas fueron más complicadas de lo previsto

A woman in a colorful pantsuit stands between racks filled with costumes.
La vestuarista y miembro de IATSE Local 705, Brittny Chapman, rodeada de las prendas para una producción, en Los Ángeles.
(Genaro Molina / Los Angeles Times)

Los figurantes del cine crearon un comité de diversidad para ayudar a los miembros de color. Pero los miembros del comité acabaron dimitiendo por frustración.

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Un miércoles por la tarde, nueve días después del asesinato de George Floyd, Brittny Chapman se sentó frente a la cámara de su iPad en su apartamento de East Hollywood y pulsó “grabar”.

Con anteojos redondos de montura dorada enmarcando su rostro y una camiseta negra con la leyenda “Las mujeres negras son bienvenidas”, la vestuarista de 36 años reprendió la respuesta ausente de su sindicato a las protestas mundiales tras la muerte de Floyd, en 2020.

Estudios como Netflix y Walt Disney habían prometido apoyo financiero para mejorar la vida de las personas de color y la justicia social. La sede de Local 705 de Vestuaristas de Películas -al que pertenece Chapman-, que representa a miles de trabajadores a cargo del guardarropa para filmaciones en Hollywood, había compartido tuits del gremio matriz, IATSE, expresando su solidaridad con los afroamericanos, pero por lo demás se había quedado callado, se quejó la mujer.

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En el video de Instagram, que fue visto miles de veces, dijo: “No creo que entiendan lo que enfrento todos los días cuando estoy en la locación, y eso es alarmante. En lugar de apoyarme, tal vez descubran formas en que puedan actuar por todos nosotros, quizás creando crear programas para que nuestra comunidad esté más presente en los sindicatos, porque realmente me gustaría vernos a menudo detrás de la cámara”.

Dos semanas después, Chapman fue convocada para ayudar a dirigir un nuevo comité de inclusión para el gremio Local 705. El grupo estableció metas nobles y reclutó a consultores de diversidad.

Pero solo cuatro meses más tarde, ella y los tres copresidentes afroamericanos del comité renunciaron en protesta, cuestionando la sinceridad del gremio para lograr la meta de que existan una gran variedad de grupos culturales y étnicos allí.

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Ago. 18, 2021

La historia de lo que sucedió cuando los vestuaristas instigaron la reforma es una más acerca de las frustraciones y las barreras al progreso que existen en muchos sindicatos de Hollywood, sin embargo, tiene destellos de esperanza.

El año pasado, los miembros eligieron al primer presidente negro del local y su junta directiva más diversa.

El expresidente del Local 705, Nickolaus Brown, admitió que podrían haber trabajado mejor para abordar las preocupaciones de los integrantes del comité, pero que la sede particular había dado unos primeros pasos importantes. “Esto está tan arraigado en el tejido de esta industria y este gremio, que no se solucionará en tres meses”, señaló.“Demandará mucho trabajo, gran enfoque y cuidado genuinos hacer esos cambios”.

Tras las protestas por el asesinato de Floyd, los principales estudios enfrentaron un mayor escrutinio de su compromiso con la diversidad, la equidad y la inclusión. Muchos anunciaron iniciativas para contratar a más personas de grupos marginados en la realización de cine y televisión. Sin embargo, los equipos que producen estos contenidos siguen siendo abrumadoramente blancos, y se sienten los efectos de la subrepresentación crónica.

“He estado en locaciones y en producciones; por lo general es un entorno completamente blanco”, comentó Darnell Hunt, profesor y académico de ciencias sociales en UCLA. “Esto refleja una cultura que ha excluido a las personas de color. Hay mejoras en la diversidad frente a la cámara, pero no vemos el mismo esfuerzo por hacerlo detrás de la escena”.

La Alianza Internacional de Empleados de Escenarios Teatrales (IATSE), el sindicato que aglutina al Local 705 y otros trabajadores por debajo de la línea, pasó gran parte del año pasado en tensas negociaciones sobre un nuevo contrato con los estudios de Hollywood.

Como parte de un acuerdo para evitar una huelga, los productores acordaron hacer del Día de Martin Luther King Jr. un feriado pagado y formar un programa de pasantías para trabajadores con poca representación.

El Local 705 ya se había enfrentado al racismo en sus filas. En 2019, IATSE expulsó a una integrante blanca después de que la cámara la captara en una diatriba cargada de insultos étnicos, en un CVS de Eagle Rock.

