Crucero con pasajeros con Coronavirus a bordo, se dirige a California para cuarentena

Se esperaba que los pasajeros estadounidenses evacuados de un crucero en el que se han diagnosticado 355 personas con el coronavirus fueran transportados en un vuelo fletado a una base militar de California el domingo.

El Departamento de Estado fletó vuelos para transportar a ciudadanos estadounidenses desde el Diamond Princess, que está atracado en las afueras de Yokohama desde el 3 de febrero, a la base aérea de Travis en el condado de Solano, anunciaron las autoridades.

Hay unos 400 ciudadanos estadounidenses a bordo del barco, dijeron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, pero aún no se sabe si todos ellos han decidido regresar.

Se esperaba que los vuelos llegaran a Japón el domingo para recoger a los pasajeros antes de partir hacia California. Algunos de ellos se quedarán en la Base Aérea de Travis, uniéndose a las 234 personas que ya están en cuarentena allí después de llegar en vuelos anteriores de evacuación, que aterrizaron el 5 y el 7 de febrero, dijeron los funcionarios. Otros pasajeros continuarán a la Base Conjunta San Antonio-Lackland en Texas, dijo el CDC en un comunicado de prensa.

El Diamond Princess zarpó el 20 de enero y fue puesto en cuarentena por las autoridades japonesas el 5 de febrero después de que un pasajero que partió del crucero en Hong Kong dio positivo a la prueba del coronavirus. Esa cuarentena fue establecida para continuar hasta el 19 de febrero.

Pero los evacuados del crucero que lleguen a las dos bases militares estadounidenses deberán someterse a una segunda cuarentena de 14 días supervisada por el CDC, dijeron las autoridades. Serán examinados para detectar síntomas antes de abandonar el barco y antes de abordar los vuelos.

No se permitirá a ningún pasajero que muestre síntomas subir a los aviones, dijo la embajada de EE.UU en Tokio. También serán revisados a su llegada a EE.UU y alojados por separado de las personas que ya están en cuarentena en las bases, manifestaron los funcionarios.

“Entendemos que esto es frustrante, pero estas medidas son consistentes con las cuidadosas políticas que hemos instituido para limitar la potencial propagación de la enfermedad”, dijo la embajada de EE.UU en Tokio en una carta enviada a los pasajeros de los cruceros el sábado.

Hasta ahora, no se ha informado de ningún resultado positivo de coronavirus entre los que están en cuarentena en Travis; se ha registrado un caso entre los que se encuentran en cuarentena en Lackland. El virus ha matado a más de 1.600 personas e infectado a más de 68.000 desde que fue descubierto en Wuhan, China, a finales de diciembre.

Travis es una de las tres bases militares de California que el Departamento de Defensa ha designado como sitio para albergar a los evacuados por coronavirus que regresan. Las otras son la Estación Aérea de la Infantería de Marina Miramar en el condado de San Diego, donde actualmente están en cuarentena 232 personas, y la Base de la Reserva Aérea March en el condado de Riverside.

A unas 195 personas se les permitió salir de allí el martes después de terminar una cuarentena de 14 días, pero se esperaba que otras dos que llegaron más tarde se mantuvieran allí al menos hasta el domingo.

El movimiento para transportar a los pasajeros del crucero americano llegó cuando el número de casos de coronavirus a bordo del Diamond Princess continuó creciendo durante el fin de semana, con 67 nuevos diagnósticos el sábado, y el gobierno de EE.UU emitió una recomendación para que todos los pasajeros americanos y los miembros de la tripulación fueran evacuados.

“Estamos profundamente agradecidos a la línea de cruceros y al gobierno de Japón por trabajar diligentemente para contener y controlar la propagación de la enfermedad”, decía la carta de la embajada de Estados Unidos.

“Sin embargo, para cumplir con las responsabilidades de nuestro gobierno hacia los ciudadanos estadounidenses bajo nuestras reglas y prácticas, así como para reducir la carga en el sistema de salud japonés, el gobierno de EE.UU recomienda, por precaución, que los ciudadanos estadounidenses desembarquen y regresen a Estados Unidos para un mayor control”.

Los 3,700 pasajeros y miembros de la tripulación a bordo del Diamond Princess incluyen a dos residentes de Santa Clarita, Carl Goldman y su esposa, Jeri Seratti-Goldman. La pareja es dueña de la estación de radio KHTS y han estado documentando sus experiencias en un diario en el sitio web de la estación.

Muchos de los mensajes han sido ligeros, pero el sábado, Carl Goldman escribió que uno de sus compañeros de viaje había sido diagnosticado con el virus COVID-19.

“Es un día triste a bordo del Diamond Princess”, escribió. “No hay bromas”.

La mujer, Jerri Jorgenson, y su marido, Mark, estaban confinados en el camarote contiguo al de los Goldman, y las dos parejas habían abierto un tabique que separaba sus balcones para poder moverse libremente entre las dos unidades durante la cuarentena, escribió Carl Goldman.

“Después de ver una película, los cuatro nos tomamos la temperatura. Jerri tuvo fiebre”, escribió. “Por la mañana, ella todavía tenía temperatura alta. Mientras Mark y Jerri se preparaban para llamar al hospital del barco, los funcionarios de salud japoneses llamaron a su puerta. Estaban vestidos con trajes para materiales peligrosos”.

Relató que le entregaron a Mark Jorgenson una carta diciendo que su esposa había dado positivo en la prueba del virus y dijo que tenía una hora para empacar una pequeña bolsa. La llevaron en ambulancia a un hospital a unas cuatro horas de distancia en Fukushima, donde no se le permitió a su marido acompañarla, escribió Goldman.

Goldman, su esposa y Mark Jorgenson planean volver a EE.UU en uno de los vuelos de evacuación y someterse a una segunda cuarentena en una de las bases militares, escribió Goldman.

“No tenemos claro lo que el mañana traerá”, escribió. “Estamos sacudidos y devastados por haber sido separados de nuestro amigo”.

Los funcionarios de salud dicen que el virus COVID-19 sigue siendo de bajo riesgo para el público americano en general. Sólo se han diagnosticado 15 casos en EE.UU: ocho en California, dos en Illinois y uno en Arizona, Massachusetts, Texas, Washington y Wisconsin.

Todos los pacientes habían viajado recientemente a la China continental o, en dos casos, habían tenido un contacto cercano con alguien que lo hizo. Por lo menos tres de los casos eran de personas que habían llegado recientemente en un vuelo de evacuación desde Wuhan.

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