California supera los 900.000 casos de coronavirus; el condado de Los Ángeles se acerca a los 300.000

El número de casos confirmados de coronavirus en California superó los 900.000 el sábado, y el total de muertes relacionadas superó las 17.300, informaron funcionarios de salud pública.

En los 58 condados del estado, el condado de Los Ángeles sigue siendo, con mucho, el más afectado, con casi 300.000 casos y 6.989 muertes. El sábado, el Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles confirmó 2.173 nuevos casos y 17 nuevos decesos.

“A medida que nos acercamos al trágico hito de 7.000 muertes en el condado de Los Ángeles y vemos un aumento en los casos, recuerde que las decisiones que tomamos todos los días tienen un impacto significativo en si ralentizamos la propagación del virus”, dijo Bárbara Ferrer, directora de salud pública en un comunicado de prensa. “El virus no se toma un descanso para fiestas o celebraciones”.

De los 17 nuevos decesos reportados en el condado de Los Ángeles, el departamento dijo que 16 tenían más de 50 años y la mayoría padecían problemas de salud subyacentes. La persona menor de 50 años que también falleció tenía problemas de salud subyacentes, informó el departamento.

El departamento dijo que el 29% de los 770 individuos hospitalizados ahora con COVID-19 están siendo tratados en unidades de cuidados intensivos.

A nivel estatal, el número total de casos confirmados llegó a 901.152 el sábado, con un total de 17.323 muertes relacionadas, según funcionarios estatales de salud. Pero la cantidad de casos nuevos en todo el estado se ha estancado y permanece cerca de los niveles observados en la primavera, dijeron las autoridades.

El nuevo virus se considera generalizado en 12 condados que en conjunto comprenden el 42% de la población de California. Otros condados muy afectados incluyen: Riverside, con 65.757 casos y 1.279 muertes; San Bernardino con 62.353 casos y más de 1.000 decesos; Orange con 58.326 casos y 1.444 defunciones; San Diego con casi 54.000 casos y 867 muertes; Kern con casi 34.000 casos y 416 decesos; Fresno con 30.590 casos y 436 defunciones; Sacramento con 25.264 casos y 484 muertes.

En la primavera y el verano, el estado vio un aumento en los casos luego de la decisión del gobernador Gavin Newsom de levantar rápidamente las restricciones de cierre, lo que provocó que de nuevo volvieran a cerrar.

A fines de agosto, el gobernador introdujo lo que llamó reglas de reapertura “más obstinadas”, con un sistema de cuatro niveles basado en datos: el nivel 1 indicaba una transmisión generalizada, mientras que el nivel 4 significaba una transmisión mínima.

El plan dependía de que los condados demostraran éxito en la desaceleración del virus antes de que se permitiera reanudar las actividades comerciales y grupales.

Los expertos en salud le han dado crédito al sistema escalonado por permitirle a California abrir algunos segmentos de su economía sin experimentar un pico de muertes comparable al observado a principios de este año.

California ha logrado evitar lo que los funcionarios de salud llaman una “tercera ola” de infecciones a nivel nacional, pero les preocupan las tentaciones de las reuniones sociales en medio de la proximidad de Halloween y Acción de Gracias.

El número de muertos a nivel nacional por COVID-19 es ahora de más de 223.000, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Ha cobrado la mayor cantidad de vidas en el estado de Nueva York, que ha sufrido más de 33.000 infecciones fatales.

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