Chapman se unió al Local 705 hace seis años, después de mudarse a Los Ángeles procedente de Nueva York, donde se graduó de la Universidad Pace con una licenciatura en Comunicaciones y Sociología. La oriunda de Filadelfia experimentó el racismo en las locaciones mucho antes de publicar su apasionado video, el verano pasado. “No hay ninguna razón por la que deba detener mi automóvil en un escenario [de película] para que la seguridad me pregunte qué estoy haciendo allí”, relató en la grabación.

A costumer pushes a rack of clothes.
Brittny Chapman traslada el vestuario en la locación de una producción, en Los Ángeles.
(Genaro Molina / Los Angeles Times)

Los líderes del Local 705 trataron de abordar rápidamente las críticas. El sindicato declaró en las redes sociales que no toleraba el racismo y que se adhiere a la diversidad.

Luego, Brown, el presidente de la sede, le pidió a Chapman que lidereara un nuevo comité, y también invitó a Lynn Ollie, afiliada a 705 y diseñadora de vestuario, a ser copresidenta.

A su vez, ambas invitaron a otros colegas como copresidentes: Laura Wong, con experiencia en comités sindicales, y Edward García, un joven vestuarista que tenía sus propias razones para involucrarse.

García, de 29 años, relató que el personal de seguridad en tiendas de lujo lo ha seguido varias veces debido a su apariencia: es joven, latino y está tatuado. Conduce un Chevy Trax, a menudo descrito como un auto de “mamá suburbana”, en parte para evitar levantar sospechas cuando compra disfraces en vecindarios acomodados.

Mientras trabajaba en un programa de televisión, en 2018, relató, el diseñador de vestuario al que reportaba le arrojaba la ropa y lo llamaba “pequeño moreno”. “Te ponen en esas situaciones y piensas que así son las cosas”, afirmó García. “En este punto de mi carrera, nunca dejaría que nadie me hablara así”.

El comité de diversidad tuvo su primera reunión pública el 28 de junio de 2020. Durante todo el verano, el gremio local mostró su apoyo a los grupos marginados, promoviendo el uso de las marcas Juneteenth y Black, cuyos propietarios son afroamericanos, para que los vestuaristas adquieran allí sus prendas.

En sus primeras semanas, el naciente comité atrajo a 50 miembros y publicó una lista de objetivos que fueron respaldados por la junta ejecutiva, un grupo de funcionarios electos.

Incluso antes de que el grupo se reuniera por primera vez, el 15 de junio de 2020, el local posteó en Instagram que la junta había aprobado financiar la lucha contra dos clases de prejuicios inconscientes, y enumeró sus propósitos, incluida la formación de grupos de tutoría, la presentación de diversos integrantes a través de las redes sociales y la creación de espacios seguros o formas para plantear inquietudes laborales y gremiales.

Estas metas incluían contratar a un consultor de diversidad para el local, restablecer una enmienda contra el acoso, que los miembros habían votado para descartar en abril de 2019, y realizar una encuesta anónima sobre la demografía racial de los afiliados, un primer paso clave en cualquier intento de reforma.

Demoras en la encuesta de afiliados

Pero los retrasos en el sondeo frustraron a Chapman. El sindicato contrató a una consultora en julio para redactar las preguntas, que se enviaron a los miembros hasta el 10 de octubre, comentó la mujer. Los líderes sindicales, agregó, ignoraron sus correos electrónicos para preguntar por la encuesta durante ese periodo.

Otro problema para ella y demás integrantes del comité fue que el liderazgo del sindicato rechazó una solicitud para traducir sus materiales al español y demás idiomas. Local 705 representa a muchos trabajadores de cuello azul, como los vestuaristas y costureros, y muchos agremiados son inmigrantes de primera o segunda generación.

“La respuesta fue negativa porque era demasiado difícil”, relató Adam West, exrepresentante de campo del Local 705 que ahora es su agente comercial. “Estamos tratando de remediar eso y seguir adelante con más traducciones”.

Algunos integrantes del comité enfrentaron acoso. Uno de ellos, que pidió no ser identificado por temor a represalias, expresó que un compañero publicó mensajes en las redes sociales sugiriendo que la institución enfrentaba racismo inverso.

Los voluntarios también se opusieron a la solicitud de convocar a trabajadores diversos para los equipos de realización. García recordó que un mes después de que se formara el comité, un miembro del equipo de un programa de televisión ambientado en Afganistán quería ayuda para encontrar un vestuarista de ascendencia afgana. No se solicitaba ninguna habilidad o conocimiento específico. “Hacer que una nacionalidad o etnia específica sea el único requisito previo para la contratación es un problema en sí”, comentó. “Según esta práctica, es posible que solo me contraten para vestir emisiones que involucren a Los Ángeles o algo específico del país de origen de mi familia”.

García, quien es afroindígena, cubano y mexicano, y creció en el Valle de San Gabriel y Santa Clarita, es en gran parte autodidacta y se inició en el mundo del vestuario trabajando con celebridades.

Al principio, relató, estaba feliz por su papel en el comité de diversidad, pero pronto se sintió agobiado por tener que explicar repetidamente lo que soportan los vestuaristas de color. Recordó cómo en un programa de televisión -que se negó a nombrar por temor a represalias- un supervisor le dijo que no debía hablar español porque incomodaba al equipo. “Es agotador tener que revivir constantemente los traumas que enfrentamos siendo personas afrodescendientes en la industria”, destacó García. “Todos los días trato de convencer a la gente de que esto es real, y a la vez lo experimento de forma cotidiana”.

Wong, otra de las cuatro copresidentas, sintió su rol como algo simbólico. “Era tóxico, tuve que renunciar”, afirmó la mujer, que trabaja en el vestuario de programas como “Star Trek: Picard”. También compartió sus propias experiencias con el racismo en las locaciones en un ensayo publicado en LAist el año pasado. “Es realmente difícil ofrecer tu limitado tiempo libre como voluntaria, para una tarea en la que no tienes apoyo”, agregó. “Me convertí en el símbolo asiático de todos los problemas de diversidad y sentí que me pedían que hablara en nombre de todos los orientales”.

Las tensiones llegaron a un punto crítico en septiembre de 2020, cuando Chapman y sus colegas hablaron de esta preocupación ante la junta ejecutiva.

“Después de expresar abiertamente que sentíamos que estábamos sobrecargados con mucho trabajo y que la junta ejecutiva no estaba siendo lo suficientemente activa, alguien nos dijo que ‘lamentamos que nuestros sentimientos hayan sido heridos’”, dijo Chapman. “Esa declaración me impactó y consolidó que ya no quería seguir apareciendo y laborando para ayudar a desmantelar un sistema que nunca construí y del que he sido víctima repetidamente”.

Los cuatro copresidentes renunciaron en octubre y finalmente fueron reemplazados por otros miembros del comité.

“A pesar de los persistentes llamados a la acción, el liderazgo del Local 705 continúa mostrando poca inversión para cuestionar o derribar los sistemas anticuados y racistas”, escribieron los cuatro copresidentes en un correo electrónico dirigido a la junta ejecutiva. “El trabajo que se ha realizado en varios momentos se ha sentido forzado, actuado, poco sincero y tratado como un inconveniente. Después de denunciar la inacción o la mala conducta, hemos sido ignorados o hemos experimentado reacciones violentas y represalias”. También agregaron que planeaban permanecer en funciones hasta realizada la encuesta y que esperaban que el informe resultante sentara las bases para un cambio sistémico en la sede local del gremio.

Pero pasó un año, hasta octubre de 2021, antes de que los resultados del sondeo de diversidad fueran compartidos con los miembros, un retraso que los funcionarios sindicales atribuyeron a la pandemia, las elecciones locales, los problemas técnicos y las negociaciones contractuales.

La encuesta, realizada por la firma Twenty45 Consulting, tuvo una baja tasa de respuesta. Solo participaron casi 498 de los 2.400 afiliados al gremio. Los resultados subrayaron la falta de diversidad del sindicato: el 72% de los entrevistados se identificaron como blancos.

Solo el 14% se declaró como latino o hispano -en comparación con casi el 50% que forman la población del condado de Los Ángeles-, el 11% como asiático, el 9% como negro, el 5% como nativo americano o de Alaska y el 4% de alguna otra raza o etnia. Casi un 2% se negó a identificarse.

Brown, quien ocupaba su segundo mandato como presidente de 705, también un rol voluntario, admitió que no estaba completamente enfocado en la crisis que enfrentan sus colegas no blancos, citando razones personales y la pandemia. “Mi mejor amigo murió dos días después del asesinato de George Floyd; estaba impactado”, reconoció. “No quiero disculparme, pero mi cabeza estaba en ese tema”.

“Los afiliados estaban realmente molestos y preocupados por el COVID-19 y lo que significaba para ellos volver al trabajo. Ese fue nuestro enfoque principal”, añadió. “¿Estoy decepcionado por nuestra respuesta, o mejor dicho por la falta de ella? Absolutamente. ¿Intentamos dar un paso adelante e hicimos todo lo posible para lograr un cambio positivo? Realicé mi mejor esfuerzo”.

Brown comentó que el sindicato, además de establecer rápidamente el comité de diversidad en junio de 2020, creó un puesto en la junta ejecutiva para un defensor de la inclusión. El local también reclutó a integrantes de color a través de un programa de divulgación en las escuelas de la zona. Cuando los copresidentes renunciaron, el gremio contrató a una persona asalariada para ayudar a las comisiones a hacer su trabajo, relató.

Parte de la responsabilidad también recae en los productores, comentó Brown, y señaló la ausencia de capacitación obligatoria para los equipos sobre el racismo.

“Si crean una clase para enseñar a todos sobre el COVID-19, sucede en un tiempo récord; pero el racismo es endémico en esta industria, y ¿cómo no tenemos una sesión sobre eso y las microagresiones?”, se preguntó. “Todos nosotros, cada local, tenemos trabajo que hacer, pero también los productores”.

Un futuro mejor

Column One

A showcase for compelling storytelling from the Los Angeles Times

A pesar de los contratiempos, se incorporaron otros afiliados para reemplazar a Chapman, Ollie, García y Wong. El trabajo del comité continuó y provocó un cambio aún mayor en el sindicato: la elección de su junta directiva más diversa.

Ariel Goodman-Weston fue elegida como la primera presidenta negra del sindicato en junio de 2021, reemplazando a Brown, quien optó por no intentar otro mandato.

Goodman-Weston, que había aceptado servir como copresidenta del comité de diversidad, remarcó que entendía las frustraciones de sus colegas. “No siempre tiene que ser igual para las personas involucradas en el trabajo de crear equidad y diversidad en nuestro local”, afirmó.

La integrante de 38 años se inspiró para postularse como presidenta gracias al trabajo en el comité de diversidad.

“Lo que me di cuenta fue que había personas que querían dar un paso adelante, ciertamente personas de color”, dijo. “Aprecié cómo la junta ejecutiva anterior tuvo el instinto de crear el comité [de diversidad]”.

Otra incorporación a la junta directiva fue García.

A man with an artfully tattooed arm stands on a balcony.
Edward García camina hacia el balcón de su departamento, después de trabajar un turno de 12 horas en locación.
(Jason Armond / Los Angeles Times)

También citó su experiencia en el comité como un impulso para postularse para un puesto en la junta, para el cual fue nominado, convirtiéndose en uno de los miembros ejecutivos latinos más jóvenes de la historia en 705. “Rápidamente entendí que, si quería crear un cambio dentro de mi sindicato, entonces debería ocupar un puesto en el directorio”, remarcó. “Ahí es donde va a ocurrir la verdadera transformación”.

García espera que haya mayor diversidad el gremio local. “Me gustaría ver un departamento de vestuaristas que refleje el mundo real en el que vivimos”, reconoció.

West, el exrepresentante de campo, también fue elegido como agente comercial del sindicato.

Muchos de los objetivos del comité de diversidad se lograron en el último año, incluidas capacitaciones sobre prejuicios inconscientes para los miembros y la creación de un sistema en el que cualquier persona puede plantear inquietudes sobre discriminación de manera confidencial.

El local también restableció una enmienda contra la intimidación y celebró una asamblea pública para discutirla, así como el acoso en el lugar de trabajo.

La comisión todavía debe llenar el puesto para un defensor de la diversidad, y los planes de llegada comunitaria se han visto obstaculizados por la pandemia, remarcó West. “Al Local 705 le apasiona tanto este tema, y está tan comprometido con él, que siempre parece que estamos atrasados”, señaló. “Sin embargo, en muchos sentidos, creo que en realidad estamos liderando el camino hacia eso que todos deberían estar haciendo en este momento”.

Después de la formación del comité de diversidad 705, IATSE, el sindicato matriz, reclutó a Chapman para colaborar en las iniciativas de ese tipo en varias sedes. En 2020, ella también lanzó su propia organización sin fines de lucro llamada Fighting for African American and Black Rights in Costumes (FABRIC) para brindar redes, educación y apoyo. “En retrospectiva, todo valió la pena para mí”, reconoció Chapman. “Las personas que normalmente no querían interactuar con el gremio local, por sentirse defraudadas o privadas de sus derechos, están realmente dispuestas a ejercer su poder ahora dentro de nuestra sede y hacer muchos cambios progresistas”.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí.

